Células madre adultas demuestran su eficacia en tres usos para traumatología

01/10/2010 - 09:45 Hemeroteca

Por: MANU MEDIAVILLA. COLPISA
“A medio plazo, las células madre (CM) van a ser capaces de solucionar muchísimas patologías, pero hoy todavía no”. Lo recalca el traumatólogo Pedro Luis Ripoll, premiado junto a Mariano de Prado y Javier Vaquero por su trabajo con CM adultas en articulaciones.
“Somos contrarios al uso indiscriminado de células madre, que no mejoran cualquier proceso”, remacha Pedro Luis Ripoll.
Con el aval científico del Premio Fundación Mapfre al “Desarrollo de la Traumatología Aplicada”, el experto de la Fundación murciana Amical (Asociación Médica para la Investigación de las Ciencias del Aparato Locomotor) insiste en que “queremos crear un clima de rigor y sensatez para no levantar falsas expectativas en los enfermos”. Las células madre son ya una realidad terapéutica en su especialidad, donde su uso tiene “mucha aplicación social, porque la necrosis está muy extendida, y aún más los defectos del cartílago”. Pero su “papel es todavía pequeño”, aunque “irá aumentando”. En definitiva, son ya presente, pero, sobre todo, tienen mucho futuro.

Cien pacientes
El presente ha quedado demostrado con el trabajo premiado, que durante dos años ha cubierto una doble etapa de experimentación con animales y de práctica clínica. En este caso, el tratamiento con células madre adultas (CMA) se aplicó a un centenar de pacientes con problemas de articulaciones de cadera, rodilla y hombro, así como defectos del cartílago y seudoartrosis, nombre que identifica al retraso en la consolidación de fracturas. La experiencia terapéutica con CMA en tantos tipos de articulaciones es una de las más significativas en el ámbito de la traumatología.
Tras señalar tres etapas previas de la cirugía traumatológica, resumidas en los conceptos de resección o extirpación, reconstrucción y reemplazos o prótesis, Ripoll considera que “estamos iniciando una cuarta, la época de la regeneración de las articulaciones que ahora son sustituidas”. Pero no deja de insistir en el “realismo terapéutico”. La red sanitaria pública española tiene ya capacidad de aplicar el tratamiento con células madres adultas (su eficacia hace innecesario emplear las embrionarias y ahorra posibles debates éticos) “para solucionar esos tres problemas”. Paralelamente, se sigue “investigando para ampliar sus usos. Pero no se puede aplicar a cualquier patología “.

Dos de cada cien
De hecho, aclara, “de cada cien consultas, sólo dos son objeto de tratamiento” con células madre, para el cual “es muy importante detectar el problema en una fase temprana, sobre todo en la necrosis ósea”. Eso sí, es un “método seguro y efectivo” cuando se diagnostica pronto. Y así lo demuestran, no sólo los 100 casos de su investigación a lo largo de dos años, sino también la literatura científica internacional, que muestra series de mil caderas tratadas con hasta siete años de evolución.