Las administraciones apuestan por la unidad contra la violencia de género

25/11/2010 - 17:09 Redacción

 

El acto institucional organizado por las cuatro administraciones (Ayuntamiento de Guadalajara, Diputación, Junta de Comunidades y Gobierno de España) con motivo del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia de Género contra la Mujer ha servido para poner de manifiesto la unidad en el compromiso contra esta lacra social. El Centro San José se ha llenado con representantes de todas las instituciones del Estado, asociaciones ciudadanas y público en general. Entre los asistentes ha habido también una amplia representación de escolares del colegio Santa Ana
El acto ha girado en torno a la campaña “Saca tarjeta roja al maltrato”, con la proyección de un audiovisual en el que personajes famosos utilizan este motivo para expresar su rechazo a los malos tratos contra las mujeres. La participación social ha estado representada por la Asociación de Mujeres Divorciadas y Separadas de Azuqueca, cuya presidenta, María José Adán, ha leído varios fragmentos de cartas escritas por escolares de esa localidad y dirigidas a mujeres maltratadas. Como colofón, la actriz Pastora Vega ha leído un manifiesto elaborado para la ocasión y se ha proyectado el cortometraje “En mis manos”, ganador del cuarto concurso de cortometrajes por la igualdad. Antes, ha intervenido en nombre de las cuatro administraciones la presidenta de la Diputación, María Antonia Pérez León, como responsable de la institución encargada de organizar el acto este año. Pérez León ha asegurado que “la violencia de género es el terrorismo que más víctimas ocasiona en la sociedad actual”, y ha instado a promover tanto el apoyo a las víctimas como la denuncia social de los maltratadores. “Es imprescindible un mayor compromiso por parte de todos. Las víctimas tienen que saber que no están solas, que cuando acusan, la sociedad y la administración están a su lado, que van a resolver su problema, que además van a estar protegidas y que los agresores serán perseguidos hasta que paguen por su comportamiento. Si no queremos ser cómplices tenemos que asumir nuestra responsabilidad, porque tan condenable es quien ejerce la violencia como la sociedad que la mantiene, la perpetúa y la tolera. Quien no denuncia el mal, permite que se haga”, ha afirmado. Aunque ha subrayado el avance de las leyes en la lucha contra los malos tratos, ha recordado que la aplicación de una normativa no es suficiente. “Para acabar con la violencia de género es necesaria una educación en valores. El cine, la televisión, los video juegos, la publicidad, los chistes, las conversaciones de bar… están repletos de mensajes y actitudes machistas que denigran el papel de la mujer y su posición social. Y lo queramos o no, ahí está el germen de la violencia. La educación es una buena vacuna para este germen”. También ha insistido en la necesidad de generar oportunidades para la igualdad, evitando la dependencia social y económica de las mujeres en relación con los hombres. Por último, se ha dirigido a los hombres para reclamarles una reacción más contundente ante los comportamientos machistas. “Despertemos las conciencias adormecidas y animemos a toda la sociedad a tomar cartas en este asunto. Tenemos la obligación, más unidos que nunca, de sacar tarjeta roja al maltratador”, ha concluido