Investigadores mallorquines descubren que el uso de anti-inflamatorios puede incrementar las neumonías

08/11/2010 - 13:00 E.P.

Un grupo de investigadores mallorquines ha descubierto que el uso de anti-inflamatorios puede incrementar las neumonías por 'klebsiella', una bacteria causante de neumonías que constituye un problema sanitario mundial por su resistencia a muchos antibióticos, según la Organización Mundial de la Salud.

Según ha informado en un comunicado el Centro de Investigación Biomédica en Red de Enfermedades Respiratorias (CIBERES), las infecciones por esta bacteria son especialmente graves en neonatos y en pacientes hospitalizados, con tasas de mortalidad superiores al 70 por ciento. Sin embargo, hasta ahora, eran prácticamente desconocidas las estrategias empleadas por esta bacteria para infectar a las personas.

Un equipo del CIBERES perteneciente al Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y a la Fundación Caubet-CIMERA (Mallorca), ha descubierto que este patógeno impide que las células infectadas activen una respuesta inflamatoria defensiva, lo que permite la supervivencia de la bacteria en el pulmón. Curiosamente, la estrategia empleada por 'klebsiella' es similar al mecanismo de acción de uno de los fármacos anti-inflamatorios más comúnmente empleados, los corticoides.

"Este estudio tiene importantes repercusiones terapéuticas. El hecho de que los corticoides compartan el mecanismo de acción de la bacteria puede llevar a replantear su uso en el tratamiento de los pacientes infectados por 'klebsiella', ya que su empleo facilitaría la infección por este patógeno", ha afirmado el coordinador del estudio e investigador del Ciberes, José Antonio Bengoechea.

Ciberes ha indicado que el equipo de investigación trabaja en terapias encaminadas a evitar la acción de 'klebsiella' sobre la célula con resultados "ya prometedores". La terapia que se plantea tiene como ventaja que es útil frente a todas las cepas de esta bacteria, independientemente de su grado de resistencia frente a los antibióticos, y además, es difícil que la bacteria sea capaz de hallar mecanismos para evitarla.