El presidente chadiano proclama su control local
01/10/2010 - 09:45
Por: EUROPA PRESS
El presidente de Chad, Idriss Déby, compareció ayer por primera vez tras la ofensiva rebelde, durante la que se llegó incluso a temer por su vida. Lo hizo para lanzar un mensaje de tranquilidad y confirmar que el Gobierno tienen "control total" sobre la situación de Yamena, al tiempo que negó cualquier intervención militar francesa de ayuda.
Lo que toca ahora, después de que el lunes se acordase un débil alto el fuego en los combates, es hacer balance del drama, que por el momento se estima que provocó la muerte de al menos "un centenar" de personas, según un responsable del Comité Internacional de Cruz Roja (CICR) en la capital, a la espera de un más que posible incremento de los datos.
"Tenemos el control total de la situación, no sólo en la capital, sino en todo el país". Con estas palabras, Déby salió hoy en rueda de prensa por primera vez desde que comenzase la ofensiva rebelde, que parece concluida hasta nuevo aviso. Compareció en el palacio presidencial ataviado con el uniforme militar, después de reunirse con el ministro de Defensa francés, Herve Morin. La visita del dirigente galo pretende servir de respaldo a las tropas de ese país desplegadas en Chad y mostrar su apoyo al Gobierno, por el quien el lunes el presidente francés, Nicolas Sarkozy, advirtió que "podría" tomar parte con ayuda militar en vista de la condena al movimiento miliciano por parte del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas.
Los rebeldes no se rinden
Un portavoz rebelde, Ali Ordjo Hemchi, advirtió que en caso de ataque de una fuerza extranjera no permanecerán impasible. "Estamos determinados a alcanzar nuestros objetivos", afirmó, aludiendo al "derecho legítimo" de defensa de garantía, un día después de que otro miliciano acusase directamente a las tropas francesas de intervenir en el conflicto y causar víctimas civiles en Yamena. En este sentido, Déby aclaró que Francia no ha colaborado de forma directa en la respuesta del Ejército chadiano a los rebeldes, a quienes las autoridades persiguen. "Los cómplices locales han sido capturados, algunos han huido, otros se han ido con los mercenarios", señaló. Como instigador de estos movimientos, el presidente chadiano situó a su homólogo sudanés, Omar Hassan al Bashir, quien habría apoyado a los rebeldes y "saqueado" Chad.
"Tenemos el control total de la situación, no sólo en la capital, sino en todo el país". Con estas palabras, Déby salió hoy en rueda de prensa por primera vez desde que comenzase la ofensiva rebelde, que parece concluida hasta nuevo aviso. Compareció en el palacio presidencial ataviado con el uniforme militar, después de reunirse con el ministro de Defensa francés, Herve Morin. La visita del dirigente galo pretende servir de respaldo a las tropas de ese país desplegadas en Chad y mostrar su apoyo al Gobierno, por el quien el lunes el presidente francés, Nicolas Sarkozy, advirtió que "podría" tomar parte con ayuda militar en vista de la condena al movimiento miliciano por parte del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas.
Los rebeldes no se rinden
Un portavoz rebelde, Ali Ordjo Hemchi, advirtió que en caso de ataque de una fuerza extranjera no permanecerán impasible. "Estamos determinados a alcanzar nuestros objetivos", afirmó, aludiendo al "derecho legítimo" de defensa de garantía, un día después de que otro miliciano acusase directamente a las tropas francesas de intervenir en el conflicto y causar víctimas civiles en Yamena. En este sentido, Déby aclaró que Francia no ha colaborado de forma directa en la respuesta del Ejército chadiano a los rebeldes, a quienes las autoridades persiguen. "Los cómplices locales han sido capturados, algunos han huido, otros se han ido con los mercenarios", señaló. Como instigador de estos movimientos, el presidente chadiano situó a su homólogo sudanés, Omar Hassan al Bashir, quien habría apoyado a los rebeldes y "saqueado" Chad.