La ONU confía en la promesa de Myanmar de aceptar la ayuda
01/10/2010 - 09:45
Por: COLPISA
Durante un viaje a Birmania, Ban consiguió arrancar el viernes pasado al número uno de la junta, el generalísimo Than Shwe, un acuerdo de abrir el país a todos los trabajadores humanitarios internacionales.
Ban y los países occidentales intentaron además presionar al régimen militar alegando la urgencia de salvar vidas, dando ayuda a los 2,4 millones de siniestrados por el Nargis, en una conferencia celebrada el domingo en Rangún. La junta prometió en esa ocasión decenas de millones de dólares para la reconstrucción.
Birmania cifra en más de 10.000 millones de dólares los daños ocasionados por una de las peores catástrofes naturales de la historia reciente, que dejó al menos 133.600 muertos y desaparecidos entre los días 2 y 3 de mayo en el sur del país. Ban Ki-moon elogió un nuevo espíritu de cooperación y un clima de confianza, pero reconoció que todavía hay divergencias con el régimen militar birmano, históricamente reticente ante los países occidentales y obsesionado por defender su soberanía.
La ONU considera que más de tres semanas después de la tragedia el país todavía está claramente en una fase de urgencia, pese a que la junta ya habla de reconstrucción. Lo importante es que el generalísimo Than Shwe y yo tenemos un acuerdo, aunque no creo que estemos de acuerdo en todo, declaró Ban Ki-moon. Pese a la catástrofe, la junta mantuvo el sábado pasado en las zonas siniestradas la segunda vuelta de un referéndum sobre una nueva Constitución, y el lunes proclamó la victoria, al anunciar que el proyecto fue aprobado por un 92,93% de los votos y una participación del 93% en las regiones de Rangún y el delta del Irrawaddy.
Nueva Constitución
Según la junta, la nueva Constitución, redactada bajo su tutela, abrirá la vía a unas elecciones plurales en 2010.
La opositora Liga Nacional por la Democracia (LND), de la Premio Nobel de la Paz Aung San Suu Kyi, denunció que el texto fortalece el poder de los militares y criticó al régimen por celebrar el referéndum en lugar de centrarse en ayudar a la población tras el paso del ciclón. El primer ministro birmano Thein Sein, sin dar marcha atrás a las promesas del jefe de la junta Than Shwe, fue más prudente en sus declaraciones sobre la ayuda humanitaria internacional. Birmania examinará (caso por caso) la posibilidad de dejar entrar a los cooperantes que deseen ayudar en las tareas de reconstrucción y rehabilitación, en función de nuestras prioridades, afirmó.
Francia renunció a descargar en Birmania un barco que transportaba 1.000 toneladas de ayuda, ante el rechazo de las autoridades. El navío de la Armada francesa Le Mistral se dirigió al puerto tailandés de Phuket, y entregará su cargamento al Programa Mundial de Alimentos (PMA) de la ONU. Para las organizaciones humanitarias, lo importante es acceder lo antes posible y con el mayor número de efectivos posible a la región aislada del delta del Irrawaddy (suroeste) y poder trabajar libremente. Tenemos una autorización verbal y un acuerdo de principio para que los extranjeros puedan entrar en el delta, pero hasta el día de hoy no tenemos nada escrito, declaró Chris Webster, de la ONG World Vision.
Unicef pide que no trasladen a los huérfanos a orfanatos
El Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) ha pedido a la Junta Militar birmana que no aísle a los al menos 2.000 huérfanos que ha dejado el paso del ciclón Nargis trasladándoles a orfanatos estatales.
Deberíamos intentar que los niños permanezcan en un ambiente familiar como prioridad, y no en instituciones, declaró a Reuters Anne-Claire Dufay, responsable de protección infantil de UNICEF en la antigua Birmania. En su opinión, las autoridades birmanas deberían intentar que (los niños) permanezcan en su comunidad y hasta que se encuentre a sus familias los menores podrían ser acogidos por otras familias que cuiden de ellos temporalmente. Ese es el mensaje que estamos enviando, señaló. La Junta
Birmania cifra en más de 10.000 millones de dólares los daños ocasionados por una de las peores catástrofes naturales de la historia reciente, que dejó al menos 133.600 muertos y desaparecidos entre los días 2 y 3 de mayo en el sur del país. Ban Ki-moon elogió un nuevo espíritu de cooperación y un clima de confianza, pero reconoció que todavía hay divergencias con el régimen militar birmano, históricamente reticente ante los países occidentales y obsesionado por defender su soberanía.
La ONU considera que más de tres semanas después de la tragedia el país todavía está claramente en una fase de urgencia, pese a que la junta ya habla de reconstrucción. Lo importante es que el generalísimo Than Shwe y yo tenemos un acuerdo, aunque no creo que estemos de acuerdo en todo, declaró Ban Ki-moon. Pese a la catástrofe, la junta mantuvo el sábado pasado en las zonas siniestradas la segunda vuelta de un referéndum sobre una nueva Constitución, y el lunes proclamó la victoria, al anunciar que el proyecto fue aprobado por un 92,93% de los votos y una participación del 93% en las regiones de Rangún y el delta del Irrawaddy.
Nueva Constitución
Según la junta, la nueva Constitución, redactada bajo su tutela, abrirá la vía a unas elecciones plurales en 2010.
La opositora Liga Nacional por la Democracia (LND), de la Premio Nobel de la Paz Aung San Suu Kyi, denunció que el texto fortalece el poder de los militares y criticó al régimen por celebrar el referéndum en lugar de centrarse en ayudar a la población tras el paso del ciclón. El primer ministro birmano Thein Sein, sin dar marcha atrás a las promesas del jefe de la junta Than Shwe, fue más prudente en sus declaraciones sobre la ayuda humanitaria internacional. Birmania examinará (caso por caso) la posibilidad de dejar entrar a los cooperantes que deseen ayudar en las tareas de reconstrucción y rehabilitación, en función de nuestras prioridades, afirmó.
Francia renunció a descargar en Birmania un barco que transportaba 1.000 toneladas de ayuda, ante el rechazo de las autoridades. El navío de la Armada francesa Le Mistral se dirigió al puerto tailandés de Phuket, y entregará su cargamento al Programa Mundial de Alimentos (PMA) de la ONU. Para las organizaciones humanitarias, lo importante es acceder lo antes posible y con el mayor número de efectivos posible a la región aislada del delta del Irrawaddy (suroeste) y poder trabajar libremente. Tenemos una autorización verbal y un acuerdo de principio para que los extranjeros puedan entrar en el delta, pero hasta el día de hoy no tenemos nada escrito, declaró Chris Webster, de la ONG World Vision.
Unicef pide que no trasladen a los huérfanos a orfanatos
El Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) ha pedido a la Junta Militar birmana que no aísle a los al menos 2.000 huérfanos que ha dejado el paso del ciclón Nargis trasladándoles a orfanatos estatales.
Deberíamos intentar que los niños permanezcan en un ambiente familiar como prioridad, y no en instituciones, declaró a Reuters Anne-Claire Dufay, responsable de protección infantil de UNICEF en la antigua Birmania. En su opinión, las autoridades birmanas deberían intentar que (los niños) permanezcan en su comunidad y hasta que se encuentre a sus familias los menores podrían ser acogidos por otras familias que cuiden de ellos temporalmente. Ese es el mensaje que estamos enviando, señaló. La Junta