Entrega del Premio Don Quijote

01/10/2010 - 09:45 Hemeroteca

El presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, destacó ayer que el español no es una lengua extraña, sino compartida por una patria con más de 21 estados y más de 400 millones de “corazones e inteligencias”. Barreda hacía esta aseveración en el marco de la primera edición del Premio Internacional Don Quijote de La Mancha otorgado al presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, y al escritor mejicano, Carlos Fuentes, que ha tenido lugar hoy en el Museo de Santa Cruz, en Toledo.
El presidente castellano-manchego explicó que se premia a dos paisanos por su contribución al idioma español. “Un manchego de México, que lo utiliza con penetrante y poética sabiduría y un brasileño, que ha contribuido de manera decisiva a difundir el español junto a la lengua hermana utilizada en su país, engrandeciendo así la patria común del idioma”.
Barreda, que destacó la presencia de las más altas magistraturas del Estado: Sus Majestades los Reyes de España, don Juan Carlos y doña Sofía, y el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, significó el prestigio que este galardón adquiere con premiados como Lula da Silva y Carlos Fuentes.
En su intervención, el presidente autonómico recordó que ya en el Toledo del siglo XIII se utilizaban muchas lenguas, de ahí que esta ciudad fuera el lugar adecuado para la Escuela de Traductores. En este sentido, manifestó que entre la historia y las ironías de Cervantes, “deberíamos aprender a respetar las distintas lenguas, sin convertirlas en motivo de enfrentamiento”.
Ante más de medio millar de invitados destacó que en Toledo, antigua capital del amplio territorio de La Mancha, “se arman hoy caballeros de las letras hispanas a dos grandes manchegos”.
“Manchegos en el sentido definido por uno de ellos, Carlos Fuentes, Premio Cervantes y, desde hoy, premio Don Quijote de La Mancha, cuando, refiriéndose a Iberoamérica, escribe: ‘somos territorio de La Mancha. Manchados, impuros, mestizos, abiertos por fuerza a la comunicación, las migraciones, la confianza en nuestra aportación al mundo, somos los escuderos de Don Quijote’, apuntó Barreda.
En este contexto el presidente autonómico destacó que Lula, uno de los premiados, habla como lo hacía, aquí mismo en el siglo XVI, la Reina Isabel, “aunque con nuevas melodías americanas”. En este punto significó que el presidente de Brasil ha promovido una ley para que millones de jóvenes brasileños estudien español.
De Carlos Fuentes, “autor de la Región más transparente”, aseguró que podría haberse definido habitante de muchas regiones, de Comala, de Macondo…, “pero, -apuntó- sabe que todas ellas forman parte del gran territorio de La Mancha, que él mismo ha ensanchado y enriquecido”.
Para el presidente de Castilla-La Mancha, “lo fascinante es que seguimos siendo contemporáneos de don Quijote” y aseguró que, “no por casualidad don Miguel situó al personaje en el gran anchurón cósmico de La Mancha, en el que la realidad y la ficción”.
Barreda sostiene que el lenguaje popular quijotesco es sinónimo de utópico; “ser un Quijote es ser un idealista que persigue ensoñaciones, socorre viudas y desamparados y desface entuertos, porque ser un Quijote es declarar la guerra a la miseria y luchar porque en Brasil haya pobreza cero”.