Ángel Fernández desquicia al Guadalajara

11/09/2016 - 11:36 Opta

El BM Guadalajara se estrenó en Asobal con derrota (30-23) en la cancha del Naturhouse. Los alcarreños lo intentaron pero se toparon con un Ángel Fernández inconmesurable.

El Guadalajara hizo lo que pudo, trató de agobiar, incluso intimidó, de inicio al Naturhouse, pero acabó sucumbiendo ante un supremo Ángel Fernández. El extremo cántabro anotó 11 goles.


Veinte minutos le costó al Naturhouse ponerse por delante en el marcador. El Guadalajara, combativo, le planteó problemas, tanto que llegó a colocarse 2-5. Los típicos nervios de salida en los locales, más atenazados que un cuadro alcarreño muy suelto, sobre todo, cuando Padilla, Montoya o Bozalongo tenían la pelota. Entre los tres asumían la responsabilidad del gol con criterio y dándose el relevo. 


A los riojanos les estaba costando entrar en ataque. Mejor dicho, no encadenaba dos acciones positivas, defensa y ataque, lo que provocaba que los de César Montes fueran liderando el marcador con aparente normalidad. Y eso que tras el citado 2-5, Ángel Fernández, en poco más de un minuto y medio, hizo tres tantos para empatar. Ahí, le empezó a jugar una mala pasada al Guadalajara el hecho de jugar en ataque en superioridad, porque no terminaban la jugada y tras robo el contragolpe era fácil para el oponente.
Desajustes que se comprobaron cuando Peciña, desde el centro, marcaba a continuación de uno de Montoya (el 15-13). Todavía queda pendiente si esta nueva regla favorece al que la pone en práctica o le perjudica. El caso es que tras el empate a cinco, el Guadalajara insistía en enervar a la grada logroñesa. Ventajas mínimas hasta el 9-9 (minuto 19). Desde el extremo izquierdo, el Naturhouse hacía daño. Primero con el cántabro Ángel Fernández, después con Miguel Sánchez-Migallón. Así se entiende, el 10-9. 
El principio del fin para un Guadalajara que porfió. Las ventajas de los de Jota González fueron en aumento de manera progresiva. La entrada en pista de Javi García favoreció a ello, haciendo más complejo el trabajo de la defensa manchega por el centro. El 14-11 a los 23 minutos provocaba que el Guadalajara debía evitar que el duelo se rompiera. Así que Montoya, una vez más, se echó el equipo a las espaldas para aguantar hasta el descanso pese al 18-14.


Tras el receso, fue Bozalongo el que tiró del carro para hacer creer a los suyos que aún era posible. Gracias a dos tantos del riojano, el resultado ya no se veía tan lejano (19-17). Ángel Fernández, por si acaso, mantenía al Naturhouse con ventaja, pero una exclusión de Langaro y el gol desde siete metros de Moya, que unido a un penalti parado por Hombrados a Javi Muñoz, dejaban todo en el aire: 20-19 (minuto 39).   


Hasta que Ángel Fernández demostró su potencial. Velocidad y talento para culminar. El ritmo se frenó y aunque Mellado rompió la racha tras nueve minutos de sequía, los alcarreños ya eran conscientes de que la victoria era para el conjunto anfitrión. 30-23 para empezar. Derrota asumible ante un rival de otra liga.