La esperada victoria de Clinton en Virginia no preocupa a Obama
01/10/2010 - 09:45
Por: EUROPA PRESS
En plena recta final de las primarias del Partido Demócrata estadounidense, ayer llegó la cita de Virginia Occidental. En este Estado, la senadora Hillary Clinton partía con ventaja en los sondeos, pero el escaso número de delegados en juego y su desventaja acumulada permitieron a su rival y compañero, Barack Obama, observar la jornada sin inquietudes.
De hecho, a Obama ya comienza a notársele su condición de candidato definitivo sin serlo, consciente de la fuerza del ganador de las primarias republicanas, John McCain. No en vano, una encuesta pone a salvo a éste de la drástica caída de popularidad del presidente, George W. Bush, lo que permite mantener intactas sus aspiraciones de acceder a la Casa Blanca.
Obama viajó de pasada por Virginia Occidental, sabedor de que los 28 delegados a repartir en este Estado no van a variar apenas su ventaja de unos 160 nombres respecto a Clinton, a falta de 217 por repartir en las seis últimas citas, que además de la de hoy llevarán el tren político demócrata a Kentucky, Oregon, Puerto Rico, Montana y Dakota del Sur. Además, el senador afroamericano cuenta con ventaja 'a priori' en tres de esos lugares, por lo que el favoritismo de la ex primera dama en Virginia Occidental quedaba en anécdota. "Entiendo que muchos más aquí apoyarán a la senadora Clinton", llegó a reconocer Obama en un mitin en Charleston, en el que dirigió sus miras a las próximas primarias y al congreso nacional de noviembre. Por su parte, la senadora por Nueva York no dio tregua y sigue sin mostrar señales de rendición, pese a las numerosas voces que comienzan a pedírselo, especialmente después de que su inicial ventaja en superdelegados ya no sea tal y nombres importantes de la formación se hayan posicionado a favor de Obama. Por eso, la ex primera dama se ofreció como la presidenta capaz de "remangarse y salir a trabajar" por los ciudadanos, en un mitin desde la localidad de Clear Folk.
El tercero en discordia
Aunque aparentemente las primarias norteamericanas parezcan cosa de dos, los estadounidenses no olvidan que tres son los nombres presidenciables. McCain ya hizo sus deberes y obtuvo su nominación matemática tiempo atrás, el suficiente como para ofrecer una imagen de solidez y unidad en su formación del que, a día de hoy, aparentemente carece el Partido Demócrata. Obama admite que los republicanos no están ni mucho menos derrotados de cara a la Casa Blanca y, por ello, volvió ayer a criticar directamente a su candidato, a quien reprochó no apoyar una ley de ampliación de beneficios educacionales para los veteranos del Ejército.
No obstante, estas críticas de momento no hacen mella en los ciudadanos, que valoran peor a Bush que a McCain. Una encuesta del diario The Washington Post y la cadena ABC reveló ayer que McCain se mantiene firme pese al descenso del presidente en popularidad, cuya valoración disminuyó a un 31% a causa de la impopular guerra de Irak y los problemas de Irak. Respecto a posibles enfrentamientos en las elecciones a la Casa Blanca, los entrevistados ven más posibilidades a Obama frente a McCain, ya que Clinton contaría aparentemente con las mismas opciones de salir victoriosa. Quizás a McCain le estén beneficiando sus parciales desmarques de la política de Bush, que no pasa por sus mejores momentos. El último de estos episodios se vivió el lunes, según informaciones de The Washington Post recogidas por otr/press. El senador por Arizona se distanció de la postura oficial para defender, en un discurso en una compañía eólica, la limitación de las emisiones a la atmósfera como método para combatir el cambio climático. En este sentido, incluso pidió sanciones para China e India si obvian las recomendaciones internacionales a este respecto, si bien es precisamente Estados Unidos uno de los países más reticentes a cualquier iniciativa en materia ecológica.
Obama viajó de pasada por Virginia Occidental, sabedor de que los 28 delegados a repartir en este Estado no van a variar apenas su ventaja de unos 160 nombres respecto a Clinton, a falta de 217 por repartir en las seis últimas citas, que además de la de hoy llevarán el tren político demócrata a Kentucky, Oregon, Puerto Rico, Montana y Dakota del Sur. Además, el senador afroamericano cuenta con ventaja 'a priori' en tres de esos lugares, por lo que el favoritismo de la ex primera dama en Virginia Occidental quedaba en anécdota. "Entiendo que muchos más aquí apoyarán a la senadora Clinton", llegó a reconocer Obama en un mitin en Charleston, en el que dirigió sus miras a las próximas primarias y al congreso nacional de noviembre. Por su parte, la senadora por Nueva York no dio tregua y sigue sin mostrar señales de rendición, pese a las numerosas voces que comienzan a pedírselo, especialmente después de que su inicial ventaja en superdelegados ya no sea tal y nombres importantes de la formación se hayan posicionado a favor de Obama. Por eso, la ex primera dama se ofreció como la presidenta capaz de "remangarse y salir a trabajar" por los ciudadanos, en un mitin desde la localidad de Clear Folk.
El tercero en discordia
Aunque aparentemente las primarias norteamericanas parezcan cosa de dos, los estadounidenses no olvidan que tres son los nombres presidenciables. McCain ya hizo sus deberes y obtuvo su nominación matemática tiempo atrás, el suficiente como para ofrecer una imagen de solidez y unidad en su formación del que, a día de hoy, aparentemente carece el Partido Demócrata. Obama admite que los republicanos no están ni mucho menos derrotados de cara a la Casa Blanca y, por ello, volvió ayer a criticar directamente a su candidato, a quien reprochó no apoyar una ley de ampliación de beneficios educacionales para los veteranos del Ejército.
No obstante, estas críticas de momento no hacen mella en los ciudadanos, que valoran peor a Bush que a McCain. Una encuesta del diario The Washington Post y la cadena ABC reveló ayer que McCain se mantiene firme pese al descenso del presidente en popularidad, cuya valoración disminuyó a un 31% a causa de la impopular guerra de Irak y los problemas de Irak. Respecto a posibles enfrentamientos en las elecciones a la Casa Blanca, los entrevistados ven más posibilidades a Obama frente a McCain, ya que Clinton contaría aparentemente con las mismas opciones de salir victoriosa. Quizás a McCain le estén beneficiando sus parciales desmarques de la política de Bush, que no pasa por sus mejores momentos. El último de estos episodios se vivió el lunes, según informaciones de The Washington Post recogidas por otr/press. El senador por Arizona se distanció de la postura oficial para defender, en un discurso en una compañía eólica, la limitación de las emisiones a la atmósfera como método para combatir el cambio climático. En este sentido, incluso pidió sanciones para China e India si obvian las recomendaciones internacionales a este respecto, si bien es precisamente Estados Unidos uno de los países más reticentes a cualquier iniciativa en materia ecológica.