Conoce la faceta más personal del nuevo alcalde de Guadalajara: Alberto Rojo

13/06/2019 - 14:11 Redacción

Es fan de Manolo García y Los Secretos y, además, desde muy pronto mostró interés por la política. Descubre en esta entrevista la faceta más personal del sucesor de Antonio Román.

Alcalde de Hita, delegado de la Junta de Comunidades durante cuatro años y, muy probablemente, nuevo alcalde de Guadalajara desde este sábado a tenor de las últimas informaciones sobre pactos por la Alcaldía capitalina publicadas por este medio. Además, en esta entrevista podrás conocer la faceta más personal del socialista, como que nunca olvidará la película 'Cuando un hombre ama a una mujer' o que su serie predilecta es 'Cuéntame'.

¿Por qué has elegido este lugar para la entrevista?
En este edificio está una parte de la universidad de Guadalajara. Hay otros edificios de la Universidad de Alcalá de Henares en la ciudad, pero aquí es donde estudié yo. Fui de la primera promoción de Empresariales y tengo un grato recuerdo del edificio. Además, este es mi barrio. Viví toda mi infancia en la calle General Vives Camino y ahí siguen viviendo mis padres. Y en tercer lugar porque, si soy alcalde, el proyecto más importante será la construcción del nuevo campus universitario en las Cristinas, que es el presente y el futuro de Guadalajara.

Eres de esa generación que ha visto cambiar Guadalajara radicalmente.
Yo nací en 1975, hace 44 años, en lo que entonces era la Residencia Vieja. Entonces no estaba el Hospital, que llegó a principios de los 80 y ahora va a seguir ampliándose. Y ya solo en esos servicios sanitarios ha cambiado la ciudad. También  hemos visto cambiar los servicios públicos gracias al Estado de las Autonomías, que dio un plus a la Educación y los Servicios Sociales. Claro que ha cambiado, pero no ha entrado en el siglo XXI y eso es lo que quiero conseguir como alcalde.  
¿Cree que ese cambio también ha hecho que hayamos perdido ese espíritu de pueblo que había antes?
Guadalajara es una ciudad media, de casi 100.000 habitantes, aunque sean 86.000 censados, en la que hay una parte de la gente que se conoce, pero es verdad que los nuevos desarrollos puedan ser un poco más impersonales. Eso también es un reto que tenemos como sociedad. Es que esta ciudad, como ciudad, es relativamente reciente. Hasta 1910 teníamos 10.000 habitantes.  


Cuando eras joven, ¿cómo se pasaba aquí el tiempo libre?
Yo fui del Club Deportivo Guadalajara muy joven, con siete añitos, en el 82, el año de los Mundiales. Mi padre me hizo socio del Depor y recuerdo la bajada por Julián Besteiro, en la que no había absolutamente nada. De hecho, donde ahora está Eroski había un hotel en ruinas. Y esa era una zona de juego, de medio campo. Pasada la Avenida del Ejército, jugábamos con la bicicleta, con el balón... Y luego en el colegio Alvarfáñez de Minaya, donde yo hice la EGB, sí que tenías tu pista para jugar. Y también recuerdo esos cines maravillosos que tenía Guadalajara, como el Coliseo Luengo o el Imperio, a los que también nos llevaban mucho nuestros padres.


El cine Imperio tenía mucho encanto.
Era un cine en pleno casco histórico, de cuando el casco tenía mucha vida, y sí, con mucho encanto. Recuerdo perfectamente la última película que vi, ‘Cuando un hombre ama a una mujer’. Meg Ryan era la protagonista. Y recuerdo que lloré con aquella película, que pensándolo con perspectiva tenía sus cosas para analizar. Me gustaba mucho el cine Imperio y también el Coliseo Luengo. Mi padre trabajaba en una fábrica, en Vicasa, y todos los años la fiesta de la fábrica se hacía en torno al día de Reyes, en el Coliseo Luengo, así que de eso lo recuerdo también. Y también de algún mitin electoral, que llamaba a mi abuelo, que ha sido siempre mi referencia social y política, y le decía ‘abuelo Isi, que hay un mitin’. A lo  mejor tenía yo 10 o 12 años, pero me gustaba. La política ahora está desprestigiada, pero es esencial para la vida, porque gestiona la convivencia. Eso es lo que a mí me gustaría hacer como alcalde, que la gente viva lo más feliz posible.   


Osea que lo de la política te viene de familia, del abuelo.
Mi abuelo Isi, Isidoro Blas, ha sido siempre una referencia, desde una perspectiva muy objetiva sin rencores, haciendo un análisis de lo que ha sido el siglo XX. Él nació en 1906 y falleció en 2004, con 98 años. Ha vivido todo el siglo XX y una pequeña parte del XXI.  Me contó cómo llegó la luz pública, primero a las calles, y luego a su casa. Y más tarde el saneamiento, ya en los años 60. También me habló de los movimientos sociales y políticos que hubo en España, siempre sin rencores, para convivir. Es una palabra que el decía mucho y que también uso yo, convivir. Es fundamental. Y es verdad que él era socialista. De hecho, la mejor herencia que tengo es una postal de Pablo Iglesias de los años 20 que él conservó a pesar de todas las vicisitudes del siglo XX.    


Oye, ¿y sigues siendo un hombre de cine?
No voy al cine tanto como quisiera. Las dos últimas veces que he ido a los multicines han estado relacionadas con mi responsabilidad pública como delegado del Gobierno regional. La penúltima fue para ver un documental precioso de Cinefilia, ‘El agua secuestrada’, que es importante para nuestra tierra. Y hace unos días, en la presentación de un documental de las Burbutrices. Esos han sido mis últimos acercamientos a la gran pantalla, una pena, porque me gusta mucho.
Hoy en día las series le han comido mucho terreno al cine. ¿Sigues alguna?
Es otra de las renuncias. Cuando llegas a casa, dedicas tiempo a la familia, a mi hijo, y cuando se duerme, te pones a preparar el día siguiente o a ver informativos o debates políticos, pero aún así puedo dar dos referencias. La última que vi y que me encantó fue ‘La Casa de Papel’, que me pareció magistral. Y tampoco despisto ‘Cuéntame’, que tiene una temática que siempre me ha interesado, el relato histórico de la segunda mitad del siglo XX. No es que la vea de una manera ordenada, pero la sigo porque conozco a los personajes y me ubico en el periodo histórico. Ahora están en los años 80 y 90, que fueron apasionantes y es una época que ya he vivido teniendo uso de razón.    


Antes la veíamos con curiosidad por el pasado y ahora un poco como jueces.
Es verdad que cuando  hablan de esta época ya tengo percepciones mías. Es una serie interesante y no la despisto.  


En cuanto a literatura, ¿hay algún libro que te haya marcado?
Me gustan principalmente los libros de relato histórico, de la segunda parte del siglo XIX y más el XX. Y hay un libro, unas memorias, que me marcaron, las memorias de Azaña, que reflejan mucho la sociedad que tenemos hoy en día  con unas reflexiones muy profundas por parte de uno de los mejores estadistas que ha tenido este país en el siglo XX. Estas memorias darían mucho para hablar. Y un último libro que destacaría es el que presentábamos hace unos días de Ignacio Urquizu, ‘Cómo somos’, que habla de la gente corriente, de esa gran mayoría que se levantan a las seis de la mañana, que llegan tarde a casa y a fin de mes de una manera no desahogada y que su principal misión es tener un proyecto de vida para ellos y para sus hijos. Me ha hecho reflexionar mucho sobre cómo puede  cambiar la perspectiva social y política del país.   


Hablando de gente, ¿no hacemos a veces demasiado caso al ruido de las redes sociales?
Son una revolución de los últimos años que probablemente les cuesta menos asimilar a los jóvenes que a los que pasamos de 40 años, pero sí es verdad que mueven mucho y son un canal de información amplio. La información ahora fluye al instante. Hay que hacer caso a las redes sociales y utilizarlas bien. Son una oportunidad, pero hay que hacer un buen uso de ellas y marcar unos límites entre todos.


¿Eres hombre de redes sociales?
Tengo las habituales ahora mismo, Twitter, Facebook, Instagram, pero soy de esa generación que no ha empezado con las redes sociales debajo del brazo, pero que tenemos que ponernos al día.  


Para ir acabando, ¿te consideras un hombre de música?
Me gusta la música de la radio. Pasas tiempo en el coche y pones las cadenas en las que sale la música de actualidad, pero estoy marcado por los 80 y los 90. Para mí los Secretos son los Secretos. Me marcarón la adolescencia, como Manolo García, que me he quedado sin entradas para ir a verlo. Y ahora estoy escuchando mucha música infantil. Tengo un niño pequeño y somos unos especialistas en los Cantajuegos. Es una afición que nos sale cuando somos padres.  


¿Qué canción nos recomendarías?
‘A tu lado’, de los Secretos.  


‘Cuando un hombre ama a una mujer’, ‘A tu lado’... Eres un romántico.
Sí, pero incluso si lo sacas del ámbito romántico, siempre hay que estar al lado de la gente. Somos tantos, que si no convivimos lo mejor posible, esto es un desastre. 

Edad

44 años.

 

Estado civil

Casado y con un hijo.

 

Profesión

 Ciencias Empresariales.

 

Experiencia

Política

Delegado de la JCCM en Guadalajara en la legislatura que concluye. Anteriormente, diputado regional, delegado provincial de la JCCM y alcalde de Hita.