Carlos Alonso, referencia del Alcarreño en el Mundial de Egipto

06/10/2010 - 00:00 Diego Fernández

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El guadalajareño Carlos Alonso, como indica su extraordinario palmarés, es una de las principales referencias tanto del Club Alcarreño de Salvamento como de la selección española en el Mundial de Alejandría, que arranca hoy con el campeonato de naciones –hasta el 9 de este mes– y que vivirá su segunda fase con la disputa de la competición de clubes, del 11 al 16 de octubre.
El deportista comienza hoy su participación en Alejandría
Aunque nada más y nada menos que seis nadadores del Alcarreño participan en la importante cita que arranca hoy como componentes de la ‘roja’ –además del propio Carlos Alonso participan Itziar Abascal, María Luengas, Lorena Morón, Rafa Tamaral y Kiko López–, por experiencia y por currículum Alonso es una voz importante para expresar sus sensaciones antes del comienzo de un Mundial que afronta, tanto él como sus compañeros, con la intención no sólo de participar, sino de realizar un buen papel. El nadador, acostumbrado a participar en eventos relevantes, señala que no le puede la presión: “Me siento bien ante una cita tan importante, preparado”. Tiene por delante “un mes muy intenso. En otros campeonatos llegas al Mundial de Clubes más justo, porque llegas después de cinco días de competición, pero muchas veces también la experiencia que te da el de naciones te hace competir bastante bien en el de clubes”. No estará solo, ni mucho menos, ya que la mitad de los nadadores de la selección pertenecen al Alcarreño. Cada vez son más en el equipo nacional: “Somos el 50%. Este año es de los mejores, aunque siempre tenemos una gran participación. El año pasado estuvimos por lo menos con el 30% de la selección, y en éste somos la mitad de ella, lo que está muy bien”. Y es que, poco a poco, la entidad deportiva guadalajareña se va haciendo un nombre gracias a sus buenos resultados: “Hemos ido a muchos campeonatos por España y regionales y la gente que nos conoce ya sabe que somos buenos, pero la de fuera… Estuvimos, por ejemplo, en Francia, y cuando les decimos de dónde somos se quedan como diciendo: “¿Y por qué hacéis salvamento, y encima tan bien?””
 
Su mejor baza, la tabla
Ahora, de cara al campeonato que empieza en la histórica población egipcia, cree que “en el plano personal mis grandes bazas están en la playa, pruebas dominadas sobre todo por australianos, sudafricanos, neozelandeses y franceses”. Considera que “un muy buen resultado sería llegar a la final, incluso al ‘top ten’, en alguna de las pruebas de playa. La prueba en la que mejor voy es en la tabla: el año pasado fui décimo en el Campeonato Mundial y en éste espero por lo menos igualar o mejorar ese resultado. La medalla está muy difícil. En la única prueba en la que tendría alguna posibilidad sería en la tabla, pero hay muchos australianos y de otros países que llevan haciéndolo desde pequeños. Será difícil, pero se intentará”. En el plano colectivo, indica que “como selección esperamos mejorar los resultados de Alemania, que ya fueron muy buenos, pues quedamos octavos del Mundo. Este año en chicas llevan a un muy buen equipo. En chicos es algo más flojo, pero muy completo. Puntuando en todas las pruebas esperamos mejorar esos resultados. Esperamos alguna medalla en relevos, tanto en el masculino como en el femenino. Alguna de las chicas también tiene muchas posibilidades en las pruebas de piscina de aleta”. En lo que respecta a su club, manifiesta que “el objetivo es hacer un Mundial bastante bueno. Estaría muy bien puntuar en casi todas o todas las pruebas y hacer algún buen papel general. Tenemos relevos muy buenos y esperamos llevarnos medallas, tanto en chicos como en chicas”. El equipo alcarreño se caracteriza por su juventud, por lo que a Carlos Alonso –que, todo sea dicho, nació en 1986– le tocará tener un peso importante: “Va un equipo muy joven. Mi responsabilidad es mucha, de todos los tipos. Vamos pocos mayores con muchos chicos que no han estado en un Mundial. Además, el inglés en Guadalajara no lo tenemos como lengua secundaria precisamente, y en el club se cuentan con los dedos de la mano, y entre los mayores, los que lo hablan...”.