La llama olímpica pasó por Camberra con protestas

01/10/2010 - 09:45 Hemeroteca

La antorcha de los Juegos Olímpicos de Pekín pasó ayer jueves por Camberra sin incidentes graves pero con manifestaciones y tensión entre la Policía australiana y los agentes chinos que la custodian. Tania Major, una joven en representación de los aborígenes australianos, fue la primera de los relevistas que recorrieron los 16 kilómetros del itinerario de la llama olímpica por Camberra, donde se desplegaron más de 500 policías.
"Globalmente, todo fue tranquilo. Estamos muy contentos por cómo se desarrolló todo", dijo un portavoz de la policía. El ministro responsable del territorio de Camberra, Jon Stanhope, incluso calificó la etapa australiana como "la mejor" desde el inicio del periplo tras el encendido de la llama, el 24 de marzo, en la ciudad griega de Olimpia.
A lo largo del recorrido se produjeron manifestaciones esporádicas, pero que no perturbaron el recorrido de la antorcha. Sin embargo, hubo algunos momentos de tensión entre la Policía federal australiana y los escoltas chinos que protegen la llama en sus relevos por el mundo y que han sido criticados por su rudeza.
El jefe de la policía de Camberra, Mike Phelan, habló de "un pequeño malentendido de comunicación" al comienzo del relevo. El miércoles, las autoridades de Camberra prometieron que los agentes chinos -siempre vestidos de blanco y azul- sólo tendrían un papel "técnico". Pese a la ausencia de incidentes graves, hubo siete detenciones: cinco manifestantes pro chinos y dos pro tibetanos.

Fuerzas del orden
Las fuerzas del orden mantuvieron separados a los miles de manifestantes pro chinos presentes en el recorrido y los partidarios pro tibetanos, menos numerosos. "China siempre unida", "Alto a las mentiras", gritaron los pro chinos, mientras que los manifestantes a favor de Tíbet corearon "China, vergüenza", "Derechos Humanos para Tíbet". Un avión sobrevoló el recorrido de la antorcha mientras dejaba en el cielo la frase "Tíbet Libre". Poco después se vio otro aparato con una pancarta que decía "Adelante los Juegos Olímpicos de Pekín".
El portavoz del comité olímpico australiano, Mike Tancred, comparó el ambiente al de un partido de fútbol. "No fue mal. Sabíamos que había tensiones pero, todo estuvo tranquilo en la mayor parte del recorrido", dijo.