La poesía de Guadalajara protagonizó el último de los eventos de Arriversos

01/10/2010 - 09:45 Hemeroteca

Por: Redacción
La sexta edición del Festival de Poesía de Guadalajara, Arriversos, concluía ayer con el encuentro poético protagonizado por seis poetas de Guadalajara. Carmen Niño, Jesús Aparicio, Lola Sanz Murillo, María de la Casa, Antonio Íñigo y José Antonio Suárez de Puga, además del guitarrista Julián Murcia, fueron las voces que cantaron a Guadalajara.
Carmen Niño ha sido la organizadora de “Guadalajara en verso”, en colaboración con la Asociación Grupo el Observatorio, que es quien programa el festival de poesía de Guadalajara, Arriversos, desde hace ya seis años.

Todos los poetas estuvieron muy bien, sobre todo destacó Carmen Niño que con su tremenda declamación consiguió extasiar al público, que la escuchaba con atención. El recitar acompañada de la guitarra, tocada por Julián Murcia, es algo que caracteriza a la polifacética Carmen, que siempre que actúa tiene éxito.

José Antonio Suárez de Puga leyó algunos poemas que estarán incluidos en el próximo libro que publique, que está ultimando en estos momentos, y verá la luz en breve. Una vuelta de tuerca al uso que tienen algunas cosas, pero prescindiendo de su uso. Además, canta como nadie Guadalajara, sus gentes y paisajes, siendo una buena carta de presentación a cualquiera que quiera conocer estas tierras.

También, participaban algunos de los alumnos y el director del Taller de Poesía de la Biblioteca Pública de Guadalajara. Jesús Aparicio leyó algunos de sus versos y demostró que tiene buenos alumnos que hacen caso de sus enseñanzas. Lola Sanz, María de la Casa y Antonio Íñigo leyeron algunas de sus creaciones, que están a un buen nivel poético.


Balance positivo

La Asociación Grupo el Observatorio hace un balance positivo de Arriversos 2009, festival de poesía de Guadalajara. Ha sido un éxito porque se ha colaborado con otros colectivos, como Cine Club Alcarreño, o poetas de Guadalajara, como Carmen Niño, José Antonio Suárez de Puga o los integrantes del Taller de Poesía de la Biblioteca de Guadalajara.

Y también ha sido un éxito porque casi todos los actos han contado con mucho seguimiento por parte del público, la carpa, ubicada en el Parque de la Concordia con motivo de la Feria del Libro, ha estado llena con todas las actuaciones. “La historia del camello que llora”, documental proyectado por Cine Club Alcarreño, tuvo buena acogida y se integró perfectamente en la filosofía del festival.

Las dos actuaciones de Marío San Miguel y Kostas Kamaki tuvieron mucho seguimiento. De hecho, San Miguel tuvo que alargar su espectáculo porque los asistentes no querían irse.

Además, la participación de Delirios Ácidos, animadores de calle, ha sido fundamental, porque los corazones que laten poesía están en manos de muchos guadalajareños gracias a ellos.

Todo ha sido posible gracias al patrocinio del Patronato de Cultura de Guadalajara que, por sexto año consecutivo, hace posible que Guadalajara cuente con un festival de poesía.