Detectan una proteína que desencadena la caída del cabello en hombres
Científicos de la Universidad de Pennsylvania, en Estados Unidos, han identificado una proteína que desencadena la pérdida del cabello en hombres, lo que puede abrir la puerta al desarrollo de tratamientos para frenar e incluso revertir la calvicie, según los resultados del estudio que publica la revista 'Science Translational Medicine'.
La hormona sexual masculina, la testosterona, juega un papel clave al igual que los factores genéticos, que hacen que los folículos pilosos se contraigan y eventualmente se hagan tan pequeños que se vuelven casi invisibles, lo que lleva a la aparición de la calvicie.
En este sentido, esta nueva investigación ha analizado los genes que se activan cuando los hombres empiezan a quedarse calvos, y han observado que los niveles de una proteína clave llamada prostaglandina D sintasa eran elevados en las células de los folículos pilosos localizados en algunas zonas calvas del cuero cabelludo, pero no en las que tenían pelo.
De hecho, cuando criaron ratones con altos niveles de dicha proteína los roedores se quedaron completamente calvos, mientras que cuando se les implantó pelo humano, éste dejó de crecer cuando le dieron la proteína.
El profesor del departamento de Dermatología de la Universidad de Pennsylvania, George Cotsarelis, que dirigió la investigación, ha mostrado su satisfacción por dicho hallazgo en declaraciones a la BBC, recogidas por Europa Press, ya que "han identificado un objetivo diana para tratar la calvicie".
"El siguiente paso sería detectar los compuestos que afectan a este receptor y también determinar si el bloqueo de los receptores podría revertir la calvicie o sólo la prevendría", ha apuntado este experto.
La inhibición del crecimiento del pelo se activa cuando la proteína se une a un receptor en las células de los folículos pilosos, dijo Cotsarelis, que ha apuntado que ya hay varios medicamentos conocidos que apuntan a este proceso, además de otros que están todavía en fase de desarrollo.
Por ello, confían en que esto permita obtener un tratamiento que pueda ser aplicado al cuero cabelludo para prevenir la calvicie y posiblemente ayudar a que el pelo vuelva a crecer.