El Deportivo fulmina a Kike Liñero después de seis jornadas

28/09/2010 - 00:00 Redacción

altKike Liñero ya es historia en el Deportivo Guadalajara. La mala racha de resultados de las últimas jornadas, en las que el equipo morado ha encadenado cuatro partidos seguidos sin ganar, sumando tan sólo dos puntos de 12 posibles, y el pobre juego que ha desarrollado el Deportivo en estos primeros compases de temporada han condenado al técnico vizcaíno, que llegó al club morado a finales del mes de junio y que, por tanto, tan sólo ha durado tres meses como entrenador en el Pedro Escartín. Liñero deja al Depor noveno en la clasificación tras seis jornadas de Liga disputadas con 8 puntos, a tres de la zona de play-off de ascenso y a seis del líder, el Leganés.
Carlos Pérez Salvachúa se hace cargo del equipo de forma momentánea
El ambicioso proyecto del Deportivo para la presente temporada, en la que no sólo vale con repetir presencia en las eliminatorias de ascenso a Segunda sino que el club morado ha realizado una apuesta firme por lograr el ascenso de categoría, junto al discreto juego ofrecido por el equipo en los últimos partidos han sido las causas principales para que el club haya adoptado esta drástica decisión. El técnico vizcaíno ofrecerá este mediodía, a las 13.00 horas, en la sala del prensa del Pedro Escartín una rueda de prensa de despedida. Por el momento, será Carlos Pérez Salvachúa, hasta ahora segundo entrenador, el que tome las riendas de la plantilla mientras el club busca un sustituto al vasco. Kike Liñero fue anunciado como entrenador del Deportivo el pasado 29 de junio, después de no ser la primera opción del club morado para la presente temporada. El técnico vizcaíno ha dirigido ocho partidos oficiales con el Deportivo –seis de Liga y dos de Copa del Rey–. En total ha conseguido tres victorias –dos en Liga y una en Copa–, dos empates y tres derrotas.El técnico vizcaíno, que ya sentía la presión del club desde la derrota del pasado miércoles ante el Alcalá en el Pedro Escartín, señaló al respecto el pasado viernes que estaba “tranquilo porque la tranquilidad me la da el equipo y el equipo está funcionando bien. Mi misión es transmitir optimismo y ganas. No tengo la sensación de que me la esté jugando en Leganés. Nunca pienso en ello. Sé como funciona el fútbol con los resultados pero nunca se me pasa por la cabeza”. Y el lunes, después de empatar sin goles en Leganés, solicitó un poco de crédito, temiendo que pudiera ser destituido: “Al equipo le falta un poco de tiempo para que se acople y aún tenemos que dar con la tecla en cuanto al juego. Estamos en ello. En cuanto ganemos un partido, irá llegando el buen juego”, analizaba. Además, también hubo una circunstancia que no ha pasado desapercibida ni para el club ni para la afición como la ausencia de Míchel en la última convocatoria para jugar en Leganés. Uno de los jugadores estrella, gran fichaje del Deportivo para la presente temporada, se quedaba en la grada. Liñero dijo que era “una decisión técnica sin más” y que no había “motivos extradeportivos”.