Mueren cuatro libaneses y un israelí en un enfrentamiento fronterizo
01/10/2010 - 09:45
Por: EUROPA PRESS
Oriente Próximo
Hariri denuncia esta agresión e Israel presentará una queja ante la ONU
El primer ministro libanés, Saad al Hariri, ha denunciado la violación de la soberanía libanesa por parte de Israel, dijo su oficina en un comunicado, el cual añade que el jefe del Gobierno ha contactado con el presidente egipcio, Hosni Mubarak, para hablar de cómo hacer frente a esta agresión israelí contra el Ejército libanés. Es necesario rechazar cualquier intento de agresión, sean cuales sean las circunstancias, subrayó Suleiman, que abogó por recurrir a la diplomacia para abordar este asunto.
Sin embargo, la versión del Ejército hebreo es que sus soldados recibieron disparos mientras realizaban una actividad rutinaria en territorio israelí, entre una valla de seguridad israelí y la línea de separación definida por la ONU.
Un helicóptero israelí disparó dos misiles contra un puesto militar libanés situado cerca de la localidad de Adaisseh, destruyendo un vehículo blindado de transporte de personal. Varios testigos añadieron que los israelíes usaron su artillería contra la localidad. Una fuente de las fuerzas de seguridad precisó que murieron tres soldados y un periodista libaneses y que otras cinco personas resultaron heridas, mientras que la televisión de la milicia libanesa Hezbolá, Al Manar, señaló que también falleció en la frontera un soldado hebreo.
Queja de Israel
El Ministerio de Asuntos Exteriores israelí anunció que va a presentar una queja ante la ONU por lo ocurrido y acusó a Beirut de incumplir la resolución del Consejo de Seguridad que puso fin a la guerra de 2006. Israel considera que el Gobierno libanés es el responsable de este grave incidente y advierte de (posibles) complicaciones si las violaciones continúan, manifestó en un comunicado.
Después del enfrentamiento fronterizo, la Fuerza Interina de Naciones Unidas en Líbano (FINUL) ha pedido a los Ejércitos libanés e israelí que ejerzan la máxima contención. Es la primera vez que cualquiera de las partes sufre bajas desde el conflicto de 2006, en el que perdieron la vida unas 1.200 personas en Líbano, la mayoría civiles, y 158 en Israel, la mayoría soldados.Si se produjera una nueva guerra, ésta podría ser aún más devastadora que la anterior, ya que Hezbolá contra la que Israel lucho en 2006 tiene un arsenal de 40.000 cohetes, según los datos de los que dispone el Estado hebreo. Además, Israel ha amenazado con atacar las infraestructuras de Líbano si surge un nuevo conflicto con la milicia chií.Por su parte, la Alta Representante de la Unión Europea para la Política Exterior y la Seguridad Común, Catherine Ashton, expresó su preocupación por el enfrentamiento producido en la frontera israelo-libanesa y ha pedido a las partes hacer gala de contención y evitar una escalada de violencia. Se deben dar pasos en las dos partes de la frontera para prevenir una tensión mayor o cualquier forma de violencia, indica Asthon en un comunicado.
La UE subraya la necesidad de que tanto Israel como Líbano garanticen sin obstáculos la aplicación de la Resolución 1701 de Naciones Unidas y el papel de UNIFIL. Ashton indica, finalmente, que la UE apoya una investigación urgente y completa sobre el incidente de la frontera en el que han fallecido cinco personas, cuatro libaneses y un militar israelí.
Un helicóptero israelí disparó dos misiles contra un puesto militar libanés situado cerca de la localidad de Adaisseh, destruyendo un vehículo blindado de transporte de personal. Varios testigos añadieron que los israelíes usaron su artillería contra la localidad. Una fuente de las fuerzas de seguridad precisó que murieron tres soldados y un periodista libaneses y que otras cinco personas resultaron heridas, mientras que la televisión de la milicia libanesa Hezbolá, Al Manar, señaló que también falleció en la frontera un soldado hebreo.
Queja de Israel
El Ministerio de Asuntos Exteriores israelí anunció que va a presentar una queja ante la ONU por lo ocurrido y acusó a Beirut de incumplir la resolución del Consejo de Seguridad que puso fin a la guerra de 2006. Israel considera que el Gobierno libanés es el responsable de este grave incidente y advierte de (posibles) complicaciones si las violaciones continúan, manifestó en un comunicado.
Después del enfrentamiento fronterizo, la Fuerza Interina de Naciones Unidas en Líbano (FINUL) ha pedido a los Ejércitos libanés e israelí que ejerzan la máxima contención. Es la primera vez que cualquiera de las partes sufre bajas desde el conflicto de 2006, en el que perdieron la vida unas 1.200 personas en Líbano, la mayoría civiles, y 158 en Israel, la mayoría soldados.Si se produjera una nueva guerra, ésta podría ser aún más devastadora que la anterior, ya que Hezbolá contra la que Israel lucho en 2006 tiene un arsenal de 40.000 cohetes, según los datos de los que dispone el Estado hebreo. Además, Israel ha amenazado con atacar las infraestructuras de Líbano si surge un nuevo conflicto con la milicia chií.Por su parte, la Alta Representante de la Unión Europea para la Política Exterior y la Seguridad Común, Catherine Ashton, expresó su preocupación por el enfrentamiento producido en la frontera israelo-libanesa y ha pedido a las partes hacer gala de contención y evitar una escalada de violencia. Se deben dar pasos en las dos partes de la frontera para prevenir una tensión mayor o cualquier forma de violencia, indica Asthon en un comunicado.
La UE subraya la necesidad de que tanto Israel como Líbano garanticen sin obstáculos la aplicación de la Resolución 1701 de Naciones Unidas y el papel de UNIFIL. Ashton indica, finalmente, que la UE apoya una investigación urgente y completa sobre el incidente de la frontera en el que han fallecido cinco personas, cuatro libaneses y un militar israelí.