Es inútil intentar controlar en secreto la actividad de los hijos en las redes sociales

09/08/2011 - 09:24 E.P.

  Las redes sociales suponen tanto riesgos como beneficios para los niños y los padres que intentan controlar secretamente las actividades 'on line' de sus hijos están perdiendo el tiempo, según el profesor de Psicología de la California State University Larry D. Rosen.

   "Aunque nadie puede negar que Facebook ha alterado el panorama de la interacción social, sobre todo entre los jóvenes, sólo estamos comenzando a ver investigaciones psicológicas sólidas que demuestran tanto lo positivo como lo negativo", ha señalado Rosen en la 119 Convención Anual de la American Psychological Association

    Durante su intervención en este encuentro, Rosen señaló algunos aspectos de las redes sociales que podían resultar negativos, como que los adolescentes que usan Facebook más a menudo muestran más tendencias narcisistas, mientras que los adultos jóvenes con más presencia en esta red social presentan más signos de padecer otros trastornos psicológicos, como conductas antisociales, manías o agresividad.

   El abuso diario de los medios y la tecnología tiene un efecto negativo sobre la salud de los niños y adolescentes, pues les hace más propensos a padecer ansiedad, depresión y otros desórdenes psicológicos, además de convertirles en personas más susceptibles a sufrir problemas de salud en el futuro.

   Asimismo, Facebook puede distraer a los menores y causar un impacto negativo sobre su aprendizaje. Varios estudios han comprobado que tanto escolares, como estudiantes de instituto y universitarios que miraban Facebook al menos una vez durante un periodo de estudios de 15 minutos obtenían notas más bajas.

LOS BENEFICIOS DE LAS REDES SOCIALES

   No obstante, las redes sociales también proporcionan beneficios a los niños. Por ejemplo, los adultos jóvenes que pasan más tiempo en Facebook son mejores a la hora de mostrar 'empatía virtual' hacia sus amigos 'on line'. Las redes sociales pueden ayudar a los adolescentes más introvertidos a aprender a socializarse. Además, pueden ser herramientas para enseñar de una forma más atractiva a los estudiantes.

   A los padres, Rosen les envía un mensaje claro: "si piensan que tienen que utilizar algún tipo de programa de ordenador para controlar la actividad en las redes sociales de sus hijos, están perdiendo el tiempo".

  "Tus hijos encontrarán una forma de esquivarla en cuestión de segundos", advierte este experto, para quien lo más apropiado es comenzar a hablar temprano sobre cómo utilizar adecuadamente las tecnologías y con qué frecuencia y construir la confianza, de manera que, cuando haya un problema, como que sea víctima de acoso o vea una imagen inquietante,  tu hijo pueda hablar contigo sobre ello".

   Por este motivo, Rosen anima a los padres a evaluar las actividades de sus hijos en las redes sociales y a hablar sobre la posibilidad de eliminar contenidos inapropiados o contacto de personas que pueden parecer problemáticas. Los padres tienen también que poner atención a las tendencias 'on line' y a las últimas tecnologías, webs y aplicaciones que sus hijos están empleando.

   "La comunicación es la clave de la paternidad. Tienes que hablar con tus hijos y escucharles", señala Rosen, para quien la proporción de escucha parental frente al de charla "debe ser al menos de cinco contra uno: hablar un minuto y escuchar cinco".