La mezcla entre europeos y americanos se dio 500 años antes de Colón

16/11/2010 - 12:57 Redacción

El contacto genético entre Europa y América se produjo cinco siglos antes de que Cristóbal Colón descubriera el continente al otro lado del Atlántico, según demuestra un estudio con participación del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), que ha hallado un linaje genético de origen amerindio en el análisis de cuatro familias en Islandia, integradas actualmente por cerca de 80 personas.


El resultado de esta investigación, publicada en la revista 'American Journal of Physical AnthropologySegún', determina que el linaje encontrado, denominado C1e, es mitocondrial, lo que significa que estos genes fueron introducidos por una mujer, según ha explicado el CSIC.


"Como la isla quedó prácticamente aislada desde el siglo X, la hipótesis más factible es que estos genes correspondiesen a una mujer amerindia que fue llevada desde América por los vikingos cerca del año 1000", ha señalado el investigador del CSIC Carles Lalueza-Fox, que ha apuntado que si este hecho ha permanecido oculto este tiempo es "porque la mujer era un personaje anónimo".


Según explica el CSIC, hasta ahora se conocía que los genes de los actuales habitantes de la isla europea procedían de los países escandinavos, de Escocia e Irlanda, pero se desconocía que el origen fuese más lejano.


Por ello, según ha señalado Lalueza-Fox, "en un principio se pensó que procedían de familias asiáticas establecidas recientemente en Islandia, pero cuando se estudiaron las genealogías familiares, se descubrió que las cuatro familias provenían de cuatro antepasados situados entre 1710 y 1740 y que procedían de la misma región del sur de Islandia, cercana al enorme glaciar Vatnajökull".


Para determinar que esta parte de los genes del continente americano habrían pasado a Europa, los investigadores han empleado la base de datos familiares de deCODE, que recoge las genealogías de todos los islandeses y del 80 por ciento de los islandeses que han existido. En este sentido, ha explicado que se trata de una información de gran utilidad para el estudio de enfermedades genéticas complejas. El CSIC ha explicado que el estudio continúa con la intención de hallar algún resto precolombino con la misma secuencia genética. Al respecto, Lalueza-Foz ha señalado que "hasta ahora se ha retrocedido hasta principios del siglo XVIII, pero sería interesante poder encontrar un resto más antiguo en Islandia con esta misma secuencia".