El Balonmano Guadalajara visita al irregular pero peligroso Eón Alicante

Dos semanas después, el Balonmano Guadalajara vuelve a la competición. Tras caer en Ibiza y no poder jugar la semana pasada, el equipo morado intentará mantener el liderato una semana más en la complicada cancha del Eón Alicante, un equipo que para Requena “es un rival que está siendo un poco irregular pero que es muy peligroso”. Alicante cuenta “con muy buena portería, basa su juego en los desequilibrios que crea Matheus de Novais en primera línea y los centrales generan muy bien ese desequilibrio, y además tienen muy buenos lanzadores desde fuera, algo que en esta categoría es difícil”. 

Además, es un equipo que juega con defensa abierta, “los jugadores no están acostumbrados a atacar ese tipo de defensa porque casi todo el mundo defiende en 6-0, pero en el partido de ida ya conseguimos atacarla bastante bien, creo que tenemos recursos y esta semana hemos entrenado jugar contra ese tipo de defensa”.

En Ibiza, los morados no estuvieron finos en defensa. Para Requena “somos un equipo que defiende bien, pero necesitamos encontrar nuestra mejor versión en defensa, aunque nos va a costar porque Alicante tiene muchos argumentos en ataque”. 

Precisamente uno de los líderes defensivos del equipo, Miguel Llorens, fue protagonista en la previa, “llevamos varios días trabajando la defensa para frenar todos sus recursos ofensivos”. Pese a la derrota de Ibiza y a no poder jugar la semana pasada, asegura que “el grupo está fuerte, motivado, con ganas y eso se nota en los entrenamientos, estar arriba y luchar por un objetivo te da alas”. 

Para Miguel la liga “está muy igualada, cada partido es un mundo, pero nuestro objetivo es ganar cada partido. Además, explica que hay dudas en el vestuario ante un desafío complicado y fuera de casa, “tenemos respeto a todos los rivales, cualquier equipo te puede dar un susto, pero confiamos en nosotros mismos y en lo que somos capaces de hacer para llevarnos cualquier partido”.

Las goteras del Santamaría siguen coleando

Ha pasado casi una semana, pero el aplazamiento del partido del pasado fin de semana por las goteras del Pabellón David Santamaría sigue presente. De hecho, el entrenador del Balonmano Guadalajara explica que un aplazamiento “siempre afecta, cambia la planificación de entrenamiento y cambia la siguiente que en principio no íbamos a tener partido”. El técnico añade que “no fue agradable para ninguno de los dos equipos, y tampoco fue positivo para nuestra imagen pero no queda otra que adaptarnos” aunque aclara que “cuando fuimos a Mallorca, su pabellón tampoco era de los mejores”. De cara a final de temporada, el Ayuntamiento de Guadalajara se ha comprometido a solucionar con parches unas goteras que no solo afectan a los partidos, sino también a los entrenamientos y al día a día del equipo, “cuando llueve mucho tenemos que usar un tercio de la pista porque el resto no puede utilizarse, así que ojalá sirva para aprender, por nuestra parte para tener instalaciones alternativas y por parte de quien gestione la instalación que haya los arreglos necesarios para que esté en buenas condiciones”.

Llorens ofreció el punto de vista de los jugadores, “no fue una situación agradable, ya lo habíamos vivido en entrenamientos y nos ha perjudicado porque nosotros queríamos jugar”.