La política energética y el pacto europeo sobre inmigración, prioridades de la presidencia francesa de la UE
01/10/2010 - 09:45
Por: EUROPA PRESS
El ministro francés de Asuntos Exteriores, Bernard Kouchner, esbozó hoy los preparativos de la presidencia gala de la Unión Europea que se inicia el próximo 1 de julio con la política energética y el pacto europeo sobre inmigración como principales objetivos del semestre.
Kouchner adelantó que será una presidencia "moderna, participativa y ecológica" en la que París se propone "reconciliar" a sus conciudadanos con Europa tras el 'no' de los franceses a la Constitución europea en 2005, un rechazo que sumió a la UE en una profunda crisis.
Durante una rueda de prensa ofrecida en el Quai d'Orsay junto al secretario de Estado de Asuntos Europeos, Jean-Pierre Jouyet, el jefe de la diplomacia gala aseguró que el pacto europeo por la inmigración ha tenido una acogida "formidable" y que él mismo, que no era "muy partidario de restricciones", se convenció por la actitud de sus vecinos.
Recordó, en este contexto, que España, que llevó a cabo una regularización masiva en 2005, tiene ahora "una actitud muy próxima a la francesa" o que Italia, tanto con Romano Prodi como con Silvio Berlusconi al frente del Gobierno están siendo "bastante estrictos".
Por este motivo, Francia cree que se necesita una "carta común o un pacto sobre inmigración" al menos para los países que forman parte el espacio Schengen, es decir todos los de la UE salvo Reino Unido e Irlanda, más Suiza, Islandia y Noruega.
Jouyet, mientras, detalló que tendrá que haber una propuesta de la Comisión Europea y que el principio que se ha fijado es que no haya regularizaciones "globales y masivas" que puedan afectar a la situación de determinados Estados miembros y, de hacerse, que haya un intercambio de información y se vea cuáles son las consecuencias.
"Estamos comprometidos para que Europa siga estando abierta y siga siendo plural, pero eso supone, en el marco de Schengen, una organización nueva, intercambio de información, convergencia de prácticas de regularización y de integración y una armonización sobre la política de asilo y refugio", dijo Jouyet, quien admitió que el capítulo de asilo será más difícil de acordar a 27 teniendo en cuenta las diferentes tradiciones nacionales.
En cuanto a las dificultades para pactar la directiva europea de retorno, el ministro de Exteriores justificó el fracaso de la UE alegando la distinta situación en que se encuentran socios como Francia, España o Italia, países de "acogida obligada", respecto a otros miembros, pero destacó que todo el mundo está de acuerdo en que es necesario armonizar los sistemas de acogida y que ahora hay que discutir las modalidades.
El jefe de la diplomacia francesa tiene previsto hablar esta noche con su colega italiano, Franco Frattini, que asiste en París a una cena informal junto a otros ministros europeos, para abordar precisamente las preocupaciones italianas en materia migratoria. Kouchner no ocultó en este contexto que en su día le "sorprendió" la actitud de Romano Prodi de amenazar a los rumanos con la expulsión.
LA EUROPA DE LA DEFENSA
A la inmigración se une en las prioridades francesas el refuerzo de la defensa europea. En este sentido, el objetivo es lograr una mayor armonización de las defensas nacionales teniendo en cuenta el papel de la UE en el mundo y para aprovechar mejor las ventajas de la globalización.
Francia quiere también centrar sus trabajos en los temas que más interesan a los ciudadanos, como el medio ambiente o la política europea común en materia de energía que garantice el suministro diversificando las fuentes. En el área de la Política Agrícola Común (PAC) se promoverá una agricultura europea "moderna" para contribuir al "equilibrio alimentario mundial".
La presencia europea en Kosovo y Chad o la política euromediterránea, así como la situación en Afganistán y Oriente Próximo formarán parte de la agenda internacional del semestre en el que París quiere abordar igualmente la crisis financiera internacional y los instrumentos para una mayor supervisión europea.
300 ACTOS, 20 MINISTERIALES, 10 CUMBRES
"Tenemos otro objetivo, que es reconciliar Europa con los franceses que votaron no a la Constitución", prosiguió Kouchner. Para lograr esta meta se han organizado unos 300 actos ligados a la presidencia que se desarrollarán en todo el territorio francés, habrá 20 reuniones ministeriales y 10 cumbres con terceros países. La programación incluye una sesión cultural europea para dar a conocer en Francia la cultura del resto de los 26 países comunitarios.
"Queremos una presidencia moderna y participativa acorde con su tiempo y ecológica", resumió el titular galo de Exteriores, quien adelantó que los desplazamientos de ministros y visitantes se harán en tren para contribuir al semestre "verde". La imagen de la presidencia correrá a cargo del diseñador francés Philippe Stark.
Durante una rueda de prensa ofrecida en el Quai d'Orsay junto al secretario de Estado de Asuntos Europeos, Jean-Pierre Jouyet, el jefe de la diplomacia gala aseguró que el pacto europeo por la inmigración ha tenido una acogida "formidable" y que él mismo, que no era "muy partidario de restricciones", se convenció por la actitud de sus vecinos.
Recordó, en este contexto, que España, que llevó a cabo una regularización masiva en 2005, tiene ahora "una actitud muy próxima a la francesa" o que Italia, tanto con Romano Prodi como con Silvio Berlusconi al frente del Gobierno están siendo "bastante estrictos".
Por este motivo, Francia cree que se necesita una "carta común o un pacto sobre inmigración" al menos para los países que forman parte el espacio Schengen, es decir todos los de la UE salvo Reino Unido e Irlanda, más Suiza, Islandia y Noruega.
Jouyet, mientras, detalló que tendrá que haber una propuesta de la Comisión Europea y que el principio que se ha fijado es que no haya regularizaciones "globales y masivas" que puedan afectar a la situación de determinados Estados miembros y, de hacerse, que haya un intercambio de información y se vea cuáles son las consecuencias.
"Estamos comprometidos para que Europa siga estando abierta y siga siendo plural, pero eso supone, en el marco de Schengen, una organización nueva, intercambio de información, convergencia de prácticas de regularización y de integración y una armonización sobre la política de asilo y refugio", dijo Jouyet, quien admitió que el capítulo de asilo será más difícil de acordar a 27 teniendo en cuenta las diferentes tradiciones nacionales.
En cuanto a las dificultades para pactar la directiva europea de retorno, el ministro de Exteriores justificó el fracaso de la UE alegando la distinta situación en que se encuentran socios como Francia, España o Italia, países de "acogida obligada", respecto a otros miembros, pero destacó que todo el mundo está de acuerdo en que es necesario armonizar los sistemas de acogida y que ahora hay que discutir las modalidades.
El jefe de la diplomacia francesa tiene previsto hablar esta noche con su colega italiano, Franco Frattini, que asiste en París a una cena informal junto a otros ministros europeos, para abordar precisamente las preocupaciones italianas en materia migratoria. Kouchner no ocultó en este contexto que en su día le "sorprendió" la actitud de Romano Prodi de amenazar a los rumanos con la expulsión.
LA EUROPA DE LA DEFENSA
A la inmigración se une en las prioridades francesas el refuerzo de la defensa europea. En este sentido, el objetivo es lograr una mayor armonización de las defensas nacionales teniendo en cuenta el papel de la UE en el mundo y para aprovechar mejor las ventajas de la globalización.
Francia quiere también centrar sus trabajos en los temas que más interesan a los ciudadanos, como el medio ambiente o la política europea común en materia de energía que garantice el suministro diversificando las fuentes. En el área de la Política Agrícola Común (PAC) se promoverá una agricultura europea "moderna" para contribuir al "equilibrio alimentario mundial".
La presencia europea en Kosovo y Chad o la política euromediterránea, así como la situación en Afganistán y Oriente Próximo formarán parte de la agenda internacional del semestre en el que París quiere abordar igualmente la crisis financiera internacional y los instrumentos para una mayor supervisión europea.
300 ACTOS, 20 MINISTERIALES, 10 CUMBRES
"Tenemos otro objetivo, que es reconciliar Europa con los franceses que votaron no a la Constitución", prosiguió Kouchner. Para lograr esta meta se han organizado unos 300 actos ligados a la presidencia que se desarrollarán en todo el territorio francés, habrá 20 reuniones ministeriales y 10 cumbres con terceros países. La programación incluye una sesión cultural europea para dar a conocer en Francia la cultura del resto de los 26 países comunitarios.
"Queremos una presidencia moderna y participativa acorde con su tiempo y ecológica", resumió el titular galo de Exteriores, quien adelantó que los desplazamientos de ministros y visitantes se harán en tren para contribuir al semestre "verde". La imagen de la presidencia correrá a cargo del diseñador francés Philippe Stark.