La Comisión de Seguimiento del Protocolo sobre Identidad y Expresión de Género aboga por la formación de profesionales en contacto con menores

07/10/2017 - 10:25 Redacción

Desde su constitución, en el mes de mayo, ya se han puesto en marcha acciones formativas, y se han comenzado a aplicar las pautas establecidas en el Protocolo para garantizar el pleno desarrollo de los menores.

La Comisión provincial de Seguimiento del Protocolo de Actuación dirigido a Menores sobre Identidad y Expresión de Género ha analizado algunos aspectos relativos a la aplicación del protocolo y ha ahondando en la necesaria formación del personal que está en contacto con los menores. Se trata de la segunda reunión que celebra esta Comisión, después de que quedara constituida el pasado mes de mayo.

La directora provincial del Instituto de la Mujer, Charo Narro, preside esta comisión, de la que también forman parte la directora provincial de Sanidad, Margarita Gascueña, los directores provinciales de Educación, Cultura y Deportes, Faustino Lozano, y de Bienestar Social, José Luis Vega, así como personal técnico de dichas Consejerías, representantes de la Asociación WADO, del colectivo LGTBI de Castilla-La Mancha y de la Fundación Chrysallis.

El Protocolo de Actuación Dirigido a Menores sobre Identidad y Expresión de Género se presentó a finales del mes de enero del presente año, impulsado por el Instituto de la Mujer de Castilla-La Mancha para establecer pautas de intervención para la adecuada atención y la necesaria protección a las y los menores de edad no conformes con su identidad de género, reconociendo su derecho a la identidad sexual, garantizando el libre desarrollo de su personalidad y la no discriminación por motivos de género.

El Protocolo contempla medidas concretas de actuación, así como estrategias de acción coordinadas y establece la creación de las cinco comisiones de seguimiento provinciales más una regional para vigilar el cumplimiento del documento, así como para analizar los problemas que pudieran derivarse de su aplicación. Las comisiones tienen entre sus cometidos impulsar la puesta en marcha de las medidas contempladas en el protocolo, proponer las actuaciones que fueran necesarias para su perfeccionamiento adaptándolo a las nuevas necesidades que vayan surgiendo y hacer un seguimiento y evaluación del nivel del cumplimiento del documento.

En la primera reunión de la comisión provincial todas las partes coincidieron en la necesidad de sensibilizar y formar al personal que puede trabajar con menores trans o sus familiares, para que conozcan los derechos y necesidades de estos menores con el objetivo de normalizar totalmente su día a día y facilitar así su desarrollo personal. Transcurridos algo más de cuatro meses desde ese encuentro, la experiencia ha evidenciado que esa formación es muy necesaria, como demuestra el interés manifestado ante las acciones formativas que ya se han puesto en marcha.

Esta misma semana cerca de 60 profesionales han participado en un curso organizado por la Dirección provincial de Bienestar Social, bajo el título de “La transexualidad en la infancia y la adolescencia. ¿Qué puedo aportar yo?”.

La actividad formativa se ha desarrollado en la sede de la Dirección provincial de Bienestar Social y en la misma han participado personal sanitario, educativo, de hogares de menores, personal técnico de protección y reforma y del ámbito social.

La directora provincial del Instituto de la Mujer ha destacado la voluntad de todos los miembros de la Comisión de que el protocolo se aplique “ya que se trata de una herramienta muy útil para conseguir que todos los menores puedan desarrollar su personalidad libremente y en igualdad”, si bien Narro ha puntualizado que para aplicar las pautas establecidas es necesario que el personal que está en contacto con esos menores cuente con la necesaria formación y sensibilización para garantizar su efectiva aplicación.

La intención de la Comisión de Seguimiento del Protocolo es ir programando una oferta formativa específica para los distintos colectivos profesionales que trabajan con menores en la provincia y que, junto a las familias, son quienes primero pueden detectar si algún menor está sufriendo un problema derivado de su identidad de género y corregir estas situaciones.

En la Comisión además se han analizado algunos casos concretos de la provincia con la intención de solventar situaciones que puedan afectar al desarrollo personal de esos menores.