Antonio Vila (Podemos): “Somos el único partido que representa el cambio en este país”

09/12/2015 - 12:20 Marta Martínez

Tras 30 años de militancia en el PSOE, en 2010 lo abandonó un tanto desilusionado. Por eso, cuando Podemos apareció en el escenario político y vio que “tenía justamente los requisitos que yo le exigía a un partido: democracia interna, primarias abiertas, etc.”, se sumó a él. Formó parte de la lista para las elecciones autonómicas, en el puesto número 5, y se muestra muy orgulloso de haber conseguido un diputado regional por Guadalajara, David Llorente. Ahora, Antonio Vila vuelve a verse impulsado por sus compañeros a dar un paso al frente en estas nuevas elecciones y concurre, junto a Begoña Rojas (número 1) y Fernando Plaza (en el puesto número 3), como candidato al Senado. Al margen de su faceta política, es abogado, trabaja en Iberia desde hace más de 30 años, y a sus 56 años se ha lanzado a la aventura empresarial abriendo su propio despacho en Azuqueca.
 Podemos plantea que el Senado sea un órgano de representación territorial, ¿Podría detallarnos esta propuesta?
 Nos gustaría que fuera equivalente al Bundesrat alemán, donde estuvieran representadas las comunidades autónomas. Que tuviera entre tres y cuatro senadores por comunidad autónoma, con un voto ponderado. Es decir, que el voto fuera en función de la población. El Senado debería dedicarse exclusivamente a competencias territoriales, presupuestos territoriales, todo lo que tenga que ver con los nacionales que  afecten a las comunidades, etc. Sería un órgano legislativo como lo es ahora pero sin influir en el control del Congreso y dirigido hacia las autonomías.
 Las encuestas no son muy favorables a Podemos. ¿Con qué expectativas afronta el 20D en Guadalajara? ¿Esperan conseguir representación?
 Es difícil, pero tampoco las encuestas nos daban esperanzas en las autonómicas y sacamos un diputado. Eso nos ha impulsado a ser más optimistas de lo que dicen las encuestas. Sabemos las dificultades, sobre todo por la dispersión del voto en la zona rural, pero estamos con la idea de intentar sacar un diputado e incluso un senador. Es difícil, pero en ello estamos trabajando.
 ¿La falta de consenso con IU y otras fuerzas y organizaciones de la izquierda, a pesar de que se intentó hasta el último momento, complica aún más los resultados para ustedes?
 Hubo mucho debate en este sentido. Mi idea de partida era no a la confluencia. Aun así, lo que cuenta es lo que se decide en los círculos y órganos territoriales. Se decidió que en Castilla-La Mancha no se daban las circunstancias para llegar a una confluencia, no es cuestión de echar las culpas a unos ni a otros, es cuestión de que no se ha llegado a un entendimiento para poder confluir en esta ocasión, aunque sí lo hubo en las municipales...
 Precisamente, por eso mismo se entiende menos que ahora no se haya alcanzado un acuerdo.
 En las municipales, cada municipio era autónomo para poder decidir, en algunos fuimos con IU, en otros solos, en otros con otras organizaciones sociales. A nivel autonómico eso no fue posible y en las generales menos. Es cierto que en algunas comunidades sí se ha llegado a acuerdo, como en la Comunidad Valenciana o Cataluña, pero aquí no.
La dispersión del voto es un mal endémico que tiene la izquierda, y puede perjudicarnos, pero creemos que la marca Podemos puede tener un enfoque diferente, confiamos en que la gente sepa distinguir cuál es el verdadero partido que quiere un cambio. Nosotros consideramos que IU se ha mantenido en su planteamiento de siempre y –hablo de Guadalajara– ha estado poco abierto a una confluencia real.
 ¿Con qué propuestas para Guadalajara se presentan?
 Lo más importante es el trasvase; nos mantenemos en contra y creemos que es necesario abordar esta cuestión con una altura de miras y visión de estado. Es un problema muy complejo y obliga a pensar en una solución más técnica que política y, sobre todo, de no confrontación entre regiones y partidos; atender a la solidaridad de los pueblos y ver esto como un problema nacional que necesita un pacto nacional. También estamos en contra del ATC y de la energía nuclear; creemos que la energía nuclear debería tener los días contados. Apostamos por las energías renovables.
En cuanto a otras cuestiones, la gente de Guadalajara, a través de los círculos, nos ha trasladado su preocupación por el transporte. De llegar a tener representación intentaríamos potenciar el transporte de viajeros, tanto por carretera como por ferrocarril.
Pedimos una ampliación de la frecuencia de los trenes de Cercanías y que se incremente el número de Civis, actualmente hay muy pocos. Mucha gente se ve obligada a desplazarse en coche a Madrid porque en tren se tarda mucho. Otra petición que tenemos sobre transporte es que la línea de Cercanías llegara hasta El Casar, es importante que esa zona tenga una alternativa real de transporte público, y volver a impulsar los servicios de trenes a Barcelona, a Sigüenza…
También apostamos por llevar a cabo la autovía de la Alcarria, y mejora y ampliación de toda la N-320. En transporte por carretera, consideramos necesario mejorar la frecuencia, sobre todo los autobuses que conectan con lugares importantes como puede ser el Hospital de Guadalajara, la universidad o la estación de ferrocarril.
El apartado dedicado al transporte es bastante amplio porque parece mentira que, estando tan cerca de Madrid, estemos tan mal comunicados. Es también una forma de evitar el despoblamiento de la zona rural y mejorar el desarrollo económico de la provincia.
También queremos acabar con la brecha digital. Hay muchas zonas donde no llega la cobertura de Internet y es algo que también queremos solucionar.
Otras medidas para evitar el despoblamiento pasan por potenciar la agricultura y el comercio local, etc.
 ¿Serían partidarios de, como proponen algunos partidos, fusionar los ayuntamientos más pequeños?
 Nos parece una barbaridad. No nos parece normal que quieran acabar con la mayor parte de los 288 municipios con los que cuenta la provincia. Quedarían únicamente unos diez con esta propuesta.
Fórmulas, se pueden mirar muchas. Nosotros pretendemos lo contrario, evitar el despoblamiento y potenciar que la gente pueda vivir en los pueblos. Pero si no tienen educación, sanidad, ni transporte, ni medios de vida, lo tienen difícil. Esta propuesta tendría poco sentido aquí. Hay que fomentar los pequeños municipios y esta propuesta no creo que vaya en esa línea.
Yo me vine de Madrid, huyendo de una macrociudad, a Alovera, que antes tenía 4.000 habitantes. Conozco bien la provincia porque  soy deportista y me he movido mucho por ella y creo que Guadalajara es un sitio ideal para vivir.
 ¿Cómo explica que después de celebrar unas primarias se haya puesto como cabeza de lista al Congreso a una persona ajena a Guadalajara y a ese proceso de primarias?
 Bueno, la cabeza de lista era Blanca Calvo y lamentablemente, cuando no se llegó a una confluencia, optó por renunciar; hubo otra serie de renuncias y hubo que buscar otras alternativas, consensuadas con la dirección regional y nacional, y una buena opción era Ariel Jerez. Desde el punto de vista que consideramos que la circunscripción debería ser única, tampoco defendemos mucho que una persona tenga que ser de la zona porque realmente lo que representas es una idea de partido y de política. No lo veo tan complejo como si fueran unas elecciones autonómicas o municipales.
Ariel nos parece un excelente candidato. Se está moviendo y mojando mucho por Guadalajara.
 ¿Puede resumir en pocas palabras los argumentos para pedir el voto a los ciudadanos?
 Yo les diría que Antonio Vila no se presenta a las elecciones, nos presentamos todos. Les puede decir que yo, si salgo elegido, seré su voz en el Senado y ese es el planteamiento de todos los candidatos: queremos llevar la voz de la gente a las instituciones. Somos el único partido que representa el cambio en este país, C’s es más de lo mimo y el PP y el PSOE ya sabemos cómo gobiernan. Ahí está nuestro programa con 388 propuestas (19 de ellas son sobre democracia y anticorrupción). Somos el único partido que junto con el programa ha presentado una memoria económica que defiende y explica cómo se obtienen los recursos y cómo se van a gastar. Lo único que le pido a la gente es que lea los programas y piense quién puede ofrecer un cambio y quién, en lugar de promesas, ofrece garantías.