La revisión de la ayuda de 400 euros
16/08/2012 - 17:48
Tras semanas de polémicas, Rajoy esperaba hasta el último minuto, para dar marcha atrás y adoptar la decisión más justa y más sensata. El presidente del Gobierno hacía un ejercicio de realismo al decidir la prórroga de la ayuda de 400 euros mensuales, durante seis meses, a los parados que han agotado el subsidio de desempleo. Hoy mismo, el Diputado Nacional del PP por Guadalajara, Antonio Román, calificaba de buena noticia el anuncio realizado hace 48 horas por el presidente del Gobierno, relativo a la prórroga del Plan Prepara.
En estos momentos son 200.000 los españoles que perciben esos 400 euros, pero los sindicatos calculan que en los próximos meses, debido al incremento del paro y la finalización de la prestación por desempleo, la cifra puede triplicarse. Es previsible, pues, que haya que incrementar los 750 millones anuales del plan Prepara. Aun así, es un coste que debe ser considerado asumible si de lo que se trata es de evitar un agravamiento de las ya precarias condiciones de vida de muchos ciudadanos y el riesgo de fractura social. Sin embargo, el mantenimiento del Plan no supone que las cosas no vayan a cambiar. El Plan Prepara sea reevaluado con el propósito de que se mejore tanto la eficacia como la efectividad del mismo. Es probable que el Gobierno aumente las exigencias para que quienes perciben esos 400 euros cumplan la contrapartida de realizar programas de formación laboral que favorezcan su reinserción en el mercado de trabajo. Pero no hay que engañarse: los empleos no florecerán por sí solos, al igual que muchos estudiantes no logran un trabajo por muchos títulos académicos que acumulen. Porque una de las causas de fondo de la dramática situación de nuestra economía es la falta de inversión, lo que alimenta el círculo vicioso de la falta de empleo y el bajísimo consumo. Mientras esta dinámica no se rompa, será muy difícil que descienda el paro y se pueda prescindir de ayudas públicas como la que estos días ha estado pendiente de un hilo.
En estos momentos son 200.000 los españoles que perciben esos 400 euros, pero los sindicatos calculan que en los próximos meses, debido al incremento del paro y la finalización de la prestación por desempleo, la cifra puede triplicarse. Es previsible, pues, que haya que incrementar los 750 millones anuales del plan Prepara. Aun así, es un coste que debe ser considerado asumible si de lo que se trata es de evitar un agravamiento de las ya precarias condiciones de vida de muchos ciudadanos y el riesgo de fractura social. Sin embargo, el mantenimiento del Plan no supone que las cosas no vayan a cambiar. El Plan Prepara sea reevaluado con el propósito de que se mejore tanto la eficacia como la efectividad del mismo. Es probable que el Gobierno aumente las exigencias para que quienes perciben esos 400 euros cumplan la contrapartida de realizar programas de formación laboral que favorezcan su reinserción en el mercado de trabajo. Pero no hay que engañarse: los empleos no florecerán por sí solos, al igual que muchos estudiantes no logran un trabajo por muchos títulos académicos que acumulen. Porque una de las causas de fondo de la dramática situación de nuestra economía es la falta de inversión, lo que alimenta el círculo vicioso de la falta de empleo y el bajísimo consumo. Mientras esta dinámica no se rompa, será muy difícil que descienda el paro y se pueda prescindir de ayudas públicas como la que estos días ha estado pendiente de un hilo.
