Propuestas de recortes

22/11/2011 - 00:00 Pelayo Romay


  España está en crisis desde hace más de 3 años. Los socialistas, derrotados en las urnas el pasado día 20, han hundido al país en la miseria y han derrochado el dinero en cosas absolutamente innecesarias. Ahora, a Mariano Rajoy y a todo su equipo de gobierno le toca enderezar la situación. Para ello, tendrá inevitablemente que hacer recortes por todas partes en los presupuestos. Yo, desde mi humilde opinión, le voy a sugerir algunas acciones muy concretas que a todos los españoles nos van a ahorrar muchos millones de euros.


  Primero, que deje de subvencionar las interrupciones voluntarias del embarazo. ¿En qué país civilizado se ha visto que sea el propio Estado el que dé cantidades enormes de recursos económicos para perpetrar el exterminio masivo de bebés? Esto no puede continuar de esta manera. Matando a los niños por nacer hoy, estamos matando a los futuros trabajadores del país del mañana.


  Segundo, que anule todas las subvenciones a organizaciones simpatizantes del colectivo homosexual, ya sean entidades nacionales o extranjeras. Es una vergüenza que nuestros impuestos sirvan para financiar a un poderoso colectivo que reivindica mucho y que nada bueno aporta a la sociedad. Las familias españolas no pueden ver por más tiempo cómo se les niegan por sistema ayudas económicas, mientras los homosexuales nadan en abundancia.


 Tercero, que suprima todas las subvenciones a los sindicatos, que tan callados han estado y que tan solos han dejado a los millones de parados durante todo este tiempo que llevamos de crisis. Si los sindicatos no cumplen con su función de defender a los trabajadores, ¿para qué seguir teniendo sindicatos? Que suprima también las cuantiosas subvenciones a la patronal, que tantos derechos quiere negar a los pocos empleados que ya quedan en el país. Haría falta hacer muchas más cosas. Estas tres ideas son sólo un inicio. Sin embargo, creo que si se llevaran a cabo, todo empezaría a ir mejor. Rajoy, recuerda que tu deber es escuchar siempre al ciudadano y no sólo el día de las elecciones.