Palabras vacías

22/09/2018 - 10:47 Antonio Yagüe

Nadie sabe cómo llenar esta España rural en riesgo de desertización ni si es necesario hacerlo..

Seis presidentes autonómicos (con empate PSOE-PP) de la España vacía, como bautizó Sergio del Molino con acertada metáfora, han celebrado en Zaragoza la enésima cumbre sobre retos de sus territorios despoblados que suman el 60% del país. Sus gobernados, 10 millones de personas con años para aburrir, sospechan que cada vez que se ocupan de ellos se han estrenado cargos, se reclama financiación o se avecinan elecciones. O las tres cosas.

Los supervivientes del campo, ya sinónimo de despoblado y lleno de Laponias como nuestro Señorío, se sienten ciudadanos de segunda. Como en la otra Castilla, Aragón, Galicia, Asturias y La Rioja. Están abandonados en servicios del Estado que deben prestar las autonomías como sanidad,  educación, servicios sociales o un acceso a internet que garantice la imprescindible conexión con las Administraciones, la banca y el mundo mundial. 

Las carencias se han convertido en históricas. En resumen, han pedido a Sánchez una financiación más justa. Se trata de evitar que en esta parte de España no sea tan incómodo y caro vivir como en cualquier ciudad. Hay niños que se levantan antes de las 7 para entrar en el colegio a las 9. Cosas tan esenciales como la educación y la sanidad son lujos. Si en Madrid hay que cruzar una calle para ir al médico, hay pueblos molineses donde debes irte de excursión todo el día para que te atiendan.

Nadie sabe cómo llenar esta España rural en riesgo de desertización ni si es necesario hacerlo. La repoblación es una quimera hasta en Laponia donde nunca vivió nadie. Pero alucinan discursos como los del anfitrión Lambán o nuestro Page en plan plañidero, demandando “fondos”, “subvenciones”, “exenciones fiscales” y “alternativas económicas tangibles”. O quejándose del coste de ‘perdonar’ un mes de IVA y  cofinanciar los famosos ITI o fondos FEDER. 

Sánchez saludó desde el Twitter electoral de Moncloa prometiendo “un Estado del bienestar que no entienda de grandes urbes o pequeñas aldeas”. Un encuentro de este tipo daría para un máster serio sobre palabras vacías y una tesis sobre los beneficiarios de la despoblación, que los habrá. Atentos al anunciado parto, digo estrategia, sobre el reto demográfico de la nueva comisionada, Isaura Leal, pareja de Juanma Serrano, presidente de Correos. Los dos amiguetes de Sánchez suman casi 300.000 euros de sueldo.