El calentamiento global impulsa la incidencia de la malaria y el dengue

01/10/2010 - 09:45 Hemeroteca

Por: EUROPA PRESS
El cambio climático es uno de los factores que provoca un aumento de la incidencia de enfermedades como la malaria y el dengue, según alertó ayer la Organización Mundial de la Salud (OMS) coincidiendo con el Día Mundial de la Salud que precisamente este año lleva como lema "Proteger la salud del cambio climático".
Para la organización las repercusiones sanitarias del cambio climático serán difícilmente reversibles en años, sobre todo en las zonas más desfavorecidas del mundo. Por ello abogan porque se inicien cuanto antes alianzas multisectoriales interdisciplinares que afecten a la planificación urbana, la industria, el transporte, la energía o el aprovechamientos de recursos para proteger la salud de todo el planeta. Es uno de los temas estrella de los últimos años. El cambio climático ha llegado para quedarse y tanto la clase política como la población en general, lo han incluido entre sus principales preocupaciones. La Organización Mundial de la Salud no ha querido mantenerse ajena a este tema, y ha decidido que el eje en torno al que gire el Día Mundial de la Salud, que se celebra como cada año hoy, 7 de abril, se centre en la necesidad de proteger la salud de los efectos negativos del cambio climático. Con esta elección, la OMS reconoce que el cambio climático supone una amenaza creciente para la seguridad sanitaria mundial.
Al menos 15.000 personas más mueren cada año de malaria, diarrea, malnutrición e inundaciones, todo lo cual puede ser atribuido al cambio climático, subrayó el director de la oficina para el Pacífico Occidental de la OMS, Shigeru Omi, que precisó que más de la mitad de estas muertes se producen en Asia. "Los mosquitos portadores de la malaria son localizados ahora en zonas donde no había malaria antes", afirmó en rueda de prensa, subrayando que ahora se están expandiendo a climas más frescos desde los trópicos. "Para el dengue, hay otros muchos factores responsables del incremento de los mosquitos (portadores), pero estoy seguro de que el cambio climático ciertamente está desempleando un papel", añadió.
La malaria se cobra la vida de al menos 100.000 personas al año. La OMS estima también que puede haber 50 millones de casos de contagio de dengue en todo el mundo cada año, de los cuales la mitad requieren hospitalización y unos 12.500 son mortales. Por otra parte, el informe pone de manifiesto que, actualmente, la polución del aire causa 800.000 muertes por año. Según las estimaciones citadas por la OMS, en el caso de que la temperatura global aumentase 1 grado centígrado, habría 20.000 decesos anuales más por año causados por enfermedades cardiorespiratorias.

Peligros para la salud
El cambio climático también está provocando la subida de los niveles del mar, el agotamiento de ríos y cambios en las pautas climáticas. En este contexto las inundaciones, las sequías y las olas de calor están cobrándose un precio en la salud humana. Estas repercusiones afectan de forma más importante a poblaciones vulnerables como niños pequeños, ancianos, enfermos, pobres y poblaciones aisladas.
La OMS asegura que los efectos físicos del cambio climático serán distintos en diversas localidades geográficas y que las repercusiones del cambio climático en la salud humana se verán modificadas pro condiciones tales como el nivel de desarrollo, pobreza y educación, la infraestructura de salud pública, las practicas de aprovechamiento de la tierra y la estructura política, siendo los países en desarrollo los más afectados.
En este sentido, Omi anunció que la OMS destinará 10 millones de dólares a un programa para informar a las personas y los gobiernos sobre los peligros para la salud del cambio climático. "Un menor consumo de energía y avances en la tecnología para reducir las emisiones de los gases con efecto invernadero sería crucial", aseveró.
La OMS asegura que gracias a una mayor colaboración, la comunidad mundial estará mejor preparada para hacer frente a los problemas sanitarios relacionados con el clima que se presenten en todo el mundo. Como ejemplo de estas medidas conjuntas están el reforzamiento de la vigilancia y el control de enfermedades infecciosas, el uso más seguro de suministros de agua cada vez más escasos y la coordinación de la acción sanitaria en las emergencias entre otras.