El desempleo "no toca techo"
No toca techo. Cuando nos confiamos pensando en que los datos negativos sobre el desempleo no pueden ser peores, nos levantamos una mañana y nos damos de bruces con las estadísticas que viene a dar la razón a la Ley de Murphy y a aquello de que todo es susceptible de empeorar. Y el desempleo empeora, vaya que si empeora. Cerrábamos 2011 con unos datos escalofriantes: 22.192 parados, teniendo en cuenta los 376 que se sumaron a las listas en el mes de diciembre. Pero no hemos empezado con mejor pie el año. Según los datos del Ministerio de Trabajo e Inmigración, en la provincia, el primer mes de 2012 se cerró con un total de 23.511 parados, con los 1.319 que se sumaron a las listas en enero. Por sectores, en Agricultura se contabilizaron 437 personas, 2.131 el de Industria, 3.624 en Construcción, 16.244 en el sector Servicios y 1.075 el del colectivo Sin Empleo Anterior. Todas las actividades registraron un incremento aunque fue en Servicios en el que el aumento fue más considerable, 1.145 nuevos inscritos. Demasiado lejos quedan aquellas cifras que reflejaban paro técnico y, ahora, nos conformaríamos con que la cola del INEM dejase de crecer. No en vano, con un 6% de incremento, el desempleo vuelve a batir récords en nuestra provincia pues nunca se había contabilizado un aumento tan desmesurado en un solo mes. Lamentablemente ésta no es una excepción. La economía arrancó el año destruyendo más de 9.000 empleos al día en nuestro país. Se pone de manifiesto, una vez más, que además de la profunda crisis económica que está viviendo España, las reformas laborales puestas en marcha por el Gobierno anterior no han evitado que el despido sea el principal mecanismo de ajuste ante la caída de la demanda. Urge, pues, que el ejecutivo de Mariano Rajoy ponga encima de la mesa un conjunto de medidas que favorezcan la contratación y, sobre todo, que devuelvan la confianza a trabajadores y empresarios. Pero eso debe ser más pronto que tarde.