Caídos del cielo 2. El Secuestro lleva a escena la vida de los sin hogar
01/10/2010 - 09:45
Por: MAR GATO. MADRID
La obra será representada el próximo jueves en el teatro Moderno de la capital
Tras el éxito cosechado en el que fuera su estreno en el pasado Festival de Otoño de Madrid, Caídos del cielo, obra teatral de la prestigiosa escritora madrileña Paloma Pedrero, regresa a los escenarios de toda España en su versión acortada. Guadalajara se encuentra entre las ciudades por las que girará esta peculiar y apasionante historia, que será representada el próximo jueves, 29 de octubre a las 20.00 horas, en el teatro Moderno.
Acompañada esta vez por el subtítulo de El secuestro, su puesta en escena, a todas luces original, responde a un complejo proyecto social y artístico que aborda teatralmente el universo vital de los sin hogar en España. De hecho, la obra, escrita a partir de ellos e interpretada por ellos, es fruto de la experiencia de Paloma Pedrero a lo largo de ocho años de trabajo en un taller de teatro con un amplio grupo de personas sin hogar dentro de la Fundación Red de Apoyo de la Inserción Socio Laboral en Madrid (Redis).
El argumento de la obra gira en torno a un grupo de gente sin hogar que irrumpe en el patio de butacas de un teatro en el que se iba a representar Hamlet en inglés. El secuestro de los actores profesionales da paso a una improvisada representación por parte de los propios sin hogar, que irán desgranando ante el público sus propias historias, llenas de ternura, humor y dolor.
El objetivo de la obra no es otro que el de concienciar a la sociedad actual sobre los problemas de la exclusión, a la vez que promueve la integración y rehabilitación de los sin hogar e inmigrantes, buscando una sociedad más justa, democrática y participativa.
Una nueva oportunidad
El éxito de este proyecto ha dado lugar la creación de la Asociación Socio Cultural Caídos del Cielo, una organización sin ánimo de lucro cuyo propósito es canalizar el arte como un instrumento de liberación de aquellas personas que un día tuvieron problemas con la vida, tal y como puntualizó el productor de la obra, Robert Muro, quien se acompañó para la presentación de esta puesta en escena en la ciudad de Guadalajara por dos de los actores, Paloma Domínguez y José Luis Álvarez. Ambos, dos sin hogar, destacaron la importancia del proyecto, concebido como un instrumento que les ha ayudado a salir de una situación a la que muchos desembocan por sus problemas personales.
La obra, a pesar de haber removido su pasado más gris, también les ha servido como terapia, la misma con la que intentan cambiar la mentalidad equivocada de la sociedad acerca de los sin techo.
El proyecto cuenta con la colaboración del Ministerio de Cultura, la Comunidad de Madrid y la Fundación Coca Cola Sáenz de Vicuña.
El argumento de la obra gira en torno a un grupo de gente sin hogar que irrumpe en el patio de butacas de un teatro en el que se iba a representar Hamlet en inglés. El secuestro de los actores profesionales da paso a una improvisada representación por parte de los propios sin hogar, que irán desgranando ante el público sus propias historias, llenas de ternura, humor y dolor.
El objetivo de la obra no es otro que el de concienciar a la sociedad actual sobre los problemas de la exclusión, a la vez que promueve la integración y rehabilitación de los sin hogar e inmigrantes, buscando una sociedad más justa, democrática y participativa.
Una nueva oportunidad
El éxito de este proyecto ha dado lugar la creación de la Asociación Socio Cultural Caídos del Cielo, una organización sin ánimo de lucro cuyo propósito es canalizar el arte como un instrumento de liberación de aquellas personas que un día tuvieron problemas con la vida, tal y como puntualizó el productor de la obra, Robert Muro, quien se acompañó para la presentación de esta puesta en escena en la ciudad de Guadalajara por dos de los actores, Paloma Domínguez y José Luis Álvarez. Ambos, dos sin hogar, destacaron la importancia del proyecto, concebido como un instrumento que les ha ayudado a salir de una situación a la que muchos desembocan por sus problemas personales.
La obra, a pesar de haber removido su pasado más gris, también les ha servido como terapia, la misma con la que intentan cambiar la mentalidad equivocada de la sociedad acerca de los sin techo.
El proyecto cuenta con la colaboración del Ministerio de Cultura, la Comunidad de Madrid y la Fundación Coca Cola Sáenz de Vicuña.