Román acusa al alcalde de Marchamalo de “jugar una partida política que perjudica directamente a sus vecinos”

18/07/2016 - 15:09 Redacción

El alcalde de Guadalajara califica de “equivocación política y jurídica” la imposición de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha de incorporar nuevas paradas en la ciudad de Guadalajara.

“Si la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, por ser del mismo color político de Marchamalo, quiere imponer a Guadalajara las paradas de autobús, que sepa que al día siguiente lo harán también pueblos como Cabanillas del Campo, Azuqueca de Henares o Alovera”.

Antonio Román, alcalde de Guadalajara, se ha referido así a la posibilidad de que la Junta permita que los autobuses del ASTRA procedentes de Marchamalo paren en diferentes puntos de la capital, otorgando a esta localidad ventajas sobre otros municipios de la provincia.

El alcalde ha señalado que estas pretensiones constituyen una equivocación desde el punto de vista político y jurídico, y que además perjudican a los vecinos de Marchamalo porque no tendrán los mismos derechos y ventajas que los usuarios del servicio de transporte urbano de Guadalajara. “No podrán beneficiarse de todas las paradas ni del sistema de bonificaciones o trasbordos...  Creo que la mejor opción es que Marchamalo vuelva a integrarse en el servicio de transporte urbano de Guadalajara. Yo haré todo lo que esté en mi mano, de carácter técnico, administrativo y contractual, para que Marchamalo se incorpore. No creo en la imposición. Creo en el diálogo y seguimos con esa oferta abierta. Por eso hemos preguntado al alcalde de Marchamalo qué horarios y qué frecuencias quiere que tenga el servicio, así como la previsión del número de viajeros. Es necesario saberlo porque tenemos que calcular el coste”.

Ante la aprobación por parte del Ayuntamiento de Marchamalo de un acuerdo diferente a éste, Antonio Román ha señalado que es un claro síntoma de que “Rafael Esteban no quiere prestar un buen servicio de transporte a los ciudadanos, sino jugar una partida política de la cual los vecinos son los principales perjudicados”.

Ha añadido que, cuando le sea comunicada formalmente esa “imposición” será el momento de estudiar las acciones a adoptar. “No es lógico que un transporte interurbano tenga paradas en Guadalajara donde puedan subir y bajar viajeros porque se entra directamente en el ámbito competencial de la ciudad en materia de transporte urbano. Se menoscaban los derechos de Guadalajara”.

Tal y como ha recordado Antonio Román, “fue el alcalde de Marchamalo, Rafael Esteban, quien hace unos años, de forma unilateral decidió abandonar el servicio público de transporte de Guadalajara. Tenía que recortar y decidió hacerlo en los autobuses, lo que fue un evidente error que se ha reducido en una pérdida de usuarios del 50%”.