Expresión de libertad

A veces, el discurso político como esclavitud obliga a retorcer ciertas expresiones para que aparezcan más demagógicas, impresionantes  o atractivas. Lo que consiguen es caer en el error y en el engaño. Cuando, en el lenguaje democrático, se dice libertad de expresión, lo que se quiere decir es una determinada expresión de la libertad. Sin embargo, parece que impacta más diciendo “libertad de expresión”. Se manda por delante a la libertad haciéndola la reina y el centro de atención para despertar representaciones del oyente, adhesiones, o suscitar reminiscencias, removiendo aspiraciones, experiencias y sentimientos del ciudadano. Se maneja la psicología social del lenguaje sin importarles la corrección  gramatical o textual. Se saluda a la libertad en una sociedad organizada.

No es la libertad el frontispicio de la sociedad sino el amor y la solidaridad quienes aportan seguridad a la convivencia. No es el sentimiento básico y absoluto de los ciudadanos ¿Con quién dejamos a nuestros hijos? ¿En manos de quién confiamos el cuidado de  las personas y de los bienes? Todos preferimos una sociedad en orden y armonía que una sociedad soliviantada, agitada, revuelta, interesada. Pero algunos entienden su función en ella como  ir enfrentando y creando conflictos haciendo de la desigualdad el arma de su lucha. No queremos que sea el interés el motor o el motivo de la democracia y de los sistemas de gobierno. Vivimos en una sociedad egoísta y el egoísmo sólo se combate con el desprendimiento y el desinterés. No queremos que nos gobierne el interés de unos cuantos. No tenemos que permitir que la diferencia nos lleve a la indiferencia ni que el interés genere desinterés pues alguno estará interesado en nuestro desinterés..

Sentimos y lamentamos que los partidos políticos lo mediatizan todo, pensamiento, educación, opinión, expresión, manifestación. Para muchos ciudadanos ellos son la única referencia a la hora de pensar y decidir. ¿Consultar a las bases? Sólo cuando ellas puedan ratificar lo pensado y anticipado  por el aparato del partido que lo controla todo. ¡Cuánto engaño! La libertad antropológica y abstracta no existe, Existe la libertad condicional aunque la expresión nos pueda llevar a otro terreno. Lo que existen son expresiones concretas de ella que forman los derechos sin olvidar que el primer derecho regulado es la propia libertad.  Se pasa rápidamente de la metafísica a la sociología de la libertad.

Libertad de expresión no es libertad en expresión o expresión de libertad cuando se usa para acallar la libertad de los demás que comienza donde termina la mía. Podemos parabolizar al poeta: ¿Mi  libertad? No, la libertad.  Ven conmigo a buscarla. ¿La tuya? Guárdatela.