Conducir de forma eficiente puede reducir el 15% la contaminación en las ciudades

Así, con motivo del Día sin coches, esta empresa de gestión de flotas explica que conducir con marchas largas y mantener el motor a bajas revoluciones (a 2.000 rpm en gasolina y entre 1.500 y 2.000 los diésel) rebaja un 15 por ciento la contaminación. Además, señala que un vehículo que rueda a 4.000 rpm contamina acústicamente lo mismo que 30 que lo hacen a 2.000 revoluciones.

   Igualmente, aconseja evitar acelerones y frenazos bruscos, tratando de mantener una velocidad constante. Por ejemplo, cuando se circula a 100 km./h. y se acelera hasta los 120 km./h. se contamina un 44% más, puesto que a partir de los 100 km./h. el consumo de un coche no aumenta proporcionalmente con respecto a la velocidad.

   También recomienda mantener el buen estado de los neumáticos y la presión, ya que el 20 por ciento del consumo de carburante se dirige a superar la resistencia a la rodadura, por ello, se contamina más si no se usan las ruedas adecuadas, si no están en buen estado o si no llevan la presión recomendada por el fabricante. De este modo, recuerda que una presión correcta reduce esfuerzo, consume menos gasolina y emite menos CO2 a la atmósfera, mientras que una presión inferior de sólo 0,3 bares sobre la recomendada en los neumáticos incrementa un 3% la contaminación del vehículo.

   Otro de los consejos es circular con las ventanillas subidas cuando se va a más de 100 km./h., con el fin de reducir la resistencia y consumir un 5 por ciento menos de gasolina, lo que conlleva una caída de las emisiones de CO2 que produce el vehículo; así como hacer un uso racional del aire acondicionado, manteniéndolo entre los 20 y 23 grados centígrados.

   En cuanto a la carga, insta a no cargarlo en exceso, ya que por cada 100 kilogramos de peso que se introducen en el coche, la contaminación del vehículo aumenta un 5 por ciento.

   Por otro lado, aconseja quitar los elementos exteriores que rompan la aerodinámica de nuestro coche como es la baca o los cofres portaobjetos, que elevan en un 4 por ciento la contaminación del coche.

   Finalmente, recomienda realizar las puestas a punto anuales estipuladas por cada marca, principalmente al año o cada 20.000 kilómetros. En estas revisiones se cambian los filtros del aire y de gasolina, además del aceite y otros líquidos. Sustituir un filtro o unas bujías sucias pueden hacer que el vehículo coche contamine hasta un 10 por ciento menos, además de aumentar la seguridad y la vida útil del coche.