Las lluvias ralentizan la evacuación de los afectados
01/10/2010 - 09:45
Por: EUROPA PRESS
INUNDACIONES PAKISTÁN
Las fuertes lluvias están entorpeciendo las operaciones de rescate de Pakistán, según ha informado ActionAid, organización a través de la que Ayuda en Acción trabaja en este país, que está evacuando a gente atrapada por las peores inundaciones registradas en el país asiático en 80 años.
Así, la organización señala que los helicópteros gubernamentales lanzan sacos de comida en las zonas inaccesibles y recuerda que la lluvia había parado hace unos días, permitiendo trabajar a los equipos de rescate y emergencia, pero la situación ha vuelto a ser un desafío para los equipos por las persistentes lluvias. En este sentido, puntualiza que hay alrededor de 2,5 millones de personas afectadas y 1.500 han muerto a consecuencia de las inundaciones. ActionAid está apoyando a 3.300 familias (cerca de 23.000 personas) en Punjab, Kot Adu, Layyah, Khoshab y Bhakar, las áreas más duramente golpeadas.
Además, añade que ha levantado doce hospitales de campaña en estas áreas para proveer de medicinas y atención médica y que, en los distritos de Azad Kashmir y Jyber Pajtoonjwa, donde están las áreas más duramente golpeadas de Swat y Swabi, la organización está repartiendo sábanas, colchones, y mosquiteras a los supervivientes desplazados.
El trabajador en la zona Zia Nawab indica que la gente está esperando desesperadamente a los equipos de salvamento y socorro pero que la respuesta del Gobierno no puede llegar a todos. El acceso a las zonas más afectadas es difícil, ya que las carreteras y puentes han sido dañados y, con más lluvia, los ríos se han desbordado y estamos en un punto de inflexión. Las cosas pueden empeorar, concluye.
Falta de alimentos
El Programa Mundial de Alimentos (PAM) ha advertido este miércoles de que la zonas afectadas por las inundaciones que se han producido en Pakistán, las peores registradas desde hace 80 años, se enfrentan a una escasez de alimentos que puede poner en peligro numerosas vidas.
Amjad Jameel, portavoz del PAM, declaró a la agencia Reuters en una entrevista telefónica que el personal de esta organización está tratando de llegar con urgencia a las áreas inundadas del noroeste donde el suministro de alimentos ha quedado interrumpido.
Las inundaciones, durante cinco o seis días, han causado estragos. La gente ha perdido sus reservas de comida, los mercados no funcionan, las tiendas se han derrumbado. En definitiva, la gente tiene una enorme necesidad de comida, explicó.
La catástrofe, que comenzó hace casi una semana y se ha cobrado más de 1.400 vidas, probablemente se agudice ya que se han pronosticado más precipitaciones. Además, podría producirse una crisis sanitaria si hay un brote de enfermedades que se transmiten por el agua, como el cólera.
ENFERMEDADES
Según el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), las inundaciones tendrán graves efectos en una población que ya estaba en una situación de vulnerabilidad. Debido a que gran parte de la infraestructura sanitaria de los lugares más perjudicadas ha quedado destruida, ahora una de nuestras prioridades es hacer todo lo que está a nuestro alcance para evitar la propagación de enfermedades que se transmiten por el agua, señaló Bernadette Gleeson, delegada de salud del CICR en Islamabad.
Intentamos volver a poner en funcionamiento los sistemas de distribución de agua y entregamos jabón y lavabos con la esperanza de evitar muchos de los problemas sanitarios que podrían surgir si un gran número de personas tuviera que utilizar fuentes de agua contaminadas, agregó en un comunicado.
Con este fin, se han desplegado equipos multidisciplinarios, que cuentan con personal sanitario, ingenieros especializados en abastecimiento de agua y expertos en seguridad económica, en las partes más afectadas de Jyber Pajtunjwa (la antigua Provincia de la Frontera del Noroeste), las Zonas Tribales de Administración Federal y Punjab.
Además, añade que ha levantado doce hospitales de campaña en estas áreas para proveer de medicinas y atención médica y que, en los distritos de Azad Kashmir y Jyber Pajtoonjwa, donde están las áreas más duramente golpeadas de Swat y Swabi, la organización está repartiendo sábanas, colchones, y mosquiteras a los supervivientes desplazados.
El trabajador en la zona Zia Nawab indica que la gente está esperando desesperadamente a los equipos de salvamento y socorro pero que la respuesta del Gobierno no puede llegar a todos. El acceso a las zonas más afectadas es difícil, ya que las carreteras y puentes han sido dañados y, con más lluvia, los ríos se han desbordado y estamos en un punto de inflexión. Las cosas pueden empeorar, concluye.
Falta de alimentos
El Programa Mundial de Alimentos (PAM) ha advertido este miércoles de que la zonas afectadas por las inundaciones que se han producido en Pakistán, las peores registradas desde hace 80 años, se enfrentan a una escasez de alimentos que puede poner en peligro numerosas vidas.
Amjad Jameel, portavoz del PAM, declaró a la agencia Reuters en una entrevista telefónica que el personal de esta organización está tratando de llegar con urgencia a las áreas inundadas del noroeste donde el suministro de alimentos ha quedado interrumpido.
Las inundaciones, durante cinco o seis días, han causado estragos. La gente ha perdido sus reservas de comida, los mercados no funcionan, las tiendas se han derrumbado. En definitiva, la gente tiene una enorme necesidad de comida, explicó.
La catástrofe, que comenzó hace casi una semana y se ha cobrado más de 1.400 vidas, probablemente se agudice ya que se han pronosticado más precipitaciones. Además, podría producirse una crisis sanitaria si hay un brote de enfermedades que se transmiten por el agua, como el cólera.
ENFERMEDADES
Según el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), las inundaciones tendrán graves efectos en una población que ya estaba en una situación de vulnerabilidad. Debido a que gran parte de la infraestructura sanitaria de los lugares más perjudicadas ha quedado destruida, ahora una de nuestras prioridades es hacer todo lo que está a nuestro alcance para evitar la propagación de enfermedades que se transmiten por el agua, señaló Bernadette Gleeson, delegada de salud del CICR en Islamabad.
Intentamos volver a poner en funcionamiento los sistemas de distribución de agua y entregamos jabón y lavabos con la esperanza de evitar muchos de los problemas sanitarios que podrían surgir si un gran número de personas tuviera que utilizar fuentes de agua contaminadas, agregó en un comunicado.
Con este fin, se han desplegado equipos multidisciplinarios, que cuentan con personal sanitario, ingenieros especializados en abastecimiento de agua y expertos en seguridad económica, en las partes más afectadas de Jyber Pajtunjwa (la antigua Provincia de la Frontera del Noroeste), las Zonas Tribales de Administración Federal y Punjab.