Federico Mayor Zaragoza: “Tenemos que dejar de ser súbditos y pasar a ser ciudadanos”

01/10/2010 - 09:45 Hemeroteca

Federico Mayor Zaragoza y Juan José Tamayo durante el coloquio de ayer.
Por: MAR GATO. MADRID
La última cita ofrecida por la Fundación Siglo Futuro referida a ‘La violencia humana’ tuvo como invitados en lan oche de ayer a dos personajes de excepción: Federico Mayor Zaragoza y Juan José Tamayo, quienes ofrecieron ante un multitudinario público sus particulares puntos de vista sobre la Educación para la ciudadanía y la Educación para la paz, conceptos que a día de hoy comienzan a iniciar su andadura con el objetivo de conseguir una sociedad más justa, solidaria e igualitaria.
La quinta y última entrega del ciclo La violencia humana, promovida por la institución cultural Fundación Siglo Futuro, propició en la noche de su clausura un lleno absoluto en el salón de actos de Caja de Guadalajara. La asistencia de sus espectadores no era casual. Ocupando la mesa de conferencias frente a ellos se encontraban dos humanistas incansables de estimable valía. El primero, Federico Mayor Zaragoza, ex director general de la Unesco y hoy presidente de la Fundación Cultura en Paz, institución a la que le dedica todo su tiempo; el segundo, Juan José Tamayo, teólogo y director de la cátedra de Teología y Ciencias de la Religión Ignacio Ellacuría de la Universidad Carlos III de Madrid. Ambos serían los encargados de dar contenido a una interesante mesa redonda bajo el título Educar para la ciudadanía. Educar para la paz. Fue precisamente sobre el primer término sobre el que versó la intervención de Tamayo, quien se refirió a la asignatura de nueva implantación, Educación para la ciudadanía, “como un hito importante para España, una asignatura de imperiosa necesidad que hubiera evitado muchos de los confrontamientos hasta ahora vividos” si atendemos a los valores de democracia, ética cívica y laica y ciudadanía local. Gestores, en definitiva, de una sociedad más humana y más grata, hoy carente de justicia, solidaridad e igualdad, según Tamayo.
Al hilo de los requerimientos de buena voluntad de Tamayo, Federico Mayor Zaragoza se refirió a la educación para la paz, vista como aquella que ofrece la posibilidad de pasar de la fuerza a la palabra. En este sentido, educación para la paz no sería más que “la gran transición que tenemos que hacer, que es dejar de ser súbditos y pasar a ser ciudadanos. Hemos aceptado guardar silencio y resignación, hemos sido espectadores de lo que pasa. Eso se acabó. Estos principios de siglo y milenio y la actual crisis nos brinda la oportunidad de hacer cambios radicales que tenemos que aprovechar”. Para ello, los ciudadanos deberán tomar el poder, alzar su voz y llevar sus reclamaciones a la práctica. Algo ante lo que Mayor Zaragoza se mostraba no demasiado optimista pero sí esperanzado.