El Gobierno regional redujo su estructura un año y medio antes de que lo pidiera el PP
01/10/2010 - 09:45
Por: Redacción
La consejera de Administraciones Públicas y Justicia, Magdalena Valerio, afirmó ante el Pleno de las Cortes Regionales que el esfuerzo de austeridad y transparencia del Gobierno de Castilla-La Mancha es constante, como lo demuestra el hecho de que el presidente Barreda redujo la estructura de su Ejecutivo en agosto de 2008, un año y medio antes de que la oposición reclamase esta medida.
La consejera de Administraciones Públicas y Justicia hizo estas consideraciones durante el Debate General sobre la Estructura Administrativa de la Junta de Comunidades propuesto por el Grupo Popular. Tras mostrar su perplejidad por esta petición que llega con año y medio de retraso, Valerio recordó que la reestructuración del Gobierno regional llevada a cabo en agosto de 2008 supuso la supresión de cuatro Consejerías, del 25 por ciento de los altos cargos, de 18 plazas de personal eventual y de 149 plazas de funcionarios y personal laboral de apoyo a los órganos directivos suprimidos.
Magdalena Valerio subrayó que el presidente Barreda fue el primero en hablar de crisis sin giros lingüísticos y, en consecuencia, predicó con el ejemplo abordando una reestructuración de su Gobierno que se traduce en un ahorro de aproximadamente 6 millones de euros anuales, que superará los 18 millones de euros al final de la legislatura.
Una iniciativa del presidente José María Barreda que, recalcó la consejera, sitúa a Castilla-La Mancha como la más austera de los Gobiernos y Administraciones de las comunidades autónomas. No obstante, añadió, el Gobierno regional seguirá transitando permanentemente por la senda de la austeridad y el ahorro, al tiempo que preserva la prestación de servicios y políticas sociales.
Valerio invitó al Partido Popular y a su responsable regional a exigir a las comunidades autónomas donde gobierna su partido que apliquen medidas de austeridad similares a las de Castilla-La Mancha, en lugar de pedir con año y medio de retraso lo que ya está hecho en nuestra región.
Estructura adecuada a las competencias y características de la región
La titular de Administraciones Públicas y Justicia recalcó que la estructura actual del Gobierno de Castilla-La Mancha es la adecuada a la realidad competencial de la Junta de Comunidades y a la prestación de servicios con cercanía en una región con características geográficas tan peculiares como la nuestra, con una extensión de 80.000 kilómetros cuadrados, 919 municipios y numerosas pedanías, y una gran dispersión geográfica de sus más de 2 millones de habitantes.
Tras la supresión, en agosto de 2008, de cuatro Consejerías, 15 Direcciones Generales y 15 Delegaciones Provinciales, la estructura del Gobierno regional es una de las más reducidas de España, con un total de 118 altos cargos, que suponen el 0,15 por ciento del total de empleados públicos con que cuenta la Administración Autonómica en la actualidad.
Valerio destacó que esta ratio es muy inferior en Castilla-la Mancha a la media de las comunidades autónomas españolas, que, según datos estadísticos del Gobierno de España correspondientes al año 2009, se situaba en un 0,48 por ciento de altos cargos en relación a los empleados públicos, y que reflejaba porcentajes superiores al de nuestra región incluso en comunidades uniprovinciales, como el caso de La Rioja, con un 1,26 por ciento, o Murcia, con un 0,35 por ciento, ambas gobernadas por el PP.
Magdalena Valerio subrayó que el presidente Barreda fue el primero en hablar de crisis sin giros lingüísticos y, en consecuencia, predicó con el ejemplo abordando una reestructuración de su Gobierno que se traduce en un ahorro de aproximadamente 6 millones de euros anuales, que superará los 18 millones de euros al final de la legislatura.
Una iniciativa del presidente José María Barreda que, recalcó la consejera, sitúa a Castilla-La Mancha como la más austera de los Gobiernos y Administraciones de las comunidades autónomas. No obstante, añadió, el Gobierno regional seguirá transitando permanentemente por la senda de la austeridad y el ahorro, al tiempo que preserva la prestación de servicios y políticas sociales.
Valerio invitó al Partido Popular y a su responsable regional a exigir a las comunidades autónomas donde gobierna su partido que apliquen medidas de austeridad similares a las de Castilla-La Mancha, en lugar de pedir con año y medio de retraso lo que ya está hecho en nuestra región.
Estructura adecuada a las competencias y características de la región
La titular de Administraciones Públicas y Justicia recalcó que la estructura actual del Gobierno de Castilla-La Mancha es la adecuada a la realidad competencial de la Junta de Comunidades y a la prestación de servicios con cercanía en una región con características geográficas tan peculiares como la nuestra, con una extensión de 80.000 kilómetros cuadrados, 919 municipios y numerosas pedanías, y una gran dispersión geográfica de sus más de 2 millones de habitantes.
Tras la supresión, en agosto de 2008, de cuatro Consejerías, 15 Direcciones Generales y 15 Delegaciones Provinciales, la estructura del Gobierno regional es una de las más reducidas de España, con un total de 118 altos cargos, que suponen el 0,15 por ciento del total de empleados públicos con que cuenta la Administración Autonómica en la actualidad.
Valerio destacó que esta ratio es muy inferior en Castilla-la Mancha a la media de las comunidades autónomas españolas, que, según datos estadísticos del Gobierno de España correspondientes al año 2009, se situaba en un 0,48 por ciento de altos cargos en relación a los empleados públicos, y que reflejaba porcentajes superiores al de nuestra región incluso en comunidades uniprovinciales, como el caso de La Rioja, con un 1,26 por ciento, o Murcia, con un 0,35 por ciento, ambas gobernadas por el PP.