ETA mata al guardia civil Juan Manuel Piñuel en el atentado contra la casa cuartel de Legutiano

01/10/2010 - 09:45 Hemeroteca

 (Foto: EFE)
Por: EUROPA PRESS
Un centenar de azudenses guardó silencio frente al Ayuntamiento
Esta madrugada ETA ha vuelto a matar. Un Guardia Civil, Juan Manuel Piñuel Villalón, ha fallecido como consecuencia de la explosión de una bomba en el cuartel de Legutiano, en Alava, sin que hubiese llamada de aviso. Otros cuatro guardías civiles han resultado heridos. Un agente está en la UCI y la mujer de un sargento herido permanece ingresada. Alrededor de quince familias han sido desalojadas de sus viviendas en el cuartel. Un centenar de personas se han concentrado en silencio frente al Ayuntamiento de Azuqueca.
Un Guardia Civil ha fallecido esta madrugada y varios han resultado heridos tras el atentado perpetrado contra la casa cuartel de la Guardia Civil en Legutiano, en Álava, sin que hubiese una llamada de aviso, informaron a Europa Press fuentes de la lucha antiterrorista.

Al parecer, sólo uno de los cuatro heridos podría presentar lesiones de gravedad. Se trata de uno de los dos agentes que quedaron atrapados entre los encombros y que, tras ser rescatado, tuvo que ser estabilizado por el equipo médico desplazado al lugar.

Dos de los lesionados se encuentran ingresados en el Hospital de Txagorritxu y otros dos están siendo atendidos en el de Santiago, los dos en Vitoria.

El guardia civil fallecido, Juan Manuel Piñuel Villalón, se encontraba hablando con la central operativa de servicios del instituto armado, alertando de que había una furgoneta estacionada fuera del acuartelamiento de Villareal, en Legutiano, cuando estalló el explosivo y se cortó la comunicación, según informaron a Europa Press fuentes de la Guardia Civil.

Juan Manuel Piñuel se encontraba en el interior del pequeño edificio de vigilancia anexo al cuartel y, al advertir la presencia del vehículo, procedió a comunicar la existencia de una furgoneta sospechosa, así como que un guardia civil había salido a identificarla.

Los heridos

El Departamento de Sanidad del Gobierno vasco informó hoy de que dos de las personas heridas en el atentado contra la Casa Cuartel de Legutiano, una de ellos la mujer del sargento rescatado bajo los escombros, han quedado ingresadas en planta con pronóstico leve, mientras que otro agente se encuentra en la UCI para observación y una cuarta persona fue sido dada de alta. Además, se contabilizó un quinto herido que fue atendido por los propios servicios médicos de la Guardia Civil.

En concreto, en el hospital de Santiago ha sido atendida E.M.C., mujer del sargento FJ.C.J., también herido en el atentado, y presenta policontusiones y erosiones múltiples. La mujer, de 34 años de edad, tiene una herida en la extremidad inferior izquierda. Su pronóstico leve y ha quedado ingresada en planta.

Su marido, de 41 años de edad, presenta síndrome de aplastamiento, neumotórax y hemotórax izquierdo, además de fractura vertebral, policontusiones y erosiones múltiples. Su estado es reservado y ha quedado ingresado en planta.

Por otra parte, en el hospital de Txagorritxu, se ha atendido a la agente P.O.V, de 39 años de edad, con traumatismo leve y diversas erosiones. Su pronóstico era leve y ha sido dado de alta.





Familias desalojadas
Las alrededor de 15 familias desalojadas hoy de la casa cuartel de Legutiano tras el atentado de ETA, que costó la vida a un agente y heridas a otros cuatro, regresarán esta mañana a recoger sus enseres y, posteriormente, serán realojados en el acuartelamiento de Sansomedi, donde se encuentran ahora, según informaron a Europa Press fuentes del instituto armado.

Unas 40 personas, entre ellas, mujeres y niños, se vieron obligados a abandonar sus viviendas, dentro de la casa cuartel después de estallar la furgoneta bomba, cargada con un potente explosivo.

Con la ropa y objetos que tenían en ese momento en su poder, fueron evacuadas a las instalaciones de la Guardia Civil en Sansomendi, donde serán realojadas, ya que los destrozos causados en el edificio les imposibilita volver a sus viviendas.

En ese momento, se produjo la explosión y se cortó la comunicación. El agente falleció al estallar el vehículo-bomba.

Explosivos

La furgoneta-bomba que hoy estalló en el acuartelamiento de la Guardia Civil de Legutiano, en Alava, contenía unos 300 kilos de explosivos, que estallaron pasadas las tres de la madrugada, según informaron a Europa Press fuentes de la investigación.

Las mismas fuentes señalaron que el cuartel, situado junto al pantano de Villareal, ha quedado "destruido" porque "toda la parte central ha caído en pleno". Además, precisaron que la distancia entre la carretera en la que han colocaron el vehículo y la zona en la que está ubicado el acuartelamiento está a unos 70 metros.