Almonacid se vuelca con el memorial ‘De Frutos’

04/07/2016 - 13:40 Alberto Moreno

Grandes maestros del judo mundial se unirán el próximo 9 de julio en el León Felipe

José Luis de Frutos Molinero ha sido una de las grandes figuras del judo nacional. Nacido en Madrid en 1949, llegó a firmar un extenso y prolijo palmarés contando con ocho campeonatos de España, un oro en los Juegos Iberoamericanos o incluso un cuarto puesto en los Juegos Olímpicos de Montreal. El pasado 26 de junio se cumplieron diez años de su repentino fallecimiento y el judo nacional ha querido unirse para recordar su figura.

Y esa fiesta del judo será el próximo 9 de julio en  el pabellón León Felipe de Almonacid de Zorita, la localidad donde nació su madre y en cuya residencia municipal reside su padre. El Ayuntamiento de Almonacid ha querido recordar la figura del gran judoca y ha preparado una intensa jornada con la intención de, según la organización, “dar una alegría a la familia, especialmente a su padre, hija y hermanas, y servir de encuentro a tantos alumnos, compañeros y amigos que disfrutaron del buen hacer del maestro”.

Hace apenas unos meses comenzó a fraguarse la idea del memorial y rápidamente el judo español se movilizó. Las llamadas de históricos y laureados judocas no han parado y ahora son más de un centenar los que han accedido a pasar la velada del 9 de julio.

Entre ellos estarán los grandes maestros, como el seleccionador nacional Young Lee o el noveno dan, Shu Taira. Junto a ellos grandes nombres de este deporte olímpico como el subcampeón del mundo Quino Ruiz; el seleccionador olímpico, Macario García; el subcampeón olímpico, Ernesto Pérez Lobo...

Tampoco faltará la representación alcarreña con el presidente de la Federación de Castilla-La Mancha, José Merino o los judocas Alberto López, Pedro Amalio García y Margarita Montes.

La jornada comenzará a las 10.00 horas con un entrenamiento para los participantes y una ruta turística para los acompañantes por Almonacid. A partir de las 12.30 horas llegará el homenaje propiamente dicho para tener a continuación una comida de hermandad y poner así el punto final a la gran velada del judo nacional.