El Azuqueca buscará en Hellín recuperar el fútbol alegre de las primeras jornadas

01/10/2010 - 09:45 Hemeroteca

FÚTBOL TERCERA DIVISIÓN
El Azuqueca espera reencontrar en Hellín y el próximo sábado, a partir de las 19.00 horas, su fútbol alegre. El técnico rojinegro, Quique López, quiere más “velocidad en el juego y una circulación del balón fluida. En defensa estamos bien, mejor que la temporada pasada, pero hay que seguir mejorando y buscar la regularidad”, indica el preparador azudense. De cara al choque contra el cuadro albaceteño, López tiene las dudas de Raúl Grande y Carlos Sierra, ambos aquejados de una gastroenteritis que les ha impedido entrenar en los últimos días.
Después sufrir más de lo debido ante el Tarazona, el Azuqueca espera tener un partido relativamente tranquilo en Hellín el próximo sábado, a las 19.00 horas. Lo ocurrido en casa ante el Tarazona obliga al conjunto rojinegro a corregir varias cosas. Lo más urgente para Quique López es “encontrar una circulación del balón más fluida. Las recuperaciones de Mario Torre y Javi Hernández se deben notar. Tenemos que dar una mayor velocidad al juego y buscar ese fútbol alegre que nos gusta. En defensa estamos mejor que la temporada pasada aunque en el último partido tuvimos más de un despiste que nos hizo pasarlo mal. Arriba, Sedano quizás esté acusando la falta de trabajo en pretemporada porque no le veo fino. Y Cristian es un jugador con mucho peligro si tiene espacios. También esperamos que Orea se entone y nos dé más alternativas en ataque”, comenta el técnico rojinegro.

Buscando la regularidad
Será el objetivo de los azudenses en Hellín. El conjunto albaceteño es uno de esos rivales rocosos que siempre dan problemas y más si es en casa donde se mantienen invictos e intratables habiendo marcado en dos partidos ocho goles y ganando por un contundente 4-0. Toledo y Atlético Esquivias ya sufrieron en sus carnes el potencial del Hellín cuando juega en el Santa Ana. “Es un rival complicado. Un equipo fuerte pero debemos fijarnos en nosotros mismos. Debemos hacer bien las cosas y ser más regulares. Se nota que nos hemos ganado el respeto de los rivales porque ya no nos presionan tanto. Ahora toman sus precauciones y nos esperan porque ya nos conocen”, comenta López, que tendrá para el choque del sábado las dudas de Raúl Grande y Carlos Sierra. Ambos futbolistas han sufrido el virus de la gastroenteritis que está ahora de moda y que “también ha llegado a Azuqueca. No pudieron entrenar y veremos cómo evolucionan en los próximos días y también que no caiga ningún otro jugador porque sería problemático”, añade el técnico azudense que como el resto de los aficionados y jugadores rojinegros esperan cuanto antes volver al San Miguel, que se encuentra en obras para cambiar su aspecto y el césped natural por el artificial. “Es nuestro campo, nuestro vestuario. Podremos volver pronto. El próximo partido en casa es contra el Alcázar y ya se rumorea que quizá llegue a tiempo pero habrá que esperar”, concluye el preparador azudense.