Año de elecciones
05/01/2015 - 23:00
Apenas habían transcurrido las primeras treinta y seis horas del nuevo año y el secretario provincial del PSOE comparecía en rueda de prensa para hacer balance político del ya finalizado. Poco después, la presidenta provincial del PP brindaba por el entrante 2015 en un sencillo acto con los medios de comunicación dejando también comentarios sobre la actualidad. La cercanía de las elecciones municipales, autonómicas y un poquito más en el horizonte las generales marca ya la acción pública. Todo lo que se haga será analizado en clave electoral y se ejecutará pensando en estas citas. Será este recién estrenado año de especial intensidad, pugnas y emociones por lo mucho que se juegan tantos representantes públicos, pero sobre todo los ciudadanos. Los resultados condicionarán el futuro inmediato de todos.
En la capital habrá algunas inauguraciones como la del centro acuático, el parque de Las Torres y el readaptado Cuartel del Henares, la conclusión definitiva de las obras del casco histórico y la puesta en marcha del Museo Sobrino y del Teatro Moderno. Y ojalá se avance con el campus universitario y la ampliación del Hospital. En la provincia, muy poquito. Algún anuncio sobre el Parador de Molina para que no decaiga el ánimo, las obras de la Tercera Conducción, la puesta en marcha del servicio provincial de recogida de basuras y más avance en el Plan de Carreteras y el desmantelamiento de Zorita. No será pues el 2015 un año que deje grandes infraestructuras y obras. Si cambiará, en cambio, muchos rostros en las diferentes administraciones, aun en el caso de que ganen los que ya están.
Las elecciones siempre significan un ciclo nuevo, otra etapa y el cambio de personas forma parte de ello. Que Dios reparta suerte y bendiga la democracia que tanto nos gusta. Al menos el año terminará con menos paro, más consumo, mejora en las variables económicas y mayor percepción entre los ciudadanos de la recuperación económica ya iniciada. La reforma del IRPF, el bajo precio del petróleo y el descenso del gasto en algunos servicios domésticos como el gas natural, sin duda, ayudará a ello. Queda trabajo por hacer y todavía por sufrir, pero el camino hacia el final de la crisis parece ya sin retorno. Al menos, así lo deseamos.
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