El Museo provincial celebra sus 170 años de historia con una jornada de puertas abiertas
01/10/2010 - 09:45
El Museo provincial de Guadalajara abrió ayer sus puertas en una jornada muy especial en la que celebró sus 170 años desde su primera apertura, en el convento de la Piedad. Después de casi dos siglos de idas y venidas, de mudanzas y guerras, el viejo museo se ha quedado pequeño ante la ingente cantidad de piezas que esconde en sus fondos, que esperan una restauración muchas de ellas ya han sido tratadas pero no expuestas. Con motivo de la onomástica, durante el día de ayer se realizaron varias visitas guiadas que contaron con una buena participación.
Tal día como ayer hace 170 años, el 19 de noviembre de 1838, abría sus puertas el Museo provincial de Guadalajara, aunque no en la ubicación que ahora ocupa y que pronto abandonará, el palacio del Infantado, sino en el convento de la Piedad, donde compartió espacios con la cárcel de partido primero, con un hospital provisional después, más tarde con el Instituto de Enseñanza Secundaria y por último, con la Diputación provincial. Con motivo de tal onomástica y con un derecho especial, pues se trata del Museo provincial más antiguo de España, ayer abrió sus puertas al público para darse a conocer a través de distintas visitas guiadas que se desarrollaron cada hora, durante toda la mañana, de manera gratuita.
Divididos en grupos, los visitantes pudieron conocer más profundamente los detalles de las obras expuestas en la muestra permanente del museo, Tránsitos, gracias a un guía que acompañó sus pasos y fue ofreciendo las explicaciones artísticas de cada pieza y su autor. Al finalizar la ruta, cada uno de los participantes fue obsequiado con la primera entrega del coleccionable Conoce tu museo y de su correspondiente carpeta archivadora. La colección estará integrada por fichas que explicarán determinados aspectos relativos al museo, como su historia, su edificio o sus distintas colecciones, y todo el que lo desee podrá hacerse con ella de manera gratuita o descargarla a través de Internet.
El director del Museo provincial, Fernando Aguado, se mostraba orgulloso y contento por la aceptación de la iniciativa, aunque más que por la cantidad de visitantes, por lo contentos que asegura que quedaron tras las visitas guiadas que se realizaron durante la jornada. El objetivo, según sus propias palabras, además de conmemorar los 170 años de museo, es reivindicar de alguna manera el papel de una institución museística dentro de una sociedad en la que el patrimonio cultural y la cultura deben tener una gran importancia. A pesar de todo lo que se ha perdido y se ha disperso en estos casi dos siglos, un periodo bastante convulso y próximo al final de la Guerra de la Independencia, la situación actual del museo es totalmente distinta, como asegura Aguado, hasta el punto de que es tal el fondo que posee la institución que sus instalaciones se han quedado desde hace tiempo muy pequeñas para poder exponer todo lo que guarda en sus almacenes.
Cientos de obras en la sombra podrían ver la luz
El Museo provincial no descarta realizar algún tipo de actividad de cara al público, para mostrar de puertas afuera cómo se llevan a cabo las tareas de restauración y conservación de decenas de piezas que nunca se han mostrado en el Museo. Fernando Aguado, director de la institución, explica que es una posibilidad adoptar esa idea, que ya se ha barajado en otras ocasiones. Se trataría de poner en valor o mostrar el resultado de los trabajos de restauración que se han realizado recientemente, como la de los artesonados que se conservan del palacio original o los relieves del Patio de los Leones, o algunos de los lienzos que se están limpiando actualmente gracias a una subvención del Instituto de Patrimonio Cultural, entre otros trabajos que se desconocen pero son igualmente relevantes histórica y artísticamente. Estos trabajos están arrojando detalles muy importantes, como encontrar un cuadro de gran valor entre los fondos, por poner sólo un ejemplo. Todo ello ayudaría a entender mejor el pasado de nuestra provincia, a conocerla más a fondo y a querer saber más del Museo provincial más antiguo de España, nacido tras la promulgación de la Real Orden Circular de 27 de mayo de 1837, en la que se dispuso la creación de un museo en cada provincia, encargando esta labor a las correspondientes Comisiones provinciales de Monumentos. En cada museo se deberían recoger las numerosas obras artísticas rescatadas de los conventos suprimidos a raíz de la Desamortización de Mendizábal. La Comisión provincial de Monumentos de Guadalajara trabajó con gran diligencia y, el 19 de noviembre de 1838, se abría al público el Museo de Guadalajara, el Museo provincial más antiguo de España. Ocupaba cuatro salas espaciosas en la galería superior en las que se exhibieron unos 400 cuadros de todos los tamaños. A este fondo se añadió en 1844 el sepulcro de doña Aldonza de Mendoza y en 1845 los de los Condes de Tendilla que se trasladaron al Museo. El primer catálogo de las colecciones se publicó el año siguiente, indicando el tema y la técnica de las 451 pinturas y 5 esculturas expuestas. Hasta 1850 no ingresó la primera colección de Arqueología, procedente de las excavaciones de Hijes, y en 1860 la segunda, recogida durante las obras del ferrocarril en Espinosa de Henares. Esta etapa duró hasta 1861, año en que por falta de espacio se desmontó la exposición, pasando a ser un mero almacén de cuadros. No fue hasta 1873 cuando el Museo volvió a revivir en el palacio del Duque del Infantado.
Divididos en grupos, los visitantes pudieron conocer más profundamente los detalles de las obras expuestas en la muestra permanente del museo, Tránsitos, gracias a un guía que acompañó sus pasos y fue ofreciendo las explicaciones artísticas de cada pieza y su autor. Al finalizar la ruta, cada uno de los participantes fue obsequiado con la primera entrega del coleccionable Conoce tu museo y de su correspondiente carpeta archivadora. La colección estará integrada por fichas que explicarán determinados aspectos relativos al museo, como su historia, su edificio o sus distintas colecciones, y todo el que lo desee podrá hacerse con ella de manera gratuita o descargarla a través de Internet.
El director del Museo provincial, Fernando Aguado, se mostraba orgulloso y contento por la aceptación de la iniciativa, aunque más que por la cantidad de visitantes, por lo contentos que asegura que quedaron tras las visitas guiadas que se realizaron durante la jornada. El objetivo, según sus propias palabras, además de conmemorar los 170 años de museo, es reivindicar de alguna manera el papel de una institución museística dentro de una sociedad en la que el patrimonio cultural y la cultura deben tener una gran importancia. A pesar de todo lo que se ha perdido y se ha disperso en estos casi dos siglos, un periodo bastante convulso y próximo al final de la Guerra de la Independencia, la situación actual del museo es totalmente distinta, como asegura Aguado, hasta el punto de que es tal el fondo que posee la institución que sus instalaciones se han quedado desde hace tiempo muy pequeñas para poder exponer todo lo que guarda en sus almacenes.
Cientos de obras en la sombra podrían ver la luz
El Museo provincial no descarta realizar algún tipo de actividad de cara al público, para mostrar de puertas afuera cómo se llevan a cabo las tareas de restauración y conservación de decenas de piezas que nunca se han mostrado en el Museo. Fernando Aguado, director de la institución, explica que es una posibilidad adoptar esa idea, que ya se ha barajado en otras ocasiones. Se trataría de poner en valor o mostrar el resultado de los trabajos de restauración que se han realizado recientemente, como la de los artesonados que se conservan del palacio original o los relieves del Patio de los Leones, o algunos de los lienzos que se están limpiando actualmente gracias a una subvención del Instituto de Patrimonio Cultural, entre otros trabajos que se desconocen pero son igualmente relevantes histórica y artísticamente. Estos trabajos están arrojando detalles muy importantes, como encontrar un cuadro de gran valor entre los fondos, por poner sólo un ejemplo. Todo ello ayudaría a entender mejor el pasado de nuestra provincia, a conocerla más a fondo y a querer saber más del Museo provincial más antiguo de España, nacido tras la promulgación de la Real Orden Circular de 27 de mayo de 1837, en la que se dispuso la creación de un museo en cada provincia, encargando esta labor a las correspondientes Comisiones provinciales de Monumentos. En cada museo se deberían recoger las numerosas obras artísticas rescatadas de los conventos suprimidos a raíz de la Desamortización de Mendizábal. La Comisión provincial de Monumentos de Guadalajara trabajó con gran diligencia y, el 19 de noviembre de 1838, se abría al público el Museo de Guadalajara, el Museo provincial más antiguo de España. Ocupaba cuatro salas espaciosas en la galería superior en las que se exhibieron unos 400 cuadros de todos los tamaños. A este fondo se añadió en 1844 el sepulcro de doña Aldonza de Mendoza y en 1845 los de los Condes de Tendilla que se trasladaron al Museo. El primer catálogo de las colecciones se publicó el año siguiente, indicando el tema y la técnica de las 451 pinturas y 5 esculturas expuestas. Hasta 1850 no ingresó la primera colección de Arqueología, procedente de las excavaciones de Hijes, y en 1860 la segunda, recogida durante las obras del ferrocarril en Espinosa de Henares. Esta etapa duró hasta 1861, año en que por falta de espacio se desmontó la exposición, pasando a ser un mero almacén de cuadros. No fue hasta 1873 cuando el Museo volvió a revivir en el palacio del Duque del Infantado.