Aguirre niega pactos de silencio con Rajoy y alimenta el debate
01/10/2010 - 09:45
Por: EUROPA PRESS
El líder del PP, Mariano Rajoy, y la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, no han sellado ningún 'pacto de silencio' como se apunta desde algunos sectores, pese al evidente descenso en el nivel de disputa interna que se ha registrado en el PP en los últimos tres días.
Sin embargo, la jefa del Ejecutivo autonómico no parece dispuesta a apartarse de la carrera hacia La Moncloa y alimenta ahora otro debate interno: unas hipotéticas primarias en el seno del partido para elegir al candidato para las elecciones de 2012.
Algunas informaciones apuntaban ayer que el líder del PP y la presidenta de la Comunidad de Madrid habrían alcanzado un 'pacto de silencio' para evitar que la situación de las últimas semanas le estallase a ambos en la cara. Esperanza Aguirre habría aceptado no presentar candidatura alternativa a la de Rajoy en el Congreso Nacional de junio, a cambio de abrir un debate interno -y votar a favor de una hipotética iniciativa las ponencias del Congreso- sobre la posibilidad de celebrar una suerte de primarias en el PP para elegir el candidato a la Presidencia del Gobierno en las elecciones de 2012, lo que le daría una buena oportunidad a la presidenta regional de aspirar a La Moncloa.
Dicha enmienda será propuesta por el presidente del PP en el distrito de Salamanca, Iñigo Henríquez, durante el Congreso y pretende un cambio en los estatutos del PP para que los candidatos a la Presidencia del Gobierno y a cargos orgánicos del partido -tanto a nivel nacional como local, provincial o regional- sean elegidos por un sistema de primaras "adaptadas a la realidad española" y mediante voto secreto, libre y directo de los militantes. "La solución no será copiar el modelo estadounidense, porque estar de primarias durante meses destrozaría la organización", señaló Henríquez, que está convencido de que servirá para acercar al partido a las bases.
Ayer, Aguirre aseguró que "de ninguna manera" ha firmado ese 'pacto de silencio' con Rajoy, pero reconoció estar al corriente de la iniciativa de las primarias, una propuesta que estudiará "con cariño", como cualquier otra que sirva para que los afiliados tengan una mayor participación en el partido. A su juicio, los afiliados quieren que su partido trabaje "más y mejor", que explique sus principios, sus valores y sus políticas "llevando consenso en los grandes asuntos y siendo capaces de disentir educadamente y moderadamente para que los ciudadanos puedan estudiar las alternativas y elegir la mejor".
Cautelas ante las primarias
Y si a Aguirre le parece "enormemente positivo todo este proceso precongresual", el secretario general del PP, Francisco Granados, tampoco iba a descartar un proceso de "primarias para abrir los cauces de democracia interna". Pero hasta el número dos de Aguirre entre los populares madrileños mostró sus reticencias, señalando que las experiencias en España de primarias "no han sido muy buenas". Por su parte, el portavoz de Exteriores del PP en el Congreso, Gustavo de Arístegui, dijo que no le molesta, "sino más bien al contrario" que se debata sobre la implantación de este sistema para elegir al candidato del partido a las elecciones generales.
El veterano diputado Federico Trillo consideró que "habría que discutir mucho" la propuesta de Henríquez, no ya para "evitar" que se realicen primarias, sino "para ver cuál es la mejor forma" de elegir al próximo candidato. "Si no nos centramos en los árboles y nos centramos en contemplar un poquito cuál es el bosque, el panorama y lo que tiene que hacer el PP, que es hacer el mejor equipo para ganar las próximas elecciones, todos andaremos por mejor camino", defendió Trillo. Por su parte, el diputado del PP por Valencia Esteban González Pons consideró que un proceso de primarias sería una forma de desligitimar el Congreso Nacional, porque el candidato a la Presidencia del partido "siempre" quiere llegar a La Moncloa.
Aumenta la tensión en el PP catalán
El PP nacional no monopoliza la tensión de la formación. Los populares catalanes entrecruzan declaraciones a cuenta de la próxima elección del 'número uno' regional, cargo por el que pugnan tres nombres, el último en añadirse el presidente del grupo municipal popular en el Ayuntamiento de Barcelona, Alberto Fernández Díaz, que se añadió el martes al actual presidente, Daniel Sirera, y la diputada Montserrat Nebrera.
Sirera instó ayer a Fernández Díaz a explicar cuáles son sus aspiraciones, ya que "ya ha sido presidente del PP catalán", ya tiene experiencia", recomendación que también lanzó a Nebrera. No obstante, rechazó que esta lucha a tres se pueda traducir en una imagen de "pugna interna", insistiendo en que lo importante es debatir sobre el modelo de partido que cada postulante quiere llevar a cabo.
A la disparidad de opiniones también se han sumado otros populares, como el diputado Francesc Vendrell, quien incluso abogó por un tándem Fernández Díaz-Nebrera, en declaraciones a Rac 1. En su opinión, el escenario actual en el PP catalán demuestra una "crisis mal solucionada" el pasado mes de julio, cuando Sirera sustituyó a Josep Piqué, del que precisamente Vendrell era su mano derecha.
Por su parte, el vicepresidente del Parlamento Europeo, Alejo Vidal-Quadras, defendió la necesidad de "democratizar la vida interna" de su partido para permitir la "participación directa" de la militancia.
Algunas informaciones apuntaban ayer que el líder del PP y la presidenta de la Comunidad de Madrid habrían alcanzado un 'pacto de silencio' para evitar que la situación de las últimas semanas le estallase a ambos en la cara. Esperanza Aguirre habría aceptado no presentar candidatura alternativa a la de Rajoy en el Congreso Nacional de junio, a cambio de abrir un debate interno -y votar a favor de una hipotética iniciativa las ponencias del Congreso- sobre la posibilidad de celebrar una suerte de primarias en el PP para elegir el candidato a la Presidencia del Gobierno en las elecciones de 2012, lo que le daría una buena oportunidad a la presidenta regional de aspirar a La Moncloa.
Dicha enmienda será propuesta por el presidente del PP en el distrito de Salamanca, Iñigo Henríquez, durante el Congreso y pretende un cambio en los estatutos del PP para que los candidatos a la Presidencia del Gobierno y a cargos orgánicos del partido -tanto a nivel nacional como local, provincial o regional- sean elegidos por un sistema de primaras "adaptadas a la realidad española" y mediante voto secreto, libre y directo de los militantes. "La solución no será copiar el modelo estadounidense, porque estar de primarias durante meses destrozaría la organización", señaló Henríquez, que está convencido de que servirá para acercar al partido a las bases.
Ayer, Aguirre aseguró que "de ninguna manera" ha firmado ese 'pacto de silencio' con Rajoy, pero reconoció estar al corriente de la iniciativa de las primarias, una propuesta que estudiará "con cariño", como cualquier otra que sirva para que los afiliados tengan una mayor participación en el partido. A su juicio, los afiliados quieren que su partido trabaje "más y mejor", que explique sus principios, sus valores y sus políticas "llevando consenso en los grandes asuntos y siendo capaces de disentir educadamente y moderadamente para que los ciudadanos puedan estudiar las alternativas y elegir la mejor".
Cautelas ante las primarias
Y si a Aguirre le parece "enormemente positivo todo este proceso precongresual", el secretario general del PP, Francisco Granados, tampoco iba a descartar un proceso de "primarias para abrir los cauces de democracia interna". Pero hasta el número dos de Aguirre entre los populares madrileños mostró sus reticencias, señalando que las experiencias en España de primarias "no han sido muy buenas". Por su parte, el portavoz de Exteriores del PP en el Congreso, Gustavo de Arístegui, dijo que no le molesta, "sino más bien al contrario" que se debata sobre la implantación de este sistema para elegir al candidato del partido a las elecciones generales.
El veterano diputado Federico Trillo consideró que "habría que discutir mucho" la propuesta de Henríquez, no ya para "evitar" que se realicen primarias, sino "para ver cuál es la mejor forma" de elegir al próximo candidato. "Si no nos centramos en los árboles y nos centramos en contemplar un poquito cuál es el bosque, el panorama y lo que tiene que hacer el PP, que es hacer el mejor equipo para ganar las próximas elecciones, todos andaremos por mejor camino", defendió Trillo. Por su parte, el diputado del PP por Valencia Esteban González Pons consideró que un proceso de primarias sería una forma de desligitimar el Congreso Nacional, porque el candidato a la Presidencia del partido "siempre" quiere llegar a La Moncloa.
Aumenta la tensión en el PP catalán
El PP nacional no monopoliza la tensión de la formación. Los populares catalanes entrecruzan declaraciones a cuenta de la próxima elección del 'número uno' regional, cargo por el que pugnan tres nombres, el último en añadirse el presidente del grupo municipal popular en el Ayuntamiento de Barcelona, Alberto Fernández Díaz, que se añadió el martes al actual presidente, Daniel Sirera, y la diputada Montserrat Nebrera.
Sirera instó ayer a Fernández Díaz a explicar cuáles son sus aspiraciones, ya que "ya ha sido presidente del PP catalán", ya tiene experiencia", recomendación que también lanzó a Nebrera. No obstante, rechazó que esta lucha a tres se pueda traducir en una imagen de "pugna interna", insistiendo en que lo importante es debatir sobre el modelo de partido que cada postulante quiere llevar a cabo.
A la disparidad de opiniones también se han sumado otros populares, como el diputado Francesc Vendrell, quien incluso abogó por un tándem Fernández Díaz-Nebrera, en declaraciones a Rac 1. En su opinión, el escenario actual en el PP catalán demuestra una "crisis mal solucionada" el pasado mes de julio, cuando Sirera sustituyó a Josep Piqué, del que precisamente Vendrell era su mano derecha.
Por su parte, el vicepresidente del Parlamento Europeo, Alejo Vidal-Quadras, defendió la necesidad de "democratizar la vida interna" de su partido para permitir la "participación directa" de la militancia.