Fin de semana de enoturismo y cultura en la tierra del vino
La Rioja tiene nombre de vino. En sus pueblos y parajes se suceden la viñas y, junto a ellas, numerosas bodegas. Las más clásicas y con más historia, como la Compañía Vinícola del Norte de España (CVNE), o las de diseño más modernista, como las de Marqués de Riscal, diseñada por el arquitecto internacional creador del Guggenheim, Frank Gehry, o Ysios, del arquitecto valenciano Santiago Calatrava.
Un fin de semana en La Rioja da para mucho. Si ya lo ha decidido o no descarta escaparse un día de estos, siga estos consejos para aprovechar el tiempo al máximo y conocer La Rioja, sus bodegas y sus vinos.
Si puede llegar a tierras riojana el viernes por la tarde, puede optar por conocer su capital, Logroño, pasear por sus calles Laurel o San Juan y degustar las especialidades culinarias de cada bar junto, eso sí, al Rioja de la casa.
El sábado puede comenzar con una visita al Museo de la Cultura del Vino Dinastía Vivanco, ubicado en la cercana localidad de Briones, en donde podrá conocer más a fondo los métodos de elaboración, la fabricación de barricas, botellas, el transporte, los vinos del mundo, la historia del vino y, sobre todo, la amplia cultura que el vino ha producido en el mundo, desde los egipcios a modernos Picassos.
No puede abandonar La Rioja sin realizar un curso de cata, ya sea en el mismo museo o en otros lugares repartidos por la geografía riojana, como la Cofradía del Vino, el Consejo Regulador, otras bodegas y asociaciones, y que le permitirá aprender a degustar un buen vino.
Para conocer el proceso de elaboración del vino puede visitar una de las más de cincuenta bodegas que abren sus puertas al turismo, como las de CVNE, Ysios o Marqués de Riscal, entre otras.
Ya después de comer puede optar por una forma diferente de conocer la cultura del vino, las actividades entre viñedos, con las que podrá conocer las diferentes variedades de uva o la estricta normativa que rige la Denominación de Origen Rioja a pie, en bici, a caballo e incluso en piragua por el Ebro o en globo.
Para el domingo le sugerimos una visita cultural única: Los monasterios de Suso y Yuso en San Millán de la Cogolla, Patrimonio de la Humanidad.
En el primero, el más antiguo, situado entre montes, los eremitas del Medievo escribieron en sus scriptorium las primeras palabras en castellano. Por su parte, el de Yuso, más grande y rico, acoge en su interior el aula de la lengua castellana y una gran biblioteca única.
De camino hacia San Millán pasará usted por Berceo, la localidad cuna de Gonzalo de Berceo, el primer poeta de la lengua castellana.
Ya desde ahí no puede irse sin visitar Santo Domingo de la Calzada y su Catedral en la que podrá ver la tumba del santo.