La mediación de la Liga Árabe pone fin al conflicto en Líbano
01/10/2010 - 09:45
Los mediadores de la Liga Árabe consiguieron ayer que la paz volviera a reinar en las calles de Líbano, al menos de momento, y salvaron al país mediterráneo de una nueva guerra civil que, en estas últimas semanas, parecía inminente e inevitable.
Por un lado, el gabinete del primer ministro libanés, Fuad Siniora, canceló las medidas que enfurecieron al principal grupo opositor Hezbolá: la prohibición de la red de comunicaciones de los radicales chiíes y el cese del director del aeropuerto de Beirut, afín al grupo. Por otro, la oposición armada finalizó con el bloqueo impuesto en los puertos y aeropuertos de la capital libanesa, y asumió el compromiso de no recurrir a las armas para arreglar diferencias políticas.
Tras dos días de conversaciones, los negociadores de la organización de estados árabes pusieron fin al conflicto interno libanés que en las últimas semanas había llegado a agravarse hasta tal punto, que los expertos internacionales comenzaron a vaticinar una nueva guerra civil en este país en el que conviven con ciertas dificultades, numerosas y dispares creencias y religiones. El jefe de la delegación de la Liga Árabe y primer ministro de Qatar, el jeque Hamad bin Jassim bin Jabr al Thani, celebró una rueda de prensa en Beirut donde invitó a su país tanto al Gobierno libanés como a la oposición, donde podrán mantener conversaciones con el fin de resolver el conflicto político que derivó en enfrentamientos políticos. El pacto alcanzado incluye la suspensión del bloqueo impuesto por los radicales chiíes de Hezbolá, principal partido de la oposición, en los puertos y aeropuertos de Beirut, el fin de la presencia armada en las calles de la capital y el compromiso de no recurrir a las armas para solventar las diferencias políticas.
Tras dos días de conversaciones, los negociadores de la organización de estados árabes pusieron fin al conflicto interno libanés que en las últimas semanas había llegado a agravarse hasta tal punto, que los expertos internacionales comenzaron a vaticinar una nueva guerra civil en este país en el que conviven con ciertas dificultades, numerosas y dispares creencias y religiones. El jefe de la delegación de la Liga Árabe y primer ministro de Qatar, el jeque Hamad bin Jassim bin Jabr al Thani, celebró una rueda de prensa en Beirut donde invitó a su país tanto al Gobierno libanés como a la oposición, donde podrán mantener conversaciones con el fin de resolver el conflicto político que derivó en enfrentamientos políticos. El pacto alcanzado incluye la suspensión del bloqueo impuesto por los radicales chiíes de Hezbolá, principal partido de la oposición, en los puertos y aeropuertos de Beirut, el fin de la presencia armada en las calles de la capital y el compromiso de no recurrir a las armas para solventar las diferencias políticas.