El fuego de Tortuero acabó con 50 de las cerca de 300 colmenas que hay en la zona

23/08/2013 - 12:11 Redacción

A la hora de evaluar los daños provocados por los incendios, los balances suelen saldarse con cifras relativas a las hectáreas de terreno arrasadas. Sin embargo, no todo se reduce a eso. También las especies animales sufren las consecuencias de las llamas. Ejemplo de ello son las colmenas que se ha perdido en el incendio de Tortuero. “Hemos tenido bastantes pérdidas debido al fuego”, indican desde el servicio veterinario de la Asociación Provincial de Agricultores y Ganaderos (APAG). Según los cálculos realizados a través de las denuncias presentadas al seguro por los asociados, las pérdidas podrían alcanzar unas 50 colmenas de las 300 que había en la zona. También habían resultado apreciables las pérdidas que se produjeron a raíz del fuego de Valdeconcha. Pese a ello, el presidente de la Asociación de Apicultores, Ángel López, considera que los daños no han sido graves para el conjunto de la provincia, “aunque está claro que sí lo han sido para aquellos que se han visto afectados”.  Además, el presidente de la asociación recuerda que los apicultores, a la hora de establecer sus colmenas, “suelen colocarlas en lugares en los que estén más o menos seguras en caso de que se produzca un incendio”.
Desde Ecologistas en Acción también recuerdan que los incendios suelen producir daños al ecosistema animal. “Los daños que provocan son importantes, sobre todo cuando se producen en época de cría”.  Además de los animales que puedan perder la vida, hay otros que se ven obligados a buscar nuevos espacios en los que vivir. El primer peligro al que tienen que hacer frente llega durante la misma huída. “Estamos viendo, cada vez más, animales que han sido atropellados al intentar escapar”. Después llega el momento de establecerse en un nuevo entorno, con los enfrentamientos que eso puede provocar a la hora de reorganizar los territorios.
Desde APAG apuntan un ejemplo de ello, el caso de los corzos y jabalíes que venían habitando en la Sierra Norte de la provincia y que salieron de la zona obligados por el fuego. “Tienen que volver a reorganizarse”. Aunque durante este verano el fuego ha vuelto a azotar la Sierra Norte, por fortuna no ha provocado daños a una de las marcas de calidad más jóvenes que hay en Guadalajara, la carne de Guadanorte. Así lo afirma su presidente, Julián Arenas, quien asegura que “gracias a Dios no hemos tenido pérdidas”.