‘Agallas’ enfrenta al ‘narco’ Carmelo Gómez contra el delincuente Hugo Silva en

01/10/2010 - 09:45 Hemeroteca

Por: Redacción
La lonja de Sada (A Coruña) hace un descanso y no congrega a cientos de pescadores, como es lo habitual. Las gaviotas siguen graznando y el mar se deja oír romper sobre las rocas. Las únicas voces humanas salen de una nave, la más cercana al rompiente. “¡Silencio, por favor! ¡Rodamos!”. Entra a escena un Carmelo Gómez totalmente engominado y trajeado. Le toca rodar un primer plano. La mirada del leonés “taladra” la cámara. “Su presencia física y su voz, además de su enorme talento, le hacen perfecto para este papel”, atestiguan los directores de ‘Agallas’, una película que se adentra en el tema del narcotráfico.
Hugo Silva entra en la sala embutido en un mono azul de pescadero. El protagonista de Los hombres de Paco encarna a Sebastián, un delincuente de poca monta recién salido de prisión que entra a formar parte de la empresa de Ramón Regueira (Carmelo Gómez). No lo hace por vocación sino porque algo le dice que el dueño de la empresa no se ha pagado el Jaguar, aparcado fuera, con cangrejos. Hay gato encerrado. “Se trata de una película dura, pero real como la vida misma”, explica Samuel Martín Mateos, director de la película junto con Andrés Luque. Dos forofos del cine negro que, con su propuesta, quieren “captar la atención del público desde el primer momento”.
La jornada de rodaje ha durado más de la cuenta. El equipo se está empleando a fondo. Son 38 días de arduo trabajo, sobre todo para producción, quienes tienen que desmontar y trasladar el equipo a veces en dos ocasiones. “Galicia lo posibilita en gran forma”, afirma Pancho Casals, uno de los productores de la cinta. A Carmelo Gómez no le molesta nada. El protagonista de Días contados se muestra “fascinado” con su personaje. “Me atrae su irreductible maldad”, comenta. El actor, que ha encarnado personajes más “torturados psicológicamente” a lo largo de su trayectoria, se congratula de ponerse en la piel de Ramón Regueira, un “malo, malísimo” que lo es porque sí.
Las nubes han respetado el set de rodaje, pero las inclemencias se han dejado sentir por la noche. Por exigencias del guión, Hugo Silva (Sebas en el filme) tuvo que actuar bajo la lluvia unos cuantos días. “Lo peor fue que a Carmelo le habían dado paraguas y a mí no”, ríe mirando con algo de rabia a su partenaire. El buen rollo es patente entre el equipo y la admiración también sale a relucir. Carmelo repite con Celso Bugallo. Los dos ya compartieron escenas en La noche de los girasoles hace dos años. “Admiro mucho a Celso”, reconoce Carmelo Gómez.

Repercusión
Los protagonistas se encuentran muy bien secundados. A la veteranía de Celso Bugallo se suma la experiencia de Mabel Rivera (vista también en Mar adentro) y el talento y la juventud de Carlos Santes. Todos actores de talento, algunos ya muy contrastados como Carmelo, que se unen para sacar adelante esta historia de poder que maneja valores tan universales como “la ambición, la avaricia o el miedo”, precisa Andrés Luque. Un largometraje que también deja espacio “a la retranca” y que sorprenderá con su giro final a quienes se acerquen al cine.
Al término del rodaje las fans se arremolinan entorno a Hugo Silva. Su fama ganada en la popular serie Los hombres de Paco no le deja comer sin interrupciones. Con tesón y paciencia atiende a todas las niñas, ya sea firmando autógrafos o posando con ellas en fotos. El equipo aún se asombra al ver cómo las fans de “Lucas” esperan horas y horas a que acabe su ídolo de rodar. Algunas son “como de la familia”, afirman desde la productora. El actor, que tenía ganas de que le llegase una historia como la que narra ‘Agallas’, se declara un ferviente admirador del cine negro. La televisión ha dejado lugar al cine y al teatro. Si ahora le toca encarnar a Sebas, en enero hará de Claudio en To be Hamlet, con Blanca Portillo y posiblemente Geraldine Chaplin en el mismo cartel.