Barreda y la infanta Cristina destacan la labor solidaria y eficaz de Cruz Roja
01/10/2010 - 09:45
Por: Redacción
El presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, aseguró ayer en Toledo que Cruz Roja es sinónimo de solidaridad, ayuda eficaz y trabajo humanitario para reducir los daños ocasionados por los desastres, para atender las emergencias de salud pública y las situaciones de vulnerabilidad más urgentes, para promover el respeto a la diversidad y la dignidad humana, combatir la intolerancia y la discriminación y la exclusión social. Barreda estuvo acompañado de la Infanta Cristina, quien también destacó la labor de esta institución.
El jefe del Ejecutivo autonómico hacía estas declaraciones en el marco de la celebración del Día Mundial de la Cruz Roja y la Media Luna, que bajo la presidencia de Su Alteza Real, la infanta Cristina ha tenido lugar en el Museo de Santa Cruz en Toledo.
Precisamente la infanta Cristina destacó la figura de la ciudad de Toledo que, según dijo, en sus monumentos, su trazado, su memoria, en su personalidad trasmite sentimientos íntimamente ligados a esta celebración. En este marco Su Alteza Real aseguró que los premiados son una muestra concreta y de excelencia de entidades y personas que dedican su vida a servir a los más necesitados sin esperar nada a cambio.
De este modo la entrega solidaria de voluntarios y organizaciones a quienes se enfrentan a la soledad, la enfermedad, la precariedad o la desesperación, no sólo es una necesidad social, sino que enriquece internamente como seres humanos a quienes ofrecen sus mejores esfuerzos a favor de los demás, apuntó la infanta Cristina.
Del mismo modo, José María Barreda que ensalzó la figura de los integrantes y voluntarios, aseguró que la estructura de Cruz Roja en sociedades nacionales y, en España, en asambleas regionales, provinciales y locales, le permite estar muy cerca de la realidad, muy cerca de las necesidades, muy cerca de las personas. A este respecto mencionó, de manera especial, por la cercanía que conlleva, a la Asociación de Padres con Niños y Adultos Discapacitados de Toledo, a María del Carmen Cabellos o al Hospital Nacional de Parapléjicos.
Barreda dejó constancia de su admiración y gratitud hacia los hombres y mujeres de buena voluntad que se conmovieron cuando se movieron las tierras de Haití y Chile, nuestras conciencias se remueven conociendo vuestro ejemplo y vuestra entrega, ello hace que, como los viejos rockeros, querido Miguel, las buenas causas nunca mueren, nunca prescriben, apuntó.Tras subrayar que en el mapa de las catástrofes y de los conflictos internacionales más lejanos está omnipresente la Cruz Roja, y en la realidad de la población más vulnerable de los barrios más próximos, está también Cruz Roja, indicó que sólo una buena y gran organización permite esa especie de don de la ubicuidad que hace que aparezca siempre donde se la necesita.
El presidente autonómico explicó que la Cruz Roja en Castilla-La Mancha está cada vez más cerca de las personas y, sobre todo, de los más necesitados. El Gobierno regional tiene concertada con ella el Programa de Teleasistencia que beneficia a 41.000 personas, con 32.000 terminales instalados en 832 municipios.
Tras felicitar a todos y cada uno de los galardonados y agradecerles su contribución para conseguir un mundo mejor reafirmó su confianza en las personas, en los hombres y mujeres de buena voluntad, en la esperanza de la posibilidad de un mundo mejor.
Gracias porque con vuestro ejemplo nos recordáis la grandeza de los seres humanos y mantenéis viva la llama del deseo utópico de la posible hermandad de todos los habitantes del planeta, dijo Barreda al tiempo que reiteró su agradecimiento al Movimiento Internacional de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja, que conforman la mayor red humanitaria del mundo.
El presidente de Cruz Roja Española, Juan Manuel Suárez del Toro, agradeció la acogida en Toledo, que definió como ciudad que desemboca en una consolidada realidad de concordia y progreso, después de siglos de intercambio y sedimento cultural. La Cruz Roja y la Media Luna Roja comparten la vocación universal de esta ciudad que en su historia ha sido domicilio de gente, culturas y pensamientos diversos.
Suárez del Toro, que reivindicó una cultura global de de solidaridad, proclamó la determinación a continuar profundizando y extendiendo el compromiso de esta organización con los más vulnerables. En este sentido indicó que el año pasado voluntarios y voluntarias de Cruz Roja Española lograron que más de un millón de personas pudieran tener acceso a alguna de sus iniciativas de apoyo.
Precisamente la infanta Cristina destacó la figura de la ciudad de Toledo que, según dijo, en sus monumentos, su trazado, su memoria, en su personalidad trasmite sentimientos íntimamente ligados a esta celebración. En este marco Su Alteza Real aseguró que los premiados son una muestra concreta y de excelencia de entidades y personas que dedican su vida a servir a los más necesitados sin esperar nada a cambio.
De este modo la entrega solidaria de voluntarios y organizaciones a quienes se enfrentan a la soledad, la enfermedad, la precariedad o la desesperación, no sólo es una necesidad social, sino que enriquece internamente como seres humanos a quienes ofrecen sus mejores esfuerzos a favor de los demás, apuntó la infanta Cristina.
Del mismo modo, José María Barreda que ensalzó la figura de los integrantes y voluntarios, aseguró que la estructura de Cruz Roja en sociedades nacionales y, en España, en asambleas regionales, provinciales y locales, le permite estar muy cerca de la realidad, muy cerca de las necesidades, muy cerca de las personas. A este respecto mencionó, de manera especial, por la cercanía que conlleva, a la Asociación de Padres con Niños y Adultos Discapacitados de Toledo, a María del Carmen Cabellos o al Hospital Nacional de Parapléjicos.
Barreda dejó constancia de su admiración y gratitud hacia los hombres y mujeres de buena voluntad que se conmovieron cuando se movieron las tierras de Haití y Chile, nuestras conciencias se remueven conociendo vuestro ejemplo y vuestra entrega, ello hace que, como los viejos rockeros, querido Miguel, las buenas causas nunca mueren, nunca prescriben, apuntó.Tras subrayar que en el mapa de las catástrofes y de los conflictos internacionales más lejanos está omnipresente la Cruz Roja, y en la realidad de la población más vulnerable de los barrios más próximos, está también Cruz Roja, indicó que sólo una buena y gran organización permite esa especie de don de la ubicuidad que hace que aparezca siempre donde se la necesita.
El presidente autonómico explicó que la Cruz Roja en Castilla-La Mancha está cada vez más cerca de las personas y, sobre todo, de los más necesitados. El Gobierno regional tiene concertada con ella el Programa de Teleasistencia que beneficia a 41.000 personas, con 32.000 terminales instalados en 832 municipios.
Tras felicitar a todos y cada uno de los galardonados y agradecerles su contribución para conseguir un mundo mejor reafirmó su confianza en las personas, en los hombres y mujeres de buena voluntad, en la esperanza de la posibilidad de un mundo mejor.
Gracias porque con vuestro ejemplo nos recordáis la grandeza de los seres humanos y mantenéis viva la llama del deseo utópico de la posible hermandad de todos los habitantes del planeta, dijo Barreda al tiempo que reiteró su agradecimiento al Movimiento Internacional de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja, que conforman la mayor red humanitaria del mundo.
El presidente de Cruz Roja Española, Juan Manuel Suárez del Toro, agradeció la acogida en Toledo, que definió como ciudad que desemboca en una consolidada realidad de concordia y progreso, después de siglos de intercambio y sedimento cultural. La Cruz Roja y la Media Luna Roja comparten la vocación universal de esta ciudad que en su historia ha sido domicilio de gente, culturas y pensamientos diversos.
Suárez del Toro, que reivindicó una cultura global de de solidaridad, proclamó la determinación a continuar profundizando y extendiendo el compromiso de esta organización con los más vulnerables. En este sentido indicó que el año pasado voluntarios y voluntarias de Cruz Roja Española lograron que más de un millón de personas pudieran tener acceso a alguna de sus iniciativas de apoyo.