‘Calurosa’ acogida a las XI Jornadas Medievales, que ya miran de reojo al reconocimiento regional

01/10/2010 - 09:45 Hemeroteca

Por: DIANA PIZARRO
SIGÜENZA

Un año más, y ya van 11, las calles de Sigüenza viajaron atrás en el tiempo, llevándose consigo a los miles de visitantes y vecinos que las poblaban. Las Jornadas Medievales, que aspiran a obtener la declaración de Interés Turístico Regional una vez que superen sus 15 años de historia, vivieron ayer su día grande con el Manifiesto de Doña Blanca en el patio de armas del Castillo, una representación histórica que no quisieron perderse, entre otros, el alcalde, Francisco Domingo; y la delegada de la Junta, Magdalena Valerio. Hoy, para poner el broche de oro a la cita, regresarán al siglo XXI para disfrutar, en pantalla gigante, de la final de la Copa del Mundo.

Olores de otras épocas, sabores de lugares lejanos, músicas y ritmos no escuchadas en siglos... En definitiva, un viaje a la Edad Media en el mejor escenario posible: Sigüenza. La undécima edición de sus Jornadas Medievales atrajeron ayer a miles de visitantes venidos de la provincia y de fuera de ella, todos deseosos de sumergirse en la majestuosidad de una ciudad que respira historia y cultura en cada uno de sus rincones. Y ni el intenso calor que se vivió durante buena parte de la jornada hizo que descendiese la afluencia de asistentes a esta película histórica al aire libre. Esto fue posible gracias a los numerosos recursos ofrecidos tanto en los establecimientos tradicionales del municipio como en cada uno de los 137 puestos que formaban el mercado medieval, repartido por distintos puntos de la Ciudad del Doncel. Este número supone un incremento respecto al pasado año, cuando se instalaron en las empedradas y angostas calles seguntinas 120 de estos establecimientos sin paredes, abiertos a la conversación y al descubrimiento de productos.

La esencia medieval se apoderó ya el viernes de los vecinos, que ayer vistieron orgullosos sus trajes de época, ya fueran de damas de la corte, caballeros o simples mesoneros. No obstante, el inicio oficial de las jornadas se produjo, como viene siendo tradicional en las 10 ediciones anteriores, con el manifiesto de Doña Blanca. Centenares de personas pudieron disfrutar de la recreación del encierro y destierro de este personaje histórico por parte de su marido, el rey Pedro I de Castilla. Las palabras pronunciadas por esta valiente mujer apelaron a su rescate, única manera de evitar su desgracia y abandono.

Esta representación fue seguida atentamente por numerosas autoridades que no quisieron perderse uno de los actos más espléndidos de esta cita medieval. El alcalde, Francisco Domingo, ataviado como un caballero, ejerció de perfecto anfitrión para la delegada de la Junta, Magdalena Valerio; el vicepresidente de la Diputación, Rafael Esteban; el delegado de Salud y Bienestar Social, Juan Pablo Martínez Marqueta; o la delegada de Economía y Hacienda; o la diputada provincial de Cultura, María Jesús Lázaro, entre otros.

Francisco Domingo insistió ayer en la “consolidación” de este evento, que se vale de la majestuosidad de Sigüenza para lograr la fidelidad del público. En este trabajo, no obstante, reconoció también la labor de atracción desarrollada por el Tren Medieval, “que lleva seis años promocionando la ciudad”, un tiempo en el que se han registrado cerca de 47.000 usuarios. “Esta actividad se completa claramente con las Jornadas Medievales, cuyas actividades se extienden a lo largo del año gracias a la Asociación Medieval Seguntina. “Organizar una cena medieval con los más de 300 socios en el castillo, así como un concurso de carteles coincidiendo con el puente de mayo en el que participan los escolares”. En este sentido, el alcalde resaltó el “mérito” a nivel amateur de este trabajo de promoción de la ciudad, en el que el Ayuntamiento colabora con 6.000 euros a través de un convenio, además de que facilita toda la infraestructura necesaria. “Para una ciudad de 5.000 habitantes, que vengan 30.000 personas un fin de semana, es algo para reconocer”, apuntó. Para atender a esta afluencia de visitantes, la localidad cuenta con un amplio dispositivo de seguridad en el que participan la Policía Municipal, la Guardia Civil y Protección Civil. Esta última agrupación, formada por 35 voluntarios, cuenta, además, con el apoyo de otras agrupaciones de hasta 10 municipios, entre los que destacan Marchamalo, Tórtola de Henares, Azuqueca de Henares, o Parla.

Para la delegada de la Junta, las jornadas medievales son una “cita obligada” en el mes de julio. “Es una manera perfecta de hacer de la historia un elemento más para atraer a los turistas, y no hay que olvidar que Sigüenza es la segunda ciudad de Castilla-La Mancha más visitada, después de Toledo”. Y esto es debido, según Valerio, a sus múltiples atractivos. “El paseo por Sigüenza es un paseo por la historia de este país, desde el Medievo hasta el barrio Ilustrado, la Alameda... Es, en definitiva, una auténtica joya”. Para Valerio, Sigüenza tiene “lo que los expertos denominan un producto turístico”. Así, considera que sus recursos turísticos son “muchísimos”, así como su “importante” patrimonio histórico y artístico, a lo que hay que sumar los parajes del entorno, la cercanía del Parque Natural del Río Dulce, las pedanías, etc. “Esto viene, además, unido a una infraestructura turística formada por magníficos restaurantes, terrazas, casas rurales, hoteles, el propio Parador... ”. Por último, la delegada insistió en la cercanía de la Ciudad del Doncel a una comunidad tan poblada como la de Madrid, “además de su conexión por tren, y la importancia del Tren Medieval, que ha logrado que se conozca aún más si cabe”.

Todas estas magnitudes han hecho que el alcalde seguntino piense cada vez más en la posibilidad de que esta fiesta, declarada de Interés Turístico Provincial, obtenga el reconocimiento regional. “Nos consta que, al menos, el evento ha de tener 15 años, y nosotros ya vamos por 11”, apuntó Domingo, quien recordó que la localidad ya cuenta con el privilegio de tener una Fiesta de Interés Regional, como la procesión de los Faroles. “Y al igual que esa, las Jornadas Medievales tienen la entidad suficiente para que venga gente de toda España. De hecho, desde hace un mes están ocupadas prácticamente todas las plazas hoteleras, y hoy es muy difícil comer en un restaurante”. Por su parte, la delegada de la Junta, coincidió en la “consolidación” del evento. “Si el Ayuntamiento lo cree conveniente, se podría empezar a tramitar el expediente”.

Intensidad de olores
La plaza Mayor de Sigüenza centralizó, como sucedería siglos atrás, la principal actividad de la ciudad, con un gentío que iba y venía, disfrutando de los productos artesanales que, con mucho esmero, habían elaborado los propios dependientes de los puestos. La gastronomía fue quizás lo que más atraía la mirada de vecinos y visitantes, prácticamente obligados por los intensos olores que desprendían, ya se tratase de quesos, chorizos, o chocolate blanco. Pero tampoco faltaron las armas caballerescas, que incluso pidieron elaborar con sus propias manos los aspirantes a caballeros gracias a los talleres organizados en las cercanías de la Casa del Doncel.

El Mundial, en el Medievo
Las espadas y escudos eran, por tanto, una pieza esencial en la vestimenta medieval, algo que confería a los más pequeños la valentía suficiente para retar a un duelo incluso al que le doblaba en altura. Las pequeñas optaron, en su mayoría, por damas de la Corte o mesoneras del pueblo llano, aunque también se pudieron ver gitanas o elfas. Pero lo que sin duda se coló entre tanta vestimenta medieval fue, como no, la bandera de España. Los colores de un país que estos días están más de moda que nunca a causa del Mundial de Fútbol. “El final de nuestras Jornadas Medievales coinciden mañana –por hoy– con otra final, la del Mundial. Y si llevamos más de 80 años esperando para ganar, vamos a intentar que esta cita sea un broche de oro para nuestra fiesta”, explicó el alcalde, que anunció que la plaza Mayor contará con una pantalla gigante. “Es un lugar emblemático, una de las plazas más bonitas de España, y allí podremos disfrutar del partido, animar a la selección y, si podemos, celebrar la victoria”.