La ofensiva del Tet cambió la Guerra de Vietnam
01/10/2010 - 09:45
Hace 40 años fue decisiva para los acuerdos de paz posteriores
Hace 40 años, las fuerzas comunistas vietnamitas lanzaban, en pleno Año Nuevo lunar del Tet, una vasta operación contra Estados Unidos que sería decisiva para el desarrollo de la Guerra de Vietnam y conduciría a la negociación de los acuerdos de paz.
La ofensiva del Tet, que se ejecutó durante la noche del 30 al 31 de enero, se saldó con un fracaso militar y terribles pérdidas humanas para los comunistas, pero se consideda como una victoria psicológica contra Estados Unidos gracias a su impacto en la opinión pública.
"Desde el punto de vista militar, mostramos a Estados Unidos la determinación, el valor, la rebelión de la población", comenta Nguyen Thi Binh, que cinco años más tarde firmaría por los comunistas del sur los acuerdos de París que abrieron paso a la paz.
"Pero sobre todo desde el punto de vista político, el mundo pudo ver que los estadounidenses no podían continuar su política, que no tendrían éxito", agrega, en una entrevista la mujer que después se impuso como una de las pocas dirigentes femeninas del país comunista, cuya vicepresidencia ocupó durante diez años.
En plena tregua de Año Nuevo, con el apoyo de una gran parte de la población y respaldados por los soldados norvietnamitas, los vietcongs -las fuerzas comunistas basadas en el sur- atacaron donde menos lo esperaban los estadounidenses. Desplazaron así el terreno de hostilidades de la jungla y de los arrozales para atacar a un centenar de ciudades del centro y del sur del país.
En Saigón, hoy Ciudad Ho Chi Minh, las fuerzas comunistas atacaron incluso la embajada norteamericana, el feudo del general William Westmoreland -comandante de las fuerzas estadounidenses en Vietnam-, el palacio presidencial de Vietnam del Sur, el aeropuerto, la radio y numerosos puestos de policía.
Una vez pasado el efecto sorpresa, los norteamericanos lanzaron un violento contraataque con blindados, bombas y productos químicos. Menos numerosos y peor equipados, los vietcongs tuvieron que abandonar sus posiciones después de haber perdido a decenas de miles de hombres.
Sin embargo, el impacto fue desastroso en Estados Unidos, donde decenas de millones de norteamericanos habían podido seguir en directo el asalto de los comunistas gracias a la televisión. "La ofensiva del Tet constituyó un giro en la guerra", considera el general Nguyen Dinh Uoc, ex director del Instituto de Historia Militar de Vietnam. "Tras la ofensiva, los soldados norteamericanos lucharon para retirarse con honor, ya no luchaban por la victoria", agrega.
"Desde el punto de vista militar, mostramos a Estados Unidos la determinación, el valor, la rebelión de la población", comenta Nguyen Thi Binh, que cinco años más tarde firmaría por los comunistas del sur los acuerdos de París que abrieron paso a la paz.
"Pero sobre todo desde el punto de vista político, el mundo pudo ver que los estadounidenses no podían continuar su política, que no tendrían éxito", agrega, en una entrevista la mujer que después se impuso como una de las pocas dirigentes femeninas del país comunista, cuya vicepresidencia ocupó durante diez años.
En plena tregua de Año Nuevo, con el apoyo de una gran parte de la población y respaldados por los soldados norvietnamitas, los vietcongs -las fuerzas comunistas basadas en el sur- atacaron donde menos lo esperaban los estadounidenses. Desplazaron así el terreno de hostilidades de la jungla y de los arrozales para atacar a un centenar de ciudades del centro y del sur del país.
En Saigón, hoy Ciudad Ho Chi Minh, las fuerzas comunistas atacaron incluso la embajada norteamericana, el feudo del general William Westmoreland -comandante de las fuerzas estadounidenses en Vietnam-, el palacio presidencial de Vietnam del Sur, el aeropuerto, la radio y numerosos puestos de policía.
Una vez pasado el efecto sorpresa, los norteamericanos lanzaron un violento contraataque con blindados, bombas y productos químicos. Menos numerosos y peor equipados, los vietcongs tuvieron que abandonar sus posiciones después de haber perdido a decenas de miles de hombres.
Sin embargo, el impacto fue desastroso en Estados Unidos, donde decenas de millones de norteamericanos habían podido seguir en directo el asalto de los comunistas gracias a la televisión. "La ofensiva del Tet constituyó un giro en la guerra", considera el general Nguyen Dinh Uoc, ex director del Instituto de Historia Militar de Vietnam. "Tras la ofensiva, los soldados norteamericanos lucharon para retirarse con honor, ya no luchaban por la victoria", agrega.