Karzai abandona la reunión tras un ataque talibán

01/10/2010 - 09:45 Hemeroteca

Por: EUROPA PRESS
El presidente de Afganistán, Hamid Karzai, se vio obligado ayer a abandonar la asamblea nacional de paz (‘jirga’) a causa de un ataque de los talibán en las inmediaciones del lugar de la reunión. El objetivo de la reunión, celebrada en Kabul, era presentar ante alrededor de 1.300 delegados un ambicioso plan de paz que persuada a los insurgentes para que abandonen las armas.

Fuentes oficiales indicaron que tres cohetes cayeron cerca de la enorme tienda en la que se celebraba la ‘jirga’ y las fuerzas de seguridad se enfrentaron posteriormente con un número indeterminado de insurgentes, uno de los cuales hizo detonar las bombas a las que estaba adherido. Una hora después del primer ataque se siguieron escuchando disparos. El ataque se produjo en pleno discurso de Karzai. “Siéntense, no ha pasado nada”, dijo Karzai, quien ha sobrevivido a dos atentados, ante los nerviosos delegados que pretendían irse en esos momentos. “Estoy acostumbrado a esto, todo el mundo está acostumbrado a esto”, agregó. Tras finalizar el discurso, Karzai abandonó la ‘jirga’ en un convoy blindado.

En la ‘jirga’ (asamblea en pashtún) estaban convocados alrededor de 1.300 ancianos y delegados. La ausencia más notable era la de los propios insurgentes, aunque no faltaron algunos simpatizantes entre los asistentes.
Los talibán y el grupo Hezb-i-Islami, dirigido por Gulbuddin Hekmatyar, habían expresado su rechazo a la reunión. “El ataque ha sido comentido por nuestros combatientes”, declaró a Reuters un portavoz de los talibán, Zabihulá Muyahid, desde un lugar no precisado.
Por otra parte, las fuerzas de seguridad paquistaníes han matado este miércoles, con el apoyo de varios helicópteros de combate, al menos a 20 milicianos en la región de Orakzai, en las Zonas Tribales de Administración Federal, después de que los insurgentes atacasen un puesto de control y de que un día antes el Ejército proclamase su victoria en la región. Los enfrentamientos surgieron en la localidad de Shahhu, a unos 90 kilómetros al este de la principal ciudad de Orakzai, Kalaya. “Dispararon granadas propulsadas por cohetes contra el puesto de control y mataron a un soldado. Entonces nosotros respondimos rápidamente y matamos a diez milicianos”, relató a la agencia Reuters Sajjad Khan, miembro de las autoridades regionales. Luego, dijo, los helicópteros de combate atacaron las posiciones de los milicianos y mataron a diez combatientes talibán y destruyeron seis de sus refugios.