Doble “tarde de perros” en la presentación del libro de López Castillo

01/10/2010 - 09:45 Hemeroteca

López Castillo escucha atento las palabras amables de su gran amigo Francisco García Marquina. (Foto: J.L.ALJARA)
“Santiago es el mejor amigo del hombre”. Con estas palabras su gran amigo Francisco García Marquina se refería a Santiago López Castillo, cual perro fiel y cariñoso, en la presentación de Cornudos y apaleados, una recopilación de artículos sobre los animales y la naturaleza.
Pese a la atormentada tarde que se antojó, nadie faltó a la cita literaria de presentación del libro Cornudos y apaleados de Santiago López Castillo, más escritor que periodista en los últimos tiempos, pero conservando ese toque personal que le ha valido poseer grandes seguidores como también detractores. Fueron sin embargo los primeros los que acudieron a la “valiente” invitación de la Diputación de Guadalajara, en justa correspondencia a los grandes protagonistas de la tarde, que no eran otros que los animales y la naturaleza, los objetos de culto del libro en cuestión, que recoge un puñado de artículos, entre irónicos y divertidos, publicados en los últimos años en diversos medios escritos, entre ellos Nueva Alcarria, del que es habitual colaborador.
Una vez tomados los preceptivos asientos, la primera en tomar la palabra fue la diputada de Cultura, María Jesús Lázaro, que adelantó a los presentes que este título de López Castillo se hará llegar a todas las bibliotecas de la provincia en un gesto por sensibilizar a la población en lo referente a los animales y el entorno que nos rodea.
Tras ella tomó la palabra su gran amigo y autor de la tierra Francisco García Marquina, quien tuvo a bien comparar a Santiago López Castillo con un can, atendiendo a su amistad, “buena por lo que tierre de perro”. “Su cariño y felicidad son perrunos, como también los colmillos, dos aspectos que ha dejado sembrada la estela de afectos y también de rencores”, acertó a decir García Marquina en tono más bien poético mientras López Castillo asentía con la cabeza. Hombres de perros, en definitiva, que entienden y que tienen la capacidad de comprender en primera persona la relación tan estrecha que puede llegar a establecer un hombre y un animal.
A las palabras sabias de García Marquina le siguieron los agradecimientos de Chelo Polo, miembro de Ecologistas en Acción, quien alabó en su turno de disertación la labor de López Castillo en su trayectoria televisiva, especialmente aquella en la que con su denuncia –respecto al suceso ocurrido en Tarragona en 1992 cuando a 14 perros le fueron seccionadas las patas con una motosierra–, pudieron cambiar el rumbo de la Ley de protección animal en nuestro país.
Las palabras amables de su editor, Juan Pastor, dieron paso al momento más esperado de la tarde, la palabra del autor, quien con fotografía en mano de su querido golden Niebla, y embargado en por la emoción, compartió recuerdos y experiencias con su público amigo, a la vez que un consejo: amar a los animales tanto como ellos te aman a ti. Para los que incumplan esta escueta y sencilla instrucción, sólo pide castigos más duros.

Pinceladas literarias
Descolgado temporalmente de su afición pictórica, y sumido de lleno en el proceso literario, tras Cornudos y apaleados y Las aliagas, su última novela, sus pasos se encaminan ahora a perfilar el último de sus textos, que bajo el nombre de La residencia, enfila letras pintorescas que, a caballo entre la ironía y la tristeza, describe las situaciones que pueden sucederse en un centro, donde el silencio, en ocasiones, es sepulcral, comenta el propio autor. En definitiva, una novela humana distinta a todo lo anteriormente publicado bajo la firma de López Castillo aunque sin perder el componente rural y los matices costumbristas que le caracterizan.