La cantidad de magma y la localización marcaron la erupción del Eyjafjalla

18/11/2010 - 11:51 Redacción

Un estudio de la Universidad de Islandia en Reykjavik proporciona un análisis detallado de la erupción del Eyjafjalla en Islandia en marzo de 2010. Los autores señalan que tanto la localización geográfica del volcán, alejado de la zona de volcanes más activos, como la cantidad de magma en su interior marcaron su actividad.


El trabajo, que se publica en la revista 'Nature', explica cómo el flujo de magma del interior del volcán condujo a su erupción después de casi dos siglos de quietud.


Los volcanes de Islandia forman la expresión superficial del sistema montañoso del Atlántico Medio, la dorsal mesoatlántica, pero el Eyjafjallajökull se encuentra alejado de la zona montañosa principal, por lo que le alcanza menos calor magmático que a otros volcanes más cercanos a la cordillera.


Durante una erupción típica en un volcán muy activo, la cámara de magma dentro del volcán disminuye a medida que se libera presión, lo que produce la deformación en la superficie. Hasta ahora, los científicos no sabían con exactitud si los procesos de erupción y deformación en los volcanes activos moderadamente 'más fríos' como el Eyjafjalla son diferentes de sus vecinos más calientes y activos.


Los científicos, dirigidos por Freysteinn Sigmundsson, utilizaron datos de GPS, interferometría de radar de satélites y monitorización sísmica para seguir la deformación del Eyjafjalla durante las dos décadas pasadas de actividad volcánica intermitente. Descubrieron que la deformación del volcán era inusual y que no se relacionaba con los cambios en la presión dentro de una cámara de magma.


Los autores sugieren que una carencia en la deflación durante la erupción podría deberse a un suministro de magma superficial limitado y a la situación del volcán alejada de la cordillera con la estructura de la superficie subterránea helada.