Guadalajara se despide de sus Ferias y Fiestas 2025


La peña El Buey salió al balcón del Ayuntamiento junto a la alcaldesa, Ana Guarinos, para despedir las Ferias y Fiestas de este año frente a una plaza abarrotada de peñistas. Como siempre, fue un momento espectacular, bañado en cierta tristeza, pero también en mucha satisfacción por la enorme alegría vivida durante estos días. 

La ciudad bajó el telón de su semana grande con un despliegue de tradición y algarabía que congregó a vecinos y visitantes en un ritual ya inmutable. En una velada que cerró el ciclo festivo, las calles fueron el alma de un masivo adiós que se canta a ritmo de charanga y se enciende con pólvora. Según estimaciones municipales, se congregaron el doble de personas que el año pasado, inundando de peñas y vecinos el coso de Las Cruces desde donde partió la comitiva de final de fiesta con el tradicional desfile de peñas.

Con sus coloridos atuendos y sus cánticos, marcaron el pulso de la tarde. El recorrido comenzó en la Puerta Grande “Iván Fandiño” y avanzó por el paseo de Las Cruces, la plaza de Santo Domingo y la calle Mayor, hasta culminar en la Plaza Mayor. Fue una marea de alegría que inundó el corazón de la ciudad, un río de música y entusiasmo que demostró una vez más el espíritu indomable de los guadalajareños. En el balcón del Ayuntamiento se materializó la despedida oficial.

La regidora, Ana Guarinos,  expresó su orgullo y agradecimiento por el desarrollo de los festejos. “Hemos vivido unas fiestas seguras en las que la convivencia y la diversión también han sido protagonistas”, afirmó Guarinos, destacando el comportamiento ejemplar de los ciudadanos. La alcaldesa elogió a la ciudad por su “capacidad para vivir intensamente la fiesta” y quiso agradecer a todos los que la hicieron posible. Entre las celebraciones, Guarinos se detuvo en los encierros, que según sus palabras, han “marcado un antes y un después”. La alcaldesa se mostró especialmente satisfecha con la recuperación de esta “tradición de siete siglos”, adaptada a los nuevos tiempos y vivida con una “participación masiva de públicos y proveedores”. En un gesto de cercanía y empatía, Guarinos tuvo un recuerdo para Adrián, la persona que resultó herida durante un encierro. “Le deseamos un fuerte abrazo a él y a su familia, todo nuestro cariño, apoyo y pronta recuperación”, declaró. 

También dedicó un sentido agradecimiento a las peñas, a quienes calificó como “el alma y el corazón de la fiesta”, por su implicación y por llenar “cada rincón de Guadalajara” con el ambiente festivo de sus desfiles y verbenas. Finalmente, extendió su gratitud a los cuerpos y fuerzas de seguridad, como la Policía Local, la Policía Nacional, Protección Civil, los bomberos, la Cruz Roja y los servicios sanitarios. Antes de ceder la palabra, animó a la multitud a gritar con ella “¡Viva la Virgen de la Antigua!, ¡Vivan las ferias y fiestas de Guadalajara!, ¡Vivan las peñas!, y ¡Viva Guadalajara!”.

Fue la Peña El Buey la encargada de dar el último adiós a las fiestas. Con humor y emoción, un representante se dirigió a una Plaza Mayor abarrotada, donde peñistas y vecinos se agolpaban para presenciar el momento más solemne y emotivo de la clausura. Celebró el buen desarrollo de la semana festiva, sin “incidentes importantes”, lo que demuestra que las peñas son un colectivo “imprescindible y necesario” en la ciudad, tanto en las ferias como en otras celebraciones a lo largo del año. 

 A este ritual le siguió la gran traca final, una explosión que resonó en el casco antiguo y que sirvió como un telón de fondo sonoro para los últimos minutos de la fiesta. El estruendo, que recorrió la calle Mayor, se convirtió en un preludio de la siguiente gran cita pirotécnica, la de los toros de fuego. La tradición de los toros de fuego de fantasía se vivió con una intensidad palpable. Este año, con un nuevo recorrido, los toros de fuego corrieron desde la Plaza de España hasta la Plaza Mayor, atravesando la calle Miguel Fluiters, reviviendo una tradición que ha demostrado su arraigo popular.

Finalmente, el cielo de Guadalajara se encendió con un impresionante espectáculo piromusical que, al compás de la música, llenó de luz y color la noche de la despedida. Los fuegos artificiales, con su gran traca final, certificaron el fin de las celebraciones en honor a la Virgen de la Antigua.

En un balance final, el edil de seguridad, Chema Antón, valoró positivamente el desarrollo de las festividades. Antón destacó que “ha sido una feria totalmente limpia, además no ha habido ningún incidente de ningún tipo”, y puso en valor el comportamiento cívico y ejemplar de los asistentes, subrayando que no se registraron casos de agresiones sexuales, un dato que recalca el buen funcionamiento de los puntos de seguridad habilitados en los diferentes espacios de conciertos a lo largo de La Concordia, San Roque, Fuente de la Niña y Plaza de España. Para Antón, las celebraciones han sido “un éxito” y las calificó como “las mejores ferias y fiestas que hemos tenido”.